Irán y Rusia han cambiado oficialmente del sistema de compensación financiera occidental Swift por un mecanismo de transferencia interbancaria directa, anunció Mohsen Karimi, subdirector del Banco Central de Irán.

El domingo Karimi dijo en la televisión pública iraní que el nuevo mecanismo permite a las empresas de ambos países comerciar en sus respectivas monedas nacionales, en lugar de utilizar el dólar o el euro.

“Hemos vinculado las redes de correspondencia financiera de los dos países”, explicó.

“Esto significa que los bancos de nuestros dos países ya no necesitan que Suiza se comunique entre sí y los bancos comerciales de ambos países pueden establecer relaciones de corretaje entre sí. El exportador [iraní] ahora puede facturar a la parte rusa en riales y recibir dinero a través de bancos rusos en Irán”, añadió Karimi, señalando que el sistema también permite pagos en rublos rusos.

El sistema de mensajería bancaria de alta seguridad Swift, que tiene su sede en Bélgica, permite transferencias financieras en todo el mundo. Aunque varios países tienen sus propios sistemas de mensajería, la mayoría de las transacciones internacionales todavía se realizan a través de Swift. El año pasado, importantes bancos rusos quedaron fuera de servicio como parte de las sanciones económicas impuestas por las potencias occidentales.

El bloqueo económico ha obligado a Rusia a promover activamente su sistema de pagos nacional, SPFS, introducido por primera vez cuando Estados Unidos impuso sanciones al país en 2014, como alternativa al Swift. El sistema, que facilita la mensajería financiera entre bancos a escala nacional e internacional, tuvo 514 participantes, incluidas 131 entidades extranjeras de 15 países, en el primer semestre del año pasado.

Tanto Irán como Rusia son víctimas de las sanciones ilegales impuestas por las potencias occidentales. Los dos países anunciaron por primera vez planes para eliminar el dólar y el euro de los acuerdos mutuos y utilizar sistemas financieros alternativos en su comercio en 2022.

A finales de diciembre del año pasado, el director del Banco Central iraní, Mohammad Reza Farzin, realizó una visita de dos días a Moscú, donde se reunió con la presidenta del Banco Central ruso, Elvira Nabiullina. Ambos firmaron un acuerdo que formalizó el nuevo mecanismo de pagos internacionales.