Fuente: La Jornada
¿Segunda guerra de Texas vs México?
invasión (¡megasic!), lo cual le procuraría derechos militares, de acuerdo con su interpretación de la Constitución (https://nyti.ms/3w0r6fA).
Aquí el problema radica en definir a qué país (sic) adjudicar tal invasión
cuando los migrantes de México son en menor cantidad y se suman a los provenientes del Triángulo Norte
de Guatemala/Honduras/El Salvador –ya no se diga, de Nicaragua, Venezuela y Cuba (https://bit.ly/2R8s9JH)”. ¿De cuántas invasiones
se trata: de una, de cuatro o de siete?
En mi libro El espejo negro de EU: la migración latinoamericana (https://bit.ly/3LFzCqF) abundé profusamente en la deliberada laxitud de la administración Biden, así como la ineptitud de la malhadada vicepresidenta Kamala Harris, que tiene presuntamente como objetivo alterar la ecuación demográfica en favor de la redistritación electorera del Partido Demócrata, como los acusan sus feroces adversarios del Partido Republicano.
El gobierno del presidente López Obrador ha sido atrapado entre el Escila y el Caribdis –monstruos marinos de la mitología griega–: los dos partidos que buscan los votos de los mexicanos en EU.
NYT –muy cercano a los Clinton (Bill y Hillary) y al globalista neoliberal George Soros, mucho más que al Partido Demócrata per se–, da mucho vuelo a los presuntos designios del gobernador de Texas, quien “pondera si invoca los actuales poderes de guerra con el fin de tener mayor autoridad estatal en la frontera, declarando oficialmente una invasión (¡megasic!)
para acoplarse a la cláusula de la Constitución de EU que asienta que los estados no pueden librarse a una guerra excepto cuando sean actualmente invadidos (sic)
. NYT opera su asignada labor demoledora del polémico Abbott –quien ha movilizado miles (sic) de tropas de la Guardia Nacional en la frontera y ha ordenado inspecciones de seguridad de los camiones provenientes de México
, lo cual ha interrumpido el comercio internacional (https://nyti.ms/3kD0TOQ), además de haber ordenado la construcción de 32 kilómetros de un nuevo muro fronterizo
–, mientras defiende
la postura de la administración Biden que califica los actos Abbott de truco político
.
Abbott asignó 3 mil 500 millones de dólares para la seguridad fronteriza, pero no ha tenido resultados tangibles más allá de la captura de estupefacientes y de la numerología de los arrestos, según NYT, que sentencia que “su accionar no ha impedido la avalancha de los migrantes que solamente en marzo cruzaron casi (sic) 129 mil en Texas, pese a la llamada Operación la Estrella Única de Abbott, donde brilla intensamente la zona de Eagle Pass.
Según NYT, ahora los “funcionarios en Texas se preparan a un mayor flujo de migrantes, quienes se espera vengan cuando la administración Biden finiquite la política pandémica de regresar a muchos buscadores de asilo bajo la regla de salud pública conocida como Título 42
.
NYT juzga que las deficiencias
del mandatario texano reflejan los límites del poder de un gobernador para lidiar con una situación enraizada en las turbulencias internacionales, la política migratoria federal y la tracción económica de una mejor vida en EU
.
El cierre dramático de la transfrontera de Texas con los tres estados mexicanos de Tamaulipas/Coahuila/Chihuahua “resultó en promesas de una política más agresiva (sic) del lado mexicano (https://nyti.ms/3vGHR04)”, mientras el canciller mexicano, Marcelo Ebrard –muy cercano a la administración Biden–, fustigó como una extorsión
el sello de la transfrontera por Abbott (https://bit.ly/3s52Vvh).
La realidad es que los partidos Republicano y Demócrata se pelean el alma de México, en la fase de su 4T, a quien buscan otanizar
, si es que no lo balcanizan
y/o ucranizan
antes (https://bit.ly/382Wz8T).
Facebook: AlfredoJalife
Telegram: https://t.me/AJalife
https://www.youtube.com/channel/UClfxfOThZDPL_c0Ld7psDsw?view_as=subscriber
Tiktok: ZM8KnkKQn/
Podcast: 3uqpT1y