Fuente: https://www.wsws.org/es/articles/2021/10/21/pode-o21.html?pk_campaign=newsletter&pk_kwd=wsws Santiago Guillén 21.10.21
Podemos intensifica su promoción del militarismo español
Cada año, España celebra el Día Nacional o el Día de la Hispanidad el 12 de octubre, conmemorando su legado imperialista, especialmente en América del Sur y Central. Anteriormente conocido como el Día de la Raza [española] bajo la dictadura fascista del general Francisco Franco (1939-1978), la celebración es una exaltación descarada del chovinismo, el nacionalismo, el militarismo y la monarquía españoles.
Este año, la celebración se llevó a cabo en medio de una campaña de derecha para defender el legado del imperialismo español. En la víspera de la fiesta nacional que marca la llegada de Cristóbal Colón al Nuevo Mundo en 1492, el líder del derechista Partido Popular (PP), Pablo Casado, describió la violenta expansión colonial de España a las Américas diciendo que “la Hispanidad es el acontecimiento más importante de la historia tras la romanización’.
Casado añadió en Twitter: ‘¿Tiene que pedir perdón el reino de España porque hace cinco siglos descubriera un Nuevo Mundo, respetara a los que estaban allí, creara universidades, creara prosperidad y construyera ciudades enteras?’ Respondiéndose a sí mismo” Pues yo creo que no, por lo que yo he estudiado”.
El líder del partido fascista Vox, Santiago Abascal, denunció el discurso del presidente estadounidense Joe Biden en el Día de Colón. Biden, que se posicionó como un crítico de la brutalidad del colonialismo español, dijo que la llegada de Colón condujo a ‘una ola de devastación’ para los nativos americanos. Abascal describió a Biden como ‘el lamentable presidente de los Estados Unidos’, y agregó: ‘Acaba de atacar la gran obra maestra de la conquista española: la evangelización”, resaltando “su orgullo por España, por nuestra historia y por lo que hicieron nuestros antepasados’, describiendo a las colonias españolas como ‘el imperio de los derechos humanos’.
En medio de esta defensa histérica del bárbaro historial de España en sus colonias por parte de la élite gobernante y los medios de comunicación, el partido ‘Populista de Izquierda’ Podemos, el socio de coalición del Partido Socialista (PSOE) en el gobierno, envió su mayor delegación hasta la fecha para asistir al desfile militar del 12 de octubre en Madrid. Fue una señal de su disposición a defender los crímenes pasados y futuros del imperialismo español. Cuatro ministros de Podemos y varios diputados compartieron un palco de invitados con Abascal y Casado, mientras 2.656 militares marchaban por el Paseo de la Castellana, seguidos de 115 vehículos y 68 aviones sobre sus cabezas.
Después del evento, los ministros de Podemos asistieron a la recepción que el rey Felipe VI otorga a los principales líderes civiles y militares de España, junto con destacados miembros de la clase dominante.
La nueva líder de Podemos, la ministra de Trabajo y viceprimera ministra Yolanda Díaz, tuiteó en apoyo al ejército español: ‘Hoy desfilan nuestras Fuerzas Armadas y quiero mostrarles respeto y gratitud. Un nuevo país avanza: uno que protege, es plural y mira al futuro’.
El descarado militarismo de Podemos confirma la caracterización del WSWS de estas fuerzas como pseudoizquierdistas. Podemos, al igual que sus partidos hermanos a nivel internacional, los Socialistas Democráticos de América en los Estados Unidos, el Partido de izquierda en Alemania, el Nuevo Partido Anticapitalista en Francia y Syriza en Grecia, articulan los intereses de sectores privilegiados de la clase media alta y defienden el capitalismo contra la revolución socialista. Estas tendencias políticamente reaccionarias son proimperialistas, apoyan guerras neocolonialistas y aumentan las provocaciones imperialistas contra Rusia y China con armas nucleares.
Fundada en 2014, jactándose de haber entrado en la política española para ‘democratizar’ el régimen postfranquista y redistribuir la riqueza hacia los más pobres, Podemos ha canalizado la creciente oposición social al capitalismo hacia el PSOE, el principal partido de gobierno de las clases dominantes desde que cayó el régimen fascista franquista en 1978. El PSOE tiene un historial de décadas como partido de guerra imperialista y austeridad de la Unión Europea (UE).
Antes de llegar al poder, Podemos promovió repetidamente el nacionalismo español. Reclutó a destacados miembros del ejército, incluido el ex general de la Fuerza Aérea y jefe del Estado Mayor de la Defensa Julio Rodríguez, el hombre que dirigió la participación del ejército español en las guerras neocoloniales lideradas por Estados Unidos en Afganistán e Irak y que desempeñó un papel importante en la guerra de la OTAN de 2011 contra Libia. Esta provocó más de 30.000 muertes, dejó un país en ruinas y una guerra civil en curso entre las facciones islamistas competidoras que la OTAN había apoyado.
Una vez en el poder en 2019, Podemos encubrió incesantemente las amenazas de golpe dentro del ejército. Ha intentado adormecer a los trabajadores, alegando que los individuos involucrados eran viejos y borrachos, cuando ex oficiales de alto rango declararon su lealtad a Franco y pidieron matar a “26 millones” de votantes de izquierda y sus familias, incluidos todos los votantes de Podemos. Estos oficiales fueron elogiados públicamente por el partido de extrema derecha Vox.
El entonces secretario general y viceprimer ministro de Podemos, Pablo Iglesias, pronunció un discurso televisivo en horario de máxima audiencia desestimando las amenazas, diciendo: “Lo que digan estos señores, con la edad que tienen y ya jubilados, en un chat con unas copas de más, no supone ninguna amenaza’.
Una vez que una serie de videos filtrados revelaron que oficiales en servicio activo defendían a los ex oficiales franquistas, que soldados bailaban canciones neonazis y hacían el saludo fascista, quedaron desacreditadas las afirmaciones de Iglesias de que no había ninguna amenaza, Podemos se comprometió a pedir una investigación. Hace dos semanas Podemos accedió a la negativa del Ministerio de Defensa de hacer públicos los resultados de estas investigaciones. En realidad, Podemos está en connivencia con las fuerzas profascistas en el ejército para encubrir el alcance de las redes de extrema derecha en las fuerzas armadas. Su objetivo es adormecer a los trabajadores ante la amenaza real que enfrentan.
El ejército español también va a ver incrementada su financiación en el último presupuesto de austeridad presentado por el gobierno PSOE-Podemos que se está negociando en el parlamento. Según un estudio de la organización pacifista Centre Delàs d’Estudis per la Pau, el gasto militar total ha aumentado un 9,4 por ciento este año, superando su anterior aumento récord de 19.700 millones de euros en 2020 a 21.600 millones de euros en 2021. Esto contrasta con lo que se gastará este año en cuestiones sociales fundamentales como el fomento del empleo (7.400 millones de euros), los servicios sociales (5.200 millones de euros) o la vivienda (2.200 millones de euros).
Todas estas cifras muestran cómo Podemos no solo protege sino que fortalece al estamento militar. Dejan en evidencia las afirmaciones de que durante la pandemia de COVID-19, no había dinero para desarrollar una estrategia de erradicación del virus e implementar políticas como permanecer en el hogar, detener el trabajo no esencial y subsidiar a las pequeñas empresas. En cambio, el gobierno de PSOE-Podemos apostó por priorizar las ganancias sobre las vidas lo que ha provocado más de 100.000 muertos. Ahora que la economía se ha reabierto por completo, miles de personas todavía se infectan a diario; las muertes semanales aun superan las 100.
Al mismo tiempo, a pesar de que el COVID-19 sigue haciendo estragos en todo el mundo, el gobierno PSOE-Podemos sigue invirtiendo más en armas. En 2021, se gastarán 2.300 millones de euros, 177 millones de euros más que el año anterior, asegurándose así de que sus fabricantes nacionales de armas saquen provecho de la explosiva situación global, mientras todas las potencias imperialistas se rearman y se preparan para nuevos conflictos entre las grandes potencias.
Hay una oposición profunda e históricamente arraigada en la clase obrera en España y todo el mundo al militarismo y al nacionalismo. Sin embargo, grupos de clase media como Podemos son hostiles a este antimilitarismo y no están dispuestos ni son capaces de movilizar a la vasta oposición que existe. El papel de Podemos es una advertencia: la única manera de que los trabajadores y los jóvenes se opongan al camino que lleva hacia la enfermedad, la represión y la guerra es construir partidos trotskistas, secciones del Comité Internacional de la Cuarta Internacional (CICI), en oposición a la pseudoizquierda.
(Artículo publicado originalmente en inglés el 19 de octubre de 2921)