Fuente: https://frenteantiimperialista.org/blog/2020/01/02/cuba-esperanza-vigente/ Cristóbal León Campos 2 enero, 2020
El aroma del mar que golpea al viejo malecón, se entrelaza con el barullo del cotidiano hablar cubano, murallas que resguardan hoy la capital socialista, mismas que lo hicieran en sus principios coloniales, la expropiación que la Revolución hiciera dotó a los individuos de su dignidad y enterró las diferencias que sustentaban a la sociedad colonial, esa expropiación es también, la evidencia de ese sueño que hasta hoy soñamos es posible que retome su fuerza de tormenta y se difunda como la brisa del mar, sobre los pueblos aún oprimidos y que buscan su libertad.
II
La raíz antiimperialista del pensamiento latinoamericano desarrollado desde los tiempos de nuestras independencias, ocupa un lugar preponderante en el proyecto emancipador cubano, no es extraño ver en las paredes de La Habana Vieja, imágenes de Martí, Bolívar o el Che, tanto en los muros de sus calles como en el arte que simboliza la apropiación popular del ideal libertario que hasta hoy permite resistir al inhumano bloqueo del imperialismo estadounidense.
III
“En busca de un sueño de bella locura” canta Silvio Rodríguez, “un sueño que desata ciclones”, al igual que la melodía de la Nueva Trova, la Revolución cubana desató una tormenta de esperanza que aún alumbra en la penumbra del neoliberalismo a los pueblos marginados y explotados, su ejemplo en Nuestra América, extendió los caminos de la resistencia, renovó las interpretaciones de la realidad con puntuales juicios sobre la teoría y la práctica, además del análisis de los contextos y los sujetos revolucionarios, sin olvidar, nuestras tradiciones de pensamiento, el mundo y sus concepciones puestas de cabeza, tal y como mencionara Carlos Marx, alejado de la ortodoxia, y como planteara José Carlos Mariátegui para nuestros pueblos latinoamericanos al decir que el porvenir no debe ser “Ni calco ni copia, sino creación heroica”. Ese sueño sigue hasta el día de hoy, buscando consumar la utopía de un mundo mejor.
IV
Quien habla de sueños pudiera parecer solitario poeta o quizás un nostálgico sin brújula, hablar hoy de socialismo requiere de un triple ejercicio intelectual y emocional, pues por un lado, es justo analizar la utopía socialista con todo su pasado que incluye errores, desviaciones y momentos de gran belleza, por otro lado, se requiere ir deshilando cada una de las mentiras que de él se han dicho y se siguen diciendo, la ofensiva mediática imperialista no ha tenido descansó en todos estos años, y, en un tercer lado del triángulo en cuestión, los tiempos actuales llaman al retorno de las fuentes originales del marxismo y del pensamiento emancipador de nuestros hermanos países, hablar de sueños es posible mientras caminemos en su búsqueda. Para los intelectuales comprometidos el reloj marca la hora de despertar y comenzar a soñar el futuro de nuestras sufridas patrias.
V
La humanidad exclama por el sueño para dejar atrás los oscuros tiempos que el capitalismo ha marcado con el dolor inhumano de su sinrazón, Cuba y su sueño socialista son el freno a la ignominia descarada del explotador, la bandera socialista ondea todavía en sus calles y escuelas, el sueño vive porque el pueblo cubano resiste con toda su dignidad revolucionaria.
VI
Cuba es una utopía, es la más real utopía de la humanidad, Cuba es un sueño, el sueño más auténtico de Nuestra América, una realidad socialista en constante construcción, “En busca de un sueño” los pueblos se levantan para conquistar su libertad.
VII
Con Cuba caminaremos siempre en busca del sueño y la utopía socialista por el bien de la humanidad