Fuente: La Jornada/Europa Press y Afp Lunes 2 de diciembre de 2019, p. 31
Roma. Unas 25 mil personas se congregaron ayer en la plaza de la Catedral de Milán convocadas por las sardinas, movimiento ciudadano surgido en Italia para protestar contra el avance de la ultraderecha con partidos como la Liga, de Matteo Salvini.
Las sardinas es un movimiento cívico fundado el 14 de noviembre por cuatro jóvenes de Bolonia, y la movilización de ayer en Milán siguió a otra que el sábado reunió a decenas de miles en Florencia, luego de las que se han realizado en Módena, Palermo y Nápoles.
En la protesta en Milán, los manifestantes portaron pancartas con lemas como toda sardina tiene derecho a existir
.
Al principio, los asistentes cantaron Bella Ciao, el himno de los partisanos antifascistas italianos.
La lluvia no evitó el éxito de la marcha ayer en Milán: Las sardinas en el agua están en su elemento
, destacaron los convocantes, que insistieron en la petición de no mostrar símbolos de ningún partido político.
Todos somos antifascistas
. Ahora y siempre, resistencia
, fueron algunas de las consignas.
Entre los paraguas se vieron pancartas con dibujos con el símbolo de la protesta: la sardina.
Mattia Santori, uno de los fundadores del movimiento, dijo ante la multitud: nadie manipula nuestro pensamiento; no hay nadie detrás de nosotros, aunque cada día alguien intente dividirnos, nuestra respuesta estará cada vez más en las plazas
.
En cuanto al futuro político de la iniciativa, Santori aseguró que por el momento debemos mantenernos lo más lejos posible de la política. Más adelante, se puede buscar el diálogo con quienes deben dar respuestas
, apuntó.
Uno de los asistentes explicó a la agencia de noticias AdnKronos: “la nuestra es una república basada en el antifascismo. El Bella Ciao no es una canción chic radical. Es el tema de nuestra liberación. A algunos les gustaría llevar a Italia al pasado, pero nunca lo permitiremos. El nuestro es un movimiento que viene de abajo, no partidista, para decirle a la gente que es hora de despertar”.
Las “6 mil sardinas” nacieron en Bolonia, capital de la región de Emilia-Romagna, bastión tradicional de la izquierda, para enaltecer los valores del antifascismo y el antirracismo. El nombre procede de la intención de los convocantes de cerrar filas como en una lata de sardinas y lograr superar en número una convocatoria de un acto electoral de Salvini en Bolonia.
El movimiento nació en respuesta a la inesperada victoria de la candidata de la Liga a finales de octubre para dirigir Umbría, una región que votaba mayoritariamente a la izquierda desde hacía más de medio siglo.
Tras haber hecho estallar su alianza con el Movimiento 5 Estrellas (M5E, antisistema) a principios de agosto y abandonar el gobierno, Salvini dice querer conquistar una a una las regiones italianas para provocar la caída de la nueva coalición en el poder, formada por el M5E y el Partido Demócrata (centroizquierda), mediante elecciones anticipadas.
En su página de Facebook, El archipiélago de las sardinas
explica que quiere reunir a todos los que se oponen a las discriminaciones, a la exclusión y a las ideas soberanistas y populistas.