Los navíos, del modelo Rodman 101, fueron presumiblemente exportados como «buques de navegación marina» o «salvavidas» a pesar de que tienen una montura para ametralladoras de 12,7mm o superiores. Según la legislación española y europea, la existencia de esta montura incluye ese tipo de naves en la lista de material militar y la somete a su debido control de las exportaciones. Rodman, la empresa fabricante de estos barcos, no ha respondido a las preguntas de este periódico.

Las ventas de estos barcos a Marruecos durante ese periodo no aparecen en los registros de exportaciones militares de la Secretaría de Estado de Comercio. En los datos de la Agencia Tributaria de esos años, en cambio, sí figuran exportaciones regulares a Marruecos de «buques de navegación marina o salvavidas» desde la provincia de Pontevedra, donde Rodman Polyships –la división de fibra de este constructor naval gallego– produce estos barcos.

Imágenes de satélite de septiembre de 2009 y mayo de 2010 muestran a estos navíos en la planta de producción de Rodman en Moaña (Pontevedra). Los mismos modelos han sido geolocalizados posteriormente en los puertos de El Aaiún y Dajla, en el Sáhara Occidental. Las imágenes más recientes son de agosto y mayo de 2019.

La posición común del Consejo de la UE, legalmente vinculante, establece que no se debe exportar armamento a países que lo usen para «imponer por la fuerza una reivindicación territorial» o para «fines de represión interna», como es el caso de Marruecos con la población saharaui. La ocupación marroquí en ese territorio viola el dictamen de la Corte Internacional de Justicia de La Haya así como varias resoluciones de la ONU, que lo considera un territorio ocupado.

Por qué son buques militares y no civiles

Los planos oficiales de estas embarcaciones, obtenidos de la propia web de Rodman, lo muestran equipado con una montura de ametralladora en la proa del barco.

Un análisis de imágenes de estos barcos en servicio operados por la marina marroquí también muestra en todos ellos la misma montura, aparentemente con un arma encima. Así se ve en las imágenes de los barcos con código de referencia GC131, GC132, G135 y G138 de la marina marroquí.

Al no poder identificar el arma con precisión en esas fotografías, este diario ha buscado otros modelos del navío Rodman 101 operando en otros países para verificar que la mencionada montura puede portar una ametralladora de 12,7mm o superior.

En esta imagen de un Rodman 101 de la guardia costera de Filipinas se ve claramente como en la misma estructura hay montada una ametralladora M2 Browning de 12,7 mm. Otras imágenes subidas en la cuenta de Twitter del mismo cuerpo confirman que la montura es idéntica a la del resto de barcos de este tipo y a la que muestran los planos del navío.

Esto demuestra que los barcos se han estado exportando como buques no militares a pesar de que la ley española y la europea establecen claramente que deberían considerarse material militar y estar sujetos al control de exportaciones de estos materiales.

Un estudio de anteriores contratos con otros países también indica un posible ‘modus operandi’ a la hora de exportar estos buques militares como si no lo fueran. Rodman Polyships ha estado vendiendo este tipo de barco a numerosos gobiernos de todo el mundo. Nicaragua adquirió cuatro de ellos en 2008 y tres navíos más fueron entregados a la guardia costera de Omán en 2013. También Camerún, Surinam y Filipinas adquirieron estas embarcaciones en 2000 y 2004.

Estas transacciones, sin embargo, tampoco aparecen en el listado de material militar exportado durante esos años de la Secretaría de Estado de Comercio. Las imágenes analizadas de estos barcos en los países mencionados también los muestran portando ametralladoras pesadas, algunas incluso superiores a las de 12,7 mm como es el caso de Nicaragua, según afirman medios especializados.

Blindados españoles en el Sáhara

El Gobierno de Marruecos no solo utiliza navíos de fabricación española para imponer su ocupación en el Sáhara Occidental. La misma investigación ha podido documentar la utilización en El Aaiún, la capital de la región, de vehículos blindados españoles, concretamente el URO VAMTAC, fabricado por la empresa compostelana Urovesa.

El Gobierno español y el marroquí llegaron a un acuerdo en noviembre de 2006 para la venta de 1.200 blindados, a pesar de que la ocupación de Marruecos en ese territorio ya había sido denunciada por la ONU y numerosas ONG, que denuncian las múltiples violaciones del derecho al trabajo, la educación y la salud de los saharauis bajo la ocupación marroquí.

En el momento del acuerdo para vender los blindados la posición común europea sobre exportaciones de armamento (2008) no había entrado en vigor, pero al menos 286 de estos vehículos fueron entregados en 2009, cuando sí lo estaba, según los datos de exportaciones de la Secretaría de Estado de Comercio.

A pesar de que la presencia de estos vehículos ya había sido denunciada por algunas ONG y medios locales, esta investigación ha podido geolocalizar estos vehículos siendo usados en al menos tres lugares de El Aaiún en el Sáhara Occidental.

Tras el desmantelamiento del campamento de refugiados saharauis de Gdeim Izik en noviembre de 2010, los saharauis empezaron una campaña de protestas que fue duramente reprimida. El epicentro de estas movilizaciones fue la avenida Smara de El Aaiún, la capital de la región. En este vídeo, geolocalizado en estas coordenadas, se observan las protestas.

Tras las protestas, la policía y las fuerzas armadas tomaron la ciudad para reprimir las movilizaciones. A partir de esas fechas hemos podido geolocalizar en imágenes y videos varios blindados URO VAMTAC en El Aaiún, la mayoría desplegados en la misma avenida Smara donde se llevaron a cabo las protestas.