Fuente: https://www.afribuku.com/fragmentos-en-bozal-presenta-en-guinea-ecuatorial-el-trabajo-de-siete-fotografos-afroespanoles/ ALEJANDRO DE LOS SANTOS 15 DICIEMBRE, 2023
Tras su paso por la última edición de la Bienal Dak’Art, el Centro Cultural de España en Bata presenta desde septiembre esta exposición colectiva para introducir al público guineano la obra de artistas afrodescendientes contemporáneos de España.
Se trata de siete artistas de procedencias muy diversas y con estilos también heterogéneos. Afroespañoles, si nos podemos permitir el término, llevan también la herencia cultural de lugares como Camerún, República Dominicana o Guinea Ecuatorial. Además de la fotografía, van haciendo camino en la moda, la danza contemporánea, la música o la dirección documental, por ejemplo. No son los únicos fotógrafos de esta escena en España, pero la muestra “Fragmentos en Bozal – Nueva Fotografía Afroespañola” los reúne con la voluntad de presentar a algunos nombres importantes una generación que trabaja el medio fotográfico en sus diversas declinaciones, incorporando reflexiones sobre la condición de personas negras integrantes del estado español. Como una de las primeras exhibiciones en hacerlo, primero en el Instituto Cervantes de Dakar durante la pasada bienal, este año la muestra se ha desplazado a Guinea Ecuatorial para presentarse ante el público de la ciudad de Bata.
El término “bozal”, también denominado “lengua guinea” o “habla de negro”, remite a la apelación que recibía la particular forma de hablar de las poblaciones negras en la Península Ibérica durante los s. XVI y XVII. Estas personas tenían en su gran mayoría condición esclava (se denominaba de hecho “bozales” a los subsaharianos esclavizados en España y Portugal) y presentaban unas características lingüísticas propias de adquirientes de español como lengua extranjera. El término ha sido prácticamente olvidado o denostado en el campo de la lingüística hispánica, de la misma forma en que ha operado una amnesia general en la historiografía, en lo que toca a la participación en la trata esclavista por parte de España.
Junto a sus fotografías, los artistas han sido invitados a producir textos o “comisionarlos” a personas afrodescendientes basadas o con un lazo estrecho con España, entre las que se encuentran la periodista Lucía Mbomío y la comisaria y crítica de arte Yadira de Armas Rodríguez. Estos “fragmentos” acompañan las obras, entrando en diálogo con ellas y dirigiéndose al espectador por una doble vía visual y discursiva. Las fotografías también han sido escogidas a través de un proceso participativo de negociación entre comisariado y artistas. Los únicos hilos conductores para la selección han sido el cuerpo y la contemporaneidad, sin una temática definitoria y confiando en un resultado orgánicamente coherente, por encima de la heterogeneidad de visiones de los creadores, como un puzzle en el que los fragmentos acaban encajando. De este proceso surge una muestra coral, una especie de carta de presentación de las propuestas más sobresalientes de una generación de fotógrafos afrodescendientes, estructurada a través de trípticos a escala humana en los que el retrato acaba constituyendo el centro.
Agnes Essonti Luque y Megane Mercury utilizan el autorretrato apropiándose de elementos folclóricos de su herencia cultural. En la serie “La Cordobayangué” de Essonti, la tela wax o el traje de flamenca remiten directamente a su madre, cordobesa, y a su padre de etnia bayangué, en Camerún, mientras que las telas y máscaras africanas que utiliza Megane nos hacen pensar en esos clichés manidos que se aplican al hombre negro. La hispano-mozambiqueña Dilayla Romeo, afincada desde hace algunos años en Maputo, aporta el enfoque de la diáspora “retornada” en una delicada serie en blanco y negro. Sol Bela Mele, que desarrolla su trabajo principalmente en Barcelona acompañando a grandes marcas, se recrea en esta serie retratando con un tono intimista una performance plástica realizada por una pareja. Por su parte, Sergio Aparicio “Okobé” explora el concepto de ceguera, con unos códigos visuales propios de la fotografía de moda. La muestra también deja lugar a expresiones menos convencionales del medio. Heidy Ramírez expone partes de un fotolibro en proceso de producción, en el que explora el concepto de hogar, mientras que Rubén H. Bermúdez impele los limites de la fotografía con su galardonada película “A todos nos gusta el plátano”, en la que de forma experimental presta la cámara a siete personas negras en España para retratarse a sí mismos y su cotidianeidad.
Condensando estas ideas en el título, “Fragmentos en Bozal – Nueva Fotografía Afroespañola” persigue provocar una tensión entre conceptos como historia y contemporaneidad, lenguaje visual y discursivo, cuerpo y voz (palabra), subjetividad autobiográfica y archivo colectivo e histórico. En torno a estos binomios gravita el concepto del sujeto “afroespañol”, que une a los artistas pero que no está definido: es un término abierto, que no queda sometido a criterios como la residencia dentro del estado español o a la obtención de un pasaporte concreto, sino que enlaza con la idea de la persona que participa activamente en una sociedad, aportando ideas y un discurso, intercambiando con sus pares o creando desde una comunidad o grupo de esa sociedad. Un término que puede ser aplicado a los artistas contemporáneos que conforman esta muestra, pero también a aquellas personas negras que en el pasado integraron la sociedad española, dejando un aporte cuya huella aún se puede recuperar y honrar.