Fuente: https://mpr21.info/roban-el-dinero-de-una-campana-publicitaria-antirrusa-en-polonia/ mpr21
En marzo de 2022 Mateusz Morawiecki, entonces primer ministro del Partido Ley y Justicia (PiS), inició una campaña publicitaria #StopRussiaNow en Polonia. El objetivo era refrendar lo evidente ante la Unión Europea y los países de la OTAN, para que no hubiera dudas: en la Guerra de Ucrania el agresor es Rusia.
El coste de la publicidad en el mayor portal de noticias en línea de un estado miembro de la OTAN, Onet, no era insignificante: casi 23 millones de zlotys (5,7 millones de dólares).
Ahora la Oficina de Auditoría Superior de Varsovia informa al portal que una gran parte de los fondos gastados en la campaña han sido malversados. “Estamos preparando un informe sobre este caso para la fiscalía”, añadieron.
Como suele ocurrir, mientras el gobierno del PiS mantuvo las riendas, la porqueria se guardó bajo el felpudo. Pero todo cambio en diciembre, cuando llegó la coalición del primer ministro Donald Tusk y empezó a sacar los trapos sucios de sus antecesores. A partir de entonces la Auditoría se interesó por la campaña de intoxicacion, pero sólo porque era una cuestión de dinero.
Según la investigación de Onet, Morawiecki confió la campaña al banco Gospodarstwa Krajowego (BGK), que adjudicó un contrato a dedo a Tak Bardzo (TBG), una agencia de publicidad relativamente poco conocida con sede en Varsovia.
El chiringuito TBG está dirigido por Paulina Palka, cuyo marido Piotr es un político del PiS asociado a Andrzej Duda, el presidente de la República.
Luego TBG utilizó a otras dos empresas vinculadas al partido gobernante: Ixodes y 1450. La agencia incluso pagó 90.000 zlotys por servicios jurídicos a una empresa propiedad de su fundador, Rafal Sikora.
A TBG le cobraron 15,4 millones de zlotys (3,88 millones de dólares), pero la contabilidad del chiringuito muestra que sólo se gastaron 2,8 millones de zlotys en compras de medios en línea, que se suponía que representaban la mayor parte del contrato.
El otro subcontratista, Ixodes, recibió 4 millones de zlotys por servicios que incluían la conducción de vehículos de marca por las capitales europeas y la creación de un sitio web, stoprussianow.eu (http://www.stoprussianow.eu/), que acabó desapareciendo apenas cinco meses después de su lanzamiento.
Los costes de la campaña fueron exorbitantes, dijo a Onet un ejecutivo de relaciones públicas polaco que pidió permanecer en el anonimato, añadiendo que las sumas involucradas equivalían al presupuesto anual de un cliente mediano.
“Dada la importancia del presupuesto para las actividades de promoción y las disposiciones del contrato y de la oferta, se puede decir claramente que nos enfrentamos a una mala gestión a gran escala”, afirmó la fuente de Onet.
Los resultados oficiales de la auditoría se esperan para junio, pero es obvio que quienes saquean el dinero de su propio pueblo, los chorizos, no son moralmente aptos para iniciar campañas de ningún tipo contra ningún país del mundo.