Fuente: Umoya num. 103 2º trimestre 2021                          Cristina Reyes Miguel.

GOODWILL ZWELITHINI:El Rey de Reyes zulú

Goodwill Zwelithini, apasionado defensor de la cultura tradicional, la defendía como una fuerza para el bien tanto dentro de Sudáfrica como más allá del continente. Era una figura controvertida, acusado de aferrarse a ideas obsoletas. Además, estuvo dispuesto a trabajar con el Gobierno de minoría blanca en el poder y no quiso cooperar con las políticas de redistribución de tierras del actual gobierno. El líder de la nación zulú en Sudáfrica falleció a los 72 años de edad..

Goodwill Zwelithini nace en Sudáfrica en 1948. Natural de Nongoma, Zwelithini se convirtió en rey del pueblo zulú desde su coronación en 1971. Esta época estuvo marcada por el ‘apartheid’, el régimen racista que tenía a la mayor parte de la población negra oprimida y privada de derechos debido al dominio de la minoría blanca en Sudáfrica. Era descendiente directo del
rey Cetshwayo, que dirigió a la nación zulú en la guerra con el
ejército británico en 1879.
En el año 1994 se desarrollaron las primeras elecciones democráticas en Sudáfrica, y su figura generó una gran tensión, de manera especial al partido del Congreso Nacional Africano (ANC), liderado por Nelson Mandela, debido a que el rey convocó a miles de hombres armados en Johannesburgo. La mayoría se
posicionaban como seguidores del Inkatha Freedom Party (IFP), el partido nacionalista zulú. El desenlace concluyó con un tiroteo frente a la sede del ANC en el que fallecieron más de cuarenta personas y unas 250 resultaron heridas.
Los zulús suponen entre 10 y 12 millones de habitantes de la población total del país, que asciende a 58 millones, lo que les posiciona como la etnia más numerosa de Sudáfrica.

El rey, a pesar de que no contaba con un poder real en el país, tenía una gran influencia sobre su etnia. En 1996, cuando se
aprobó la Constitución democrática, se reconocía el papel de los líderes tradicionales y, pese a otorgarles un rol ceremonial y no ejecutivo, reflejos como el de Zwelithini mantuvieron una influyente posición social, así como política.
En esta última década, el papel desempeñado por el rey de los zulús ha ido cobrando relevancia especialmente en debates como la reforma de la propiedad de la tierra. Y es que, al este del país, Zwelithini controlaba algo más de dos millones y medio de hectáreas a través de una administración y sus intereses se contraponían a los planes del Gobierno para lograr repartos más equitativos. De la misma manera, tuvo una gran influencia en las recurrentes oleadas de violencia xenófoba que se desarrollaron en Sudáfrica en los últimos años.                                                        En el mes de marzo, a los 72 años, falleció el rey de los zulús a consecuencia de la diabetes que padecía. Así informó en un comunicado el príncipe zulú Mangosuthu Buthelezi: “Con el mayor dolor, informo a la nación de la muerte de su majestad el rey Goodwill Zwelithini ka Bhekuzulu, rey de la nación zulú”.
El líder zulú había disfrutado de una vida bastante cómoda, en la que contaba con varios palacios, así como con seis esposas y una treintena de descendientes. Por otro lado, la renta anual, que estaba pagada por el Estado, ascendía a unos 3,4 millones de euros. Se convirtió en el monarca zulú con el reinado más largo, habiendo ocupado el trono durante cerca de 50 años.
Desde unas semanas anteriores a su fallecimiento, Zwelithini estaba ingresado en un hospital de la región de KwaZulu-Natal, en el este de Sudáfrica, debido a los alarmantes índices de glucosa que mostraba. El primer ministro Buthelezi detalló que “trágicamente, todavía en el hospital, la salud de su majestad empeoró, y de consecuencias murió”.
El presidente de Sudáfrica, Cyril Ramaphosa, envió un mensaje al conocer la noticia, en el que quiso resaltar que Zwelithini había sido un monarca “muy querido”.
Además, destacó que sería recordado como un “visionario” con motivo de su gran contribución a la identidad y la unidad de su pueblo. El presidente también insistió en la importancia de la figura del rey zulú para el desarrollo económico del país y especialmente de la región de KwaZulu-Natal, lugar en el que reside la mayor parte de esta etnia.
La familia real zulú en Sudáfrica ha designado a la tercera
esposa del rey Goodwill Zwelithini como regente hasta que
el nuevo monarca asuma el trono. Mantfombi MaDlamini Zulu ostentaba el estatus de “Gran Esposa” desde su matrimonio con el rey en el año 1977.
Así, contaba con el estatus más alto entre las esposas ya que es la hermana del rey Mswati III de Eswatini (anteriormente
Suazilandia), el único monarca absoluto de África. El nombramiento de la reina MaDlamini Zulu se anunció después de una reunión entre los abogados de Zwelithini y unos 200 miembros de la familia real para discutir su testamento. Su nombramiento ha alimentado la especulación de que uno de sus hijos se convierta en el rey de la nación zulú. Se trata de su hijo
mayor, el príncipe Misuzulu, de 47 años. El primer ministro tradicional del difunto rey, Mangosuthu Buthelezi, comunicó que la familia real observaría un periodo de duelo de tres meses, momento en el que se empezarían a tomar decisiones sobre la sucesión al trono. “La pérdida de Su Majestad, el rey, ha sido un golpe tremendo y hay que dejar que la familia llore”.
El 18 de marzo de 2021, en una ceremonia privada que contó con la presencia de unos pocos miembros selectos de la familia real, el rey zulú fue enterrado. Para sus súbditos, “ukutshalwa”, una traducción flexible que significa ‘plantar’, con ello quieren dar a entender que este no es el final de su
influencia en las personas que gobernó durante más de cinco
décadas En la pequeña ciudad de KwaZulu-Natal de Nongoma,
en el noreste del país, se encuentra uno de los palacios del rey Zwelithini, lugar al que han llegado de todas partes dolientes para presentar sus respetos. Para aquellos que lo reverenciaban, el final de su vida mortal se conoce como “ukukhothama”, que significa ‘arrodillarse’. Es una manera simbólica de mostrar la atemporalidad del reino zulú. De una forma metafórica, el rey Zwelithini está arrodillado para que el siguiente en la fila pueda subir al trono. Su partida se entiende como una transición para convertirse en un antepasado, uniéndose a generaciones de otros reyes .zulús.