Fuente: La Jornada Rosa Miriam Elizalde 11.11.21
pacíficas. No era una petición formal para ocupar las calles más concurridas de algunas ciudades, sino la notificación de que lo harían y el reclamo de protección de las autoridades. Los firmantes, un pequeño grupo de personas con residencia actual en la isla; la motivación,
el cambiosin apellidos. En virtud de la ley y del obsesivo apoyo estadunidense, el gobierno dijo no.
Han trascurrido casi dos meses y son escasos los indicios de que la marcha ocurrirá en algún espacio físico en Cuba. La maquinaria propagandística de Florida asegura todo lo contrario y añade que se replicará este fin de semana en un centenar de ciudades, la tercera parte en territorio estadunidense.