Fuente: https://www.telesurtv.net/opinion/Nuestros-atletas-olimpicos-son-heroes-20210802-0037.html?utm_source=planisys&utm_medium=NewsletterEspa%C3%B1ol&utm_campaign=NewsletterEspa%C3%B1ol&utm_content=36 José (Papo) Coss 2 agosto 2021
Todos nuestros atletas olímpicos que han clasificado y representado a Puerto Rico son héroes y heroínas que debemos reconocer y celebrar.
En la historia de Puerto Rico, el deporte de alto rendimiento ha sido un baluarte de afirmación puertorriqueña, a través de la soberanía que alcanzamos desde 1930 en los Juegos Centroamericanos y del Caribe de La Habana.
Ese logro histórico nos une como nación caribeña y latinoamericana, en medio de la eterna división entre las preferencias de estatus coloniales y de libre determinación.
¿Cómo olvidar los multitudinarios recibimientos de nuestros boxeadores, baloncedistas y peloteros, entre muchos otros deportes, que tanto orgullo patrio nos han brindado con la bandera puertorriqueña en mano?
Sin dudas, la ambición más grande y difícil para cualquier deportista es clasificar y competir en unas Olimpiadas, donde solo participan los mejores del mundo. En el caso de Tokio 2020, se compite en 33 disciplinas deportivas, con 11,711 atletas y 204 países.
Más allá de clasificar, ganar una medalla olímpica es el sítial de honor más alto para cualquier atleta. En nuestra participación olímpica hemos logrado diez: dos de oro, dos de plata y seis de bronce.
Desde el 1948 siempre hemos estado presentes en cada una de las competencias olímpicas, lo que constituye un hito histórico.
El legendario boxeador negro Juan Evangelista Venegas fue el primer puertorriqueño que obtuvo medalla, logrando bronce en boxeo en el 1948. Esta memorable actuación, que también rompió el oprobio racista, coincidió con la fundación del Comité Olímpico de Puerto Rico (Copur), al conseguir el aval del Comité Olímpico Internacional (COI).
Es bueno recordar que el Copur se fundó el 17 de septiembre de 1947, cuando el señor Julio E. Monagas, que presidía la Administración de Parques y Recreos de Puerto Rico, solicitó oficialmente la admisión al COI.
Pasaron casi tres décadas sin ganar medallas, hasta que el boxeador Orlando Maldonado obtuvo bronce en Montreal 1976. Más adelante, Anibal Acevedo en Barcelona 1992, Daniel Santos en Atlanta 1996 y Luis Francisco Ortiz y Aristides González en Atenas 2004, también ganaron bronce en boxeo. Este ha sido por mucho el deporte que más medallas nos ha brindado.
En 2012 en Londres, Jaime Espinal fue el primero en ganar medalla de plata en en lucha olímpica, al igual que el formidable corredor Javier Culson, en 400 metros con vallas.
Como sabemos, la primera persona en conquistar oro olímpico para Puerto Rico fue la tenista Monica Puig, en Río de Janeiro 2016 y Jasmine Camacho Quinn en Tokio 2020.
Sin embargo, no podemos olvidar que Puerto Rico hizo historia al ser la primera Selección Nacional de Baloncesto en vencer al trabuco de Estados Unidos, con un equipo repleto de estrellas de la NBA. Esa gran victoria en Atenas 2004, también nos colocó en los anales del olimpismo internacional.
Hay que decir la verdad. Todas estas extraordinarias hazañas olímpicas se han alcanzado con una ayuda económica limitada y un mínimo de recursos técnicos y científicos.
Sin duda, ha sido una labor desinteresada de cientos de familias de destacados atletas y de formidables entrenadores, así como de las federaciones deportivas del Copur.
En ese contexto histórico todos nuestros atletas olímpicos que han clasificado y representado a Puerto Rico son héroes y heroínas que debemos reconocer y celebrar. A la vez, nuestros medallistas olímpicos representan símbolos eternos del máximo nivel de excelencia deportiva.
Tampoco olvidemos que la meta esencial de la competencia deportiva se remonta a la Antigua Grecia cuando se acuñó la frase: “mente sana en cuerpo sano.” De eso se trata el objetivo principal de la armoniosa y esperanzadora filosofía del olimpismo.
teleSUR no se hace responsable de las opiniones emitidas en esta sección