En 1937 ediciones Tierra y Libertad decidió publicar una serie de crónicos del escritor anarquista Mauro Bajatierra que recogiesen la experiencia vivida en las trincheras de Madrid y Guadalajara durante el transcurso de ambas batallas en la guerra civil. En total 58 crónicas divididas en dos partes precedidas de un prólogo de Federica Montseny compusieron la obraCrónicas del frente de Madrid. Esta selección fue solo una pequeña muestra de la gran labor llevada a cabo por Mauro Bajatierra como corresponsal de guerra para el periódico CNT durante toda la contienda. Mauro Bajatierra fue autor de unas setecientas cincuenta crónicas que fueron publicadas, además de en CNT, en periódicos libertarios como Fragua Social y Umbral, de Valencia, o en Solidaridad Obrera y Tiempos Nuevos de Barcelona. Este tipo de publicaciones (recopilaciones de crónicas) fueron comunes en la época, encontrando otros ejemplos dentro del campo republicano, como el de los periodistas Elias García, Manuel Zambruno, Mariano Perla, Eduardo de Ontañón o Jesús Izcaray. Sin embargo, y, en palabras de Julián Vadillo, “hay coincidencia en que las crónicas de Bajatierra son las más cercanas, las más humanas y, quizás, las mejores del momento”. Han trascurrido ochenta y tres años desde su publicación y el libro, Crónicas del frente de Madrid, vuelve a estar disponible gracias a su reedición por parte de la editorial Piedra, Papel, Libros. En esta reedición, que incluye un prólogo sobre la biografía de Mauro Bajatierra elaborada por el historiador Julián Vadillo, podemos acceder a la obra original de forma íntegra.

Quizás, en 1937, este prólogo biográfico fuese innecesario dada la trascendencia de Mauro Bajatierra dentro del movimiento libertario. Sin embargo, tras casi ocho décadas condenado al ostracismo y el olvido producen que a día de hoy sea imprescindible. A través de esta pequeña reseña del autor, Julián Vadillo nos permite acercarnos y conocer mejor la figura de Bajatierra y comprender mejor sus motivaciones, carisma y planteamientos, reflejados en sus publicaciones. Mauro Bajatierra nació en Madrid a finales del siglo XIX en el seno de una familia acomodada. Se inició en el mundo laboral desempeñando el oficio de su padre, panadero. Aunque siempre estuvo vinculado a la UGT, su pensamiento le vinculó a las organizaciones emanadas dentro del movimiento libertario, participando en sus medios, sus congresos y sus mítines. Toda una vida guiada bajo el compromiso de clase que tuvo un trágico final al ser asesinado en su domicilio el 28 de marzo de 1939.

A través de un estilo cercano, desde la trinchera o por medio de anécdotas que le hicieron llegar los soldados, Mauro Bajatierra trasladó las vivencias del frente a todo el campo republicano. Narró en primera persona los combates, la vida en el frente o las consecuencias de la guerra en la retaguardia. Fue un periodista que estuvo en primera línea, luchando, pero también informando de lo que ocurría en los frentes que visitaba a través de la pluma y la cámara fotográfica. En el caso de la ciudad de Madrid, su radio de acción se centró en el frente oeste, desde la Ciudad Universitaria hasta las humildes viviendas del barrio de Usera. En Guadalajara, el centro de acción de Mauro Bajatierra fue la Alcarria, emplazamiento donde se dieron los principales enfrentamientos. Nos aporta toda una serie de información que de otra forma careceríamos. Es óbice que conocer lo que ocurrió en Madrid durante el otoño de 1936 y el invierno de 1937 o en Guadalajara, en la primavera de ese último año, solo a través del trabajo Crónicas del frente de Madrid, es imposible. No obstante, es una obra fundamental al aportar toda una serie de datos y matices, para conocer de primera mano la vida en las trincheras, la carestía de medios en el frente y la retaguardia, las redes de solidaridad dentro de la esfera anarquista, las tensiones entre distintas organizaciones de izquierdas, el uso de la propaganda o la historia del periodismo y el anarquismo durante la guerra civil española.

Crónicas del frente de Madrid es un libro imprescindible para comprender mejor, no solo lo que ocurrió en las trincheras madrileñas y guadalajereñas, sino también, para conocer de primera mano el sentir de los participantes en la contienda en los peores momentos para la capital.

Fernando Jiménez Herrera

Fuente: El Obrero