Fuente: La Jornada Ángel Guerra Cabrera 04.07.21
El escudo de vacunas de Cuba y por qué una de ellas se nombra Abdala
En 1869, a los 15 años, José Martí publicó una revista en Cuba llamada La Patria Libre, que adoptó una posición fuerte contra el imperialismo español. El primer y único número incluyó un poema dramático de Martí, titulado Abdala
. El poema es sobre un joven, Abdala, que sale a luchar contra viento y marea para liberar a su tierra natal.
Los versos de Martí dan nombre a la nueva vacuna cubana, Abdala. Ésta, la quinta que ha producido Cuba, fue desarrollada por el Centro de Ingeniería Genética y Biotecnología en La Habana y tiene una tasa de eficacia de 92.28 por ciento, casi tan alta como la de las vacunas de Pfizer (95 por ciento) y Moderna (94.1). Esta vacuna es administrada en tres dosis. Las autoridades cubanas planean vacunar a tres cuartas partes de su población para septiembre. Hasta el momento, han sido administradas más de 2.23 millones de vacunas a los 11 millones de cubanos en la isla: 1 millón 346 mil personas con al menos una dosis, 770 mil 390 con la segunda dosis, y 148 mil 738 con la tercera.
Cuba ya ha planeado exportar sus vacunas a diversos países del mundo y hasta ahora ha producido cinco diferentes candidatos a vacuna, incluyendo Soberana 02 y la vacuna intranasal sin aguja, Mambisa. Esta última, que representa una gran esperanza para la administración de la vacuna en países de bajos recursos, lleva ese nombre por los guerrilleros que lucharon por la independencia de España.
Todas estas vacunas han sido desarrolladas en las duras condiciones impuestas por el bloqueo ilegal de Estados Unidos. Uno de los efectos de este cerco es que ha impedido que Cuba compre ventiladores para tratar a pacientes críticos, ya que las dos compañías suizas que los fabrican fueron compradas por una empresa estadunidense en abril de 2020. En respuesta, Cuba ha desarrollado su propio ventilador (https://n9.cl/dwc8).
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