El abogado defensor de Rodrigo Lanza, Endika Zulueta, ha manifestado su discrepancia con la sentencia emitida este martes por el Tribunal Supremo por la que se condena a su defendido a 18 años y medio de prisión. Una dura condena a pesar de que el alto tribunal eliminó la agravante de obrar por «motivos ideológicos».

«Seguimos considerando que Rodrigo no tuvo intención de causar la muerte» de Víctor Laínez en los hechos ocurridos en la madrugada del 8 de diciembre de 2017, en el bar Tocadiscos de Zaragoza, subraya en una nota de prensa Zulueta para añadir que los hechos «constituyen un delito de lesiones imprudentes con resultado de muerte y no asesinato».

La defensa de Lanza confía en que «finalmente se dicte una resolución conforme a ello». En este sentido, anuncia que ya han empezado a preparar el recurso de amparo al Tribunal Constitucional, «llegando al Tribunal [Europeo de Derechos Humanos] de Estrasburgo si fuera necesario».

A juicio de Zulueta, «es una paradoja que el Supremo admita que no se acredita móvil ideológico alguno» en la actuación de Rodrigo Lanza, «en un enjuiciamiento al que mediáticamente, y durante años, se le ha dotado de una alarmante carga ideológica».

«Crimen de los tirantes» llamaba la prensa al juicio, y «antisistema» al acusado, recuerda el abogado, lo que «a todas luces ha influido negativamente en el enjuiciamiento». Y «esto debe suponer una llamada de atención para todos», concluye Zulueta.

En prisión desde que sucedieron los hechos en diciembre de 2017, Rodrigo Lanza siempre ha mantenido que actuó en «legítima defensa«.