El pasado 4 de julio organizamos una asamblea para hablar de la sanidad pública y de sus situación actual. La asamblea fue un éxito. En ella numerosos profesionales de los Centros de Salud del distrito nos pidieron que diéramos a conocer la situación de la Atención Primaria en el distrito de Carabanchel.

Nos dijeron que la situación que se daba cada día, especialmente por las mañanas, de colas de espera a la entrada de los centros de salud (en muchos casos personas mayores o dependientes, esperando al sol…) era escandalosa.

Llama la atención que estén abiertos determinados establecimientos comerciales y de hostelería, que el metro esté abarrotado de gente, y sin embargo los centros de salud tengan a la gente en la calle. La atención telefónica que ha sido tan útil en un determinado momento, no puede sustituir permanentemente a la atención presencial .

Además estas escandalosas colas se suma a la especialmente grave y escandalosa situación que se produce en atención especializada.

Los hospitales y centros de especialidades médicas suprimieron, cuando se desató la pandemia, todo funcionamiento no urgente y se centraron en la atención al COVID. Llevar tantos meses sin que se realicen revisiones y atención en casi todas las especialidades tiene un impacto gigantesco en la salud general de la población. Se habla de que en la Comunidad de Madrid ya hay más de un millón de personas en lista de espera y que eso acarreará un aumento en la mortalidad y un enormes pérdidas en términos de salud y calidad de vida para millones de personas difícil de cuantificar.

Seguiremos exigiendo y demandando unos servicios de públicos de calidad, dotados de los medios humanos y materiales necesarios para desempeñar su labor fundamental y básica con estándares de seguridad y garantías.