Fuente: https://frenteantiimperialista.org/militante/ Farruco Sesto 09.07.21
Me agrada el concepto de militante y la palabra misma, con la cual nos familiarizamos desde hace tiempo y que entiendo que tiene su origen etimológico en el vocablo latino “militaris”, que significa “perteneciente al soldado o a la guerra”.
Pero ¿soldado de qué, combatiente de qué? ¿Cuál el sentido de la metáfora en este caso?
El militante lo es, indudablemente, porque adquiere un compromiso actuante con una idea, con una causa, con un proyecto, o, con una organización que los impulsa, y se convierte en un convencido soldado en la batalla por tal idea, tal causa, tal proyecto.
En lo personal, he elegido de por vida ser militante de la izquierda como expresión política de los pueblos que luchan por su emancipación, y reconocerme como parte de ella, de esa izquierda, en donde quiera que se haga presente.
También me gusta ser militante de una revolución como la bolivariana, que inicia el siglo XXI con un enfoque propio para construir el socialismo.
Así como me gusta ser militante de la causa humana, en el sentido en que lo decía el comandante Chávez en homenaje a Guillermo García Ponce en septiembre de 2010: “Fue militante de toda la vida, militante en los momentos más difíciles, militante del heroico Partido Comunista de Venezuela y militante fundamentalmente de la causa humana.”
Como también resaltaba la calidad de la militancia de Alí Rodriguez, cuando en el prólogo a su libro de memorias, el Comandante se refiere a “la calidad revolucionaria, digo, de Alí como militante, como combatiente, como servidor público y, en no menor medida, como pensador”.
Si. Así es. Es lo que somos, cada uno a su manera y en la medida en que bien pueda, sin andarse comparando con nadie y sin acomplejarse por nada. Militantes en multitud de frentes donde nos reconocemos. Militantes del pensamiento liberador. Militantes de la comunicación en la batalla de las ideas. Militantes de la verdad, de la justicia, de la igualdad y del amor. Militantes de la solidaridad internacionalista. Militantes del pueblo en la defensa de la patria.
Eso es sin duda lo que nos corresponde.
Porque también, y aquí abro un paréntesis, hay que advertir que se puede ser militante de lo reaccionario, tal como lo denunció el entonces canciller Nicolás Maduro en una oportunidad en 2012 refiriéndose a “visión activa y militante de la dependencia”, a un “antinacionalismo militante” y hasta a una “traición militante de los principios constituidos que están contenidos en nuestra Acta de Independencia”. Cierro el paréntesis.
No. Ellos, los antipatriotas, nos encontrarán de frente. Porque además algunos de nosotros y nosotras, vale decir millones, sentimos el orgullo insuperable de ejercer nuestra militancia en el PSUV. ¡Más nada!
(Publicado en Correo del Orinoco el 8 de julio de 2021)