Fuente: La Jornada/David Brooks 10.02.2020
Podría pararme en medio de la Quinta Avenida y disparar a alguien y no perdería ningún votante. Es increíble, declaró en Iowa el entonces candidato presidencial Trump hace casi exactamente cuatro años. En julio del año pasado declaró que, de acuerdo con la Constitución,
tengo el derecho de hacer lo que quiera como presidente.
Ambas frases indican que el jefe del régimen estadunidense tiene una idea profundamente cínica, pero a la vez precisa, hasta ahora, de sus seguidores; y, segundo, que considera que él es el Estado, algo que comparte con todos los tiranos de la historia.