Fuente: https://frenteantiimperialista.org/unas-lineas-sobre-nicolas-maduro/ Farruco Sesto
Conocí a Nicolás , creo que en 1998, durante la campaña de Hugo Chávez a la presidencia de la República, un día en que vino a una reunión en la sede del PPT. O tal vez fue después, no lo tengo muy claro. Lo que sí recuerdo con precisión es su imagen imponente subiendo por la estrecha escalerita interna de aquella modesta casa en Maripérez.
Más tarde nos tocó ser compañeros varios años en el Consejo de Ministros del Presidente Chávez, él como extraordinario Canciller y yo haciendo mi trabajo como bien pude tanto en cultura como en vivienda.
Siempre sentí por Nicolás una inmensa simpatía por su inteligencia, su don de gentes, su trato tan afable, pero al mismo tiempo por su conocimiento de la política y su carácter indoblegable, como revolucionario leal y consecuente.
De manera que cuando Chávez lo nombró vicepresidente en 2012, para luego advertirnos que reconociéramos el liderazgo de Nicolás en caso de que circunstancias sobrevenidas así lo requirieran, entendí a mi comandante perfectamente y acepté su instrucción sin ningún tipo de reserva.
Lo acompañé por decisión suya hasta diciembre de 2013 en el gabinete de ministros, y a partir de entonces hasta hoy lo he acompañado en lo que he podido como uno más entre los millones de militantes bolivarianos.
Dadas las dificilísimas circunstancias en que le ha tocado dirigir el gobierno, la jefatura del estado y la propia revolución como proyecto soberano de liberación, mi respeto, mi cariño y mi admiración por él no han hecho sino acrecentarse, pues considero que ha sabido mantener al país en paz sin renunciar a ninguno de los grandes propósitos fundamentales que nos guían y sorteando, como ha demostrado saber hacerlo con inteligencia y gran habilidad, las agresiones y amenazas constantes de las políticas imperiales hacia nuestro país.
Nadie sabe nunca qué nos deparará la historia. Pues considero que hasta la propia vida humana en el planeta pudiera estar en riesgo, dado el complejo juego de la geopolítica en tiempos tan extraños como los que vivimos, donde las tensiones se acrecientan a medida de que la hegemonía de los EEUU comienza a debilitarse.
Pero si me lo preguntan, diría que el liderazgo de Nicolás Maduro es una garantía para nosotros de que Venezuela va a salir adelante y de que nuestro país seguirá haciendo todo lo posible para contribuir a que la causa humana triunfe en paz, y a que todos pueblos del mundo, sin exclusión de ninguno de ellos, encuentren la manera de concretar sus milenarios sueños de emancipación.
(Tomado de mi libro inédito POETA DE LA VIDA, Memoria política)
(Publicado en Correo del Orinoco, el jueves 23 de septiembre de 2021)