Virus sin corona

Fuente: https://periodicogatonegro.wordpress.com/2020/04/22/virus-sin-corona/                                                                                                   abril 22, 2020

Los ví por vez primera, de pura casualidad un 21 de septiembre de 1982, festejando el día de la primavera en el, por aquellos días, novísimo Parque Sarmiento.

Recuerdo quedar hipnotizado con los pantalones de cuero rojo de Federico y las remeras a rayas que usaban en esa época. Había pasado la guerra de Malvinas, yo cursaba séptimo grado en una escuela pública en el barrio Saavedra, ellos ya andaban por su segundo disco, “Recrudece”, y la dictadura comenzaba a terminar.

Los hermanos Moura, habían vivido bien en carne propia todo el aparato represor del Estado, su hermano Jorge, miembro del Ejército Revolucionario del Pueblo E.R.P, había sido llevado por la fuerza de la casa en la que vivían en la ciudad de La Plata y nunca más lo volvieron a ver. Su canción “El gran banquete” habla de eso.

Encubiertos en un manto de frivolidad a través de sus primeras canciones los Virus invitaban a despertarse, a no estancarse, a transformarse, a bailar al ritmo de ese nuevo rock, que era una nueva forma de ser, una nueva forma de amar, de evolucionar y revolucionar.

Hablaban del amor libre en “Amor o Acuerdo”, criticaban el consumismo capitalista en “Súper Color” y se reían de la mediocridad argenta triunfalista en “Me fascina la parrilla”.

Todo eso más su sonido original y un frontman como Federico Moura que los diferenciaba del viejo rock avinagrado que había dejado el hipismo argento. Fueron más punks y provocadores que muchas otras bandas que años después afirmarían serlo. “Los críticos cacarean nosotros ponemos los huevos”, cantaban en “Entra en movimiento”, contestándole así a la prensa conservadora que los ninguneaba o los descalificaba permanentemente. 

descarga virus

En diciembre del 83 con el inicio de la democracia sacan “Agujero Interior”, su disco más new wave rockero, producidos por los blondos hermanos Michel y Dany Peyronel. Guitarras distorsionadas, camperas de cuero negro y melodías de teclados bien protagónicas, fueron el combo elegido para despedir a los milicos, un disco bien arriba que los llevó a hacer su primer obras.

En el 84 siguen mutando y sacan “Relax”, un disco más synth pop bailable y dan comienzo a una nueva etapa, más refinada, glamourosa, intimista y libre romántica.

Después de todo no es tan malo sentirse bien”, arrancaba cantando en “Sentirse bien, te lo agradecerán los demás”… continuaba. Y se escucha a un Moura más Federico que nunca, mostrando una sensibilidad poco común en el ambiente rockero -tan machista de esos días-, el Virus crecía contagiándonos de melodías pop, seducción y rebeldía.

En octubre del año siguiente editan “Locura”, yo ya tenía 15 años y los había vuelto a ver en el festival Rock & Pop de ese mismo año. En plena primavera alfonsinista el Virus creció y se expandió por todo el país llegando a contagiar de fiebre amorosa también a muchos países de Latinoamérica.

descarga (1)2557184

Ocho canciones perfectas, de esas que tanto se buscan y muy pocos músicos encuentran. Roberto Jacoby participa en la composición de casi todas las letras, junto a Federico Moura, Eduardo Costa, lo mismo, en “Una luna de miel en la mano”.

La composición musical en su mayoría a cargo de Julio Moura, excepto “Pecados para dos” de Enrique Mugetti. Federico Moura compone también la música en las perlitas del disco, “Dicha Feliz” y “Sin Disfraz”:

“A veces voy donde reina el mar, es mi lugar llego sin disfraz

por un minuto abandono el frac y me descubro en lo espiritual

para amar como si fuera mentiroso y nudista

en taxi boy hotel Savoy y bailamos

y ya no sé si es hoy, ayer o mañana…”,

cantaba Moura en la canción más bailable del disco.

Pasaron casi dos años y llegó la semana no tan santa del 87 y la casa quedó desordenada. La tensión posterior a los levantamientos militares de abril, la inflación y el desempleo marcaron el principio del fin de la era alfonsinista.

Un virus macabro, siniestro y hasta ese momento desconocido (VIH) le firmaba sentencia de muerte a Federico Moura. En ese contexto sacan en Septiembre un disco sentido y hermoso, con inevitable sensación de despedida.

Roberto Jacoby y Eduardo Costa junto a Federico Moura, a cargo otra vez en la mayoría de las letras.

Las músicas de las once canciones estuvieron repartidas entre todos los integrantes.

Rumbos Secretos”, “Encuentro en el rio” y “Transeúnte sin identidad” fueron músicas y letras de Federico y claramente lo muestran más al desnudo que nunca:

“La conciencia otra vez
me revela
lo que siento
y así pierdo lo esencial
voy a recorrer
un mundo incierto
recostado en mis sueños
con el alma
descubierta
explorar

rumbos Secretos…

9786981

En poco más de siete años, el Virus creció, mutó, nos despabiló, nos transformó, nos hizo bailar, cantar y, en cierta forma, nos liberó. Y también pudo transformarse en otro virus, que continuó y continúa…

Un virus sin corona.

La corona se la llevó Federico.

El tío Fredy


Si llegaste hasta acá es porque puede ser que te interese nuestro periodismo, nuestras inquietudes, nuestras ganas de multiplicar la rebeldía, de promover la autonomía, de fomentar la auto-organización anti-autoritaria. Te invitamos a colaborar para que Gatx Negrx siga siendo una de las tantas voces necesarias para recuperar todo lo que nos han robado:  https://periodicogatonegro.wordpress.com/aportes/

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *