TeleSUR Pablo Jofre Leal
11 de junio de 2024 Hora: 11:31
Las letras a la que hago referencia de la Sra. Agosin son en virtud de su cargo de presidenta de la mencionada Comunidad Sionista de Chile, que ha sido publicada en el Diario El Mercurio, que actúa como vocero de la derecha política y económica chilena.
Leí en estos días una columna de opinión firmada por la Sra. Ariela Agosin, jurista del estudio de abogados donde uno de sus propietarios es Gabriel Zaliasnik, abogado sionista, ex presidente de la Comunidad Judía de Chile (CJCH) y vinculado a múltiples caso de defensa de personajes con graves acusaciones, como fue el caso del ex presidente peruano Alberto Fujimori, parlamentarios vinculados a casos de corrupción, “causas peliagudas” (1) tal como el Caso Spiniak (respecto a abusos sexuales) , Penta y SQM (referido al financiamiento ilegal de la política chilena). Un abogado con redes que se extienden desde la comunidad judía de la que forma parte hasta el partido de derecha Unión Demócrata Independiente (UDI).
Las letras a la que hago referencia de la Sra. Agosin son en virtud de su cargo de presidenta de la mencionada Comunidad Sionista de Chile, que ha sido publicada en el Diario El Mercurio, que actúa como vocero de la derecha política y económica chilena. Agosin, presidenta de la principal barra brava que tiene el régimen sionista en esta parte del mundo, pretende hacernos creer con su carta, que la hipocresía está del lado de aquellos que combaten al régimen nacionalsionista israelí. La vocera de Israel en Chile afirma en la columna de opinión publicada en El Mercurio, una serie de ideas difusas, claramente falsarias y destinadas a confundir a los lectores de este medio e influir sobre las autoridades políticas chilenas, con respecto a un legítimo caso de boicot a la presentación de un director de orquesta israelí.
“La paradoja de la hipocresía moderna” es el título de este libelo donde se da cuenta de la decisión de Centro de Extensión Artística y Cultural (CEAC) de la Universidad de Chile, centro de estudios superiores del país sudamericano, que decidió cancelar la presentación de Yeruham Sharovski, un director de orquesta israelí. Nueva situación que enfrenta a la CJCH con entes públicos y que seguramente reflotará las permanentes críticas que el sionismo criollo mantiene con personas, instituciones incluso con el presidente chileno Gabriel Boric respecto a las justas críticas y denuncias del actuar violatorio de los derechos humanos contra el pueblo palestino a manos del régimen nacionalsionista israelí. Un mandatario chileno que ha sido calificado de antisemita, sin que ello haya significado determinaciones respecto a esta comunidad israelí, como también el embajador sionista en Chile Gil Artzyeli u otras opiniones de la comunidad sionista del país sudamericano, que suele victimizarse permanentemente y pensar que el mundo gira en torno a sus “sufrimientos”
La carta en cuestión sostiene, por parte de la Sra. Agosin. (2)
“Señor director: Vemos con consternación lo ocurrido con el director de orquesta argentino-israelí Yeruham Sharovski, cuya presentación en el Teatro de la Universidad de Chile, junto a la Orquesta Sinfónica Nacional, fue suspendida por decisión del centro de Extensión Artística y Cultural (CEAC), organizadores del evento. El motivo que se indica: «la tensión actual global». Sharovski ha dirigido más de 50 orquestas en más de 20 países. Dirigió la Orquesta Filarmónica de Moscú y la Filarmónica de Kírov, en San Petersburgo. Fue director artístico y maestro titular de la Orquesta Sinfónica Brasileña de Río de Janeiro y fue nombrado «Ciudadano Honorario de Río de Janeiro”. Asimismo, dirigió la Orquesta Sinfónica Nacional de Chile en el año 2000 y hoy es director titular de la Orquesta Sinfónica Nacional de Colombia. Digamos las cosas como son. El director de orquesta fue cancelado por ser israelí”.
La decisión respecto al director y toda la parafernalia mediática mencionada por Agosin, es el resultado de políticas de denuncia y decisiones que debemos tomar como sociedad, que permitan evitar el lavado de imagen del régimen israelí. Impedir toda participación de aquellos que personifican a la entidad nazisionista es una obligación, un deber moral. Tal como se hizo con el régimen de apartheid sudafricano. Y esto, por más medallas y méritos artísticos que exhiba el Sr. Sharovski, resulta evidente la lógica y acertada decisión por parte del CEAC, de no hacer efectiva su presentación, justamente por ser ciudadano de un régimen que debe ser castigado por sus crímenes, contra todo aquello que pretenda baldear la basura exhibida por la entidad infanticida israelí, sea en el campo deportivo, participación en ferias militares, intercambios e investigaciones en el campo de la educación superior, compra y venta de armas. En fin, todo aquello que nos permita avanzar en ponerle fin al ente infanticida israelí en una campaña global de boicot, sanciones y desinformación.
La Sra. Agosin continúa con su perorata de tratar de demostrar que hacer uso del legítimo derecho a impedir el lavado de imagen de un régimen criminal – cancelando la presentación de Sharovski – es parte de una ideología del mal y usa el concepto de justicia como si su amado Israel fuese el ente más justo del mundo y que sus acciones no estuviesen impregnadas de perversidad
“Los mismos que claman por justicia han decidido amenazarlo y censurarlo, despojándolo de sus logros y marginándolo en nombre de una ideologizada idea del bien y el mal. La pretensión de solo permitir artistas que provengan de países con los cuales se esté de acuerdo con el gobierno de turno empobrece el debate. La ironía radica en que muchos de los que abogan por los derechos humanos también son los primeros en acallar a quienes no están de acuerdo
Verborrea clásica de la Sra. Agosin y los suyos, charlatanería crónica propia de la Hasbará con los cuales son imbuidos desde pequeños los sionistas y sus adherentes, que nunca va al fondo el asunto pues ello implica sacar a la luz todas su contradicciones y falsedades. En mi caso, conozco en carne propia la práctica de cancelación, de ataques siniestros, de política del terror de ataques soterrados que el sionismo, en este caso el criollo pone en acción. Como es a través del envio de cartas a mis empleadores, a para que no haga clases como lo hizo el ex presidente de la CJCH, el Ingeniero Civil Industrial Gerardo Gorodisher y el argentino licenciado en Economía Marcelo Isaacson con el ex rector de la Universidad de Chile Ennio Vivaldi y la directora de la Facultad de Comunicación e Imagen de la Universidad de Chile María Loreto Rebolledo.
Lo viví con sus presiones al Ministerio de salud y su máxima autoridad – la ex ministra Dra. María Begoña Yarza – con el concurso de parlamentarios serviles como los senadores Felipe Kast y Javier Macaya lanzando acusaciones a través de medios de ultraderecha como Ex Ante El Libero y otro de carácter centroderecha como el Dínamo (3) generando presiones al gobierno y a la mencionada ministra de salud, para lograr mi despido. Ataques a través de colonos chilenos en tierras palestinas, que le han jurado lealtad a Israel, como es el caso del denominado presidente de la comunidad de chilenos en Israel Gabriel Colodro. Lo he vivido con cartas de organizaciones internacionales judías como B’nai B’rith destinadas a demonizar mi trabajo. No necesito que me lo digan, lo he vivido al escuchar sus programas en redes sociales, sus escritos en revistas sionistas donde el ataque personal resulta despreciable e impune frente a lo timorato de nuestra sociedad frente a las presiones delictivas del sionismo.
Resulta evidente que la marginación del citado director de orquesta, cuya defensa es asumida en forma militante por la Sra. Agosin, es argumentada con una serie de incoherencias y un lenguaje sibilino destinado a hacer creer que la israelí es una sociedad civilizada cuando es responsable de los mayores crímenes que ha visto nuestra humanidad en los últimos 80 años. Ustedes Sra. Agosin no cancelan la disidencia, la exterminan, la masacran, la expulsan de sus tierras, destruyen sus escuelas, sus universidades, hospitales, mezquitas e iglesias cristianas. Destruyen viviendas e infraestructura básica, exterminan a hombres y mujeres. Que sólo en los últimos 8 meses ha significado el asesinato de 17 mil niños, entre ellos centenares de recién nacidos.
La sociedad israelí no dialoga Sra. Agosin. En modo alguno permite esa acción de respeto por el otro y la evidencia es la puesta en marcha de la llamada ley de estado nación judía (4) que sí cancela al otro – en este caso al pueblo palestino – al diferente, al Goyim (al no judío) que le niega su identidad, el derecho de su idioma, su historia, invisibilizada bajo la sionización de aldeas, pueblos, la usurpación de costumbres, gastronomía, vestuario. Un sionismo que ha construido una historia que recién comienza el 14 de mayo de 1948, mitificando historias y haciendo suyas ideas inaceptables como considerarse un pueblo elegido al cual se le concedió una tierra que no le pertenece. Apropiándose de la identidad cultural, territorial del pueblo palestino. El marginar a Sharovski es, por tanto, un acto de dignidad claramente puesta en escena por una ideología del bien, de esta visión de mundo que considera al otro como ser humano, no bestia. Que respeta a mujeres y niños, que no los extermina, que cree en la autodeterminación y no en la ocupación y colonización, que ama la vida y no la extermina. Efectivamente hay una disputa entre una ideología del bien, situada en la trinchera opuesta a la ideología signada por el sionismo, que es la más perversa que haya dado la humanidad en los últimos 80 años. La ideología nacionalsionista es la expresión del mal, sin discusión.
La sociedad israelí es usurpadora, genocida, “Resulta que casi todos los judíos son ladrones… Lo digo de una manera deliberada y sencilla porque desgraciadamente es verdad» (5) según lo sostuvo el propio ex ministro David Grün – David Ben Gurion – según lo cita el historiador israelí Adam Raz. Una comunidad que ocupa y coloniza una tierra que pertenece al pueblo palestino y no aquel que por presiones de potencias tras el fin de la SGM nace el 14 de mayo de 1948. La hipocresía surge de las palabras de la comunidad que defiende los intereses de Israel en Chile, que habla de diálogo cuando el único lenguaje que utiliza es el asesinato de aquellos que defienden su tierra, que resisten a 76 años de ocupación, colonización y exterminio
La Sra. Agosin continúa con su lenguaje sibilino y nos dice en su columna
“Esta actitud es contraproducente, peligrosa y se asemeja al matonaje, reemplazando el debate por una cultura de miedo y conformismo. ¿Qué pasaría si marginamos a cada persona solamente por el país al que pertenece? Pronto no quedará nadie”.
Sra. Abogada, presidenta de la comunidad representante de Israel en Chile, usted da a conocer palabras muy ciertas, pero en la dirección equivocada. La conducta peligrosa, propia de matones, quien margina y que ha generado durante 76 años una cultura propia de regímenes como era el Tercer Reich es la entidad nazisionista israelí, que con su política de solución final estilo Conferencia de Wannsee intenta exterminar a la población Palestina, expulsarla de su tierra, robar en forma crónica sus bienes, impedir el retorno de los refugiados. Se pregunta usted ¿qué pasaría si marginamos a cada persona solamente por el país al que pertenece? Pronto no quedará nadie. ¿Es real lo que escribió, cree a ciencia cierta cada palabra llevada la determinación de ser publicada? Lo digo pues al amparar al sionismo israelí lo que hacen sus defensores, no es sólo avalar la marginación, sino que apoyar el exterminio de un pueblo que a estas alturas representa el 2% de la población de la Franja de Gaza (46 mil palestinos asesinados) el 4% de ellos heridos, el 75% de sus viviendas destruidas. Efectivamente, al ritmo macabro y perverso de la policía de solución final que lleva a cabo el sionismo israelí, las tropas SS – soldados sionistas – contra Palestina, pronto no quedará nadie.
Autor: Mohamed Salem. Crédito: REUTERS
La contumacia argumentativa surrealista de la Sra. Agosin no para y afirma
“Si continuamos por esta senda, nos encontraremos en un mundo donde la única voz que quedará es la del «que grita fuerte”. Es hora de reflexionar sobre nuestras acciones y asegurarnos de que no estamos traicionando los valores que pretendemos defender”
Efectivamente si el nazisionismo y sus avales continúan por esta senda irá quedando no sólo el vociferante sionista “los que gritan más fuerte” que son los mismos que asesina a mansalva, que ocupan, colonizan, exterminan y se presentan como victimas cuando son los victimarios, genocidas, infanticidas. Son precisamente los sionistas los que pretenden es quedar como la única voz en tierras palestinas. Mi llamado a la Sra. Agosin y a los suyos es reflexionar sobre sus acciones como “chilenos” y de aquella sociedad que su comunidad parece defender y amar más que la propia.
Mientras usted y los suyos Sra. Agosin siga avalando a diestra y siniestra a Israel, incluso aceptando que jóvenes chilenos sionistas hagan su servicio militar, no en Chile – como lo reconoce Hernán López director ejecutivo de la Comunidad de Chilenos en Israel (6) sino que en los territorios ocupados palestinos. Mientras sigan avalando el actuar de dirigentes acusados de crímenes de guerra y lesa humanidad – como es el primer ministro Benjamín Netanyahu y el ministro de guerra Yoav Gallant – líderes del régimen más maligno y trastornado que haya dado la humanidad en los últimos 80 años, ustedes sólo podrá presentar la cara más hipócrita de aquel que ha lanzado miles de toneladas de bombas, fósforo blanco, destruyendo escuelas, mezquitas, iglesias cristianas, hospitales, dejando morir a miles de niños y mujeres bajo los escombros, apelando a la política de negarle los alimentos a una población hambrienta, como armas de guerra. Si ustedes como comunidad no son capaces de denunciar esto y exigir el cese del exterminio del pueblo palestino, simplemente aparecerán como hipócritas y con actuaciones absurdas, como hacernos creer que impedir la actuación de un director de orquesta es un crimen o una cancelación.
No hay lugar a dudas, no hay doble lectura respecto a la disposición llevada a la práctica de impedir la actuación de Sharovski. Dicha revocación artística, es lo mínimo exigible por hacer desde esta parte del planeta, que permita desplegar todos nuestros esfuerzos y así ampliar una política de lucha que logre la total eliminación del sionismo como ideología del horror y perversidad.
Articulo Para Hispantv
- Por su experiencia acumulada, la revista Chambers & Partners distingue a Zaliasnik como uno de los mejores abogados en dos categorías: White Collar Crime (delitos de cuello y corbata) y Litigation (litigios). En dicha publicación, le reconocen una “vasta experiencia en el manejo de casos criminales prominentes y de alto perfil “. https://www.theclinic.cl/2020/11/03/quien-es-gabriel-zaliasnik-el-abogado-que-asumio-a-ultima-hora-la-defensa-de-victor-perez/
- https://litoralpress.cl/sitio/Prensa_Texto?LPKey=Q7CV35RSNSSXX722HUJRTEBPA5OIV4ED63ZRKLR52YFCLRIQ6JXA
- https://www.eldinamo.cl/politica/2022/07/01/la-moneda-baja-el-perfil-a-ciber-espionaje-irani-para-boric-y-camara-de-diputados-abre-comision-investigadora/
- https://elpais.com/internacional/2018/07/19/actualidad/1531973268_687632.html
- Las palabras de Ben Gurion, recogidas en las minutas de una reunión del comité central de Mapai, la formación que luego se convirtió en el Partido Laborista Israelí, celebrada el 24 de julio de 1948, entran de lleno en el campo de las que han escrito numerosos historiadores antisemitas. El documento que cita Raz se halla en los archivos de dicha formación política. https://www.publico.es/internacional/saqueo-israeli-propiedades-palestinas-1948-revisitado.html
- https://cchil.org.il/el-renacer-del-sionismo-chileno