Por A. RAMÍREZ PARA CANARIAS-SEMANAL.ORG.-

 Canarias es la cuarta Comunidad del Estado español con más exceso de mortalidad con 1.600 muertes más de las esperadas, lo que implica un incremento del 13,64%, según el Sistema de Monitorización de la Mortalidad (MoMo) realizado por el Instituto de Salud Carlos III.

Aunque el Archipiélago no ha sido una  las regiones con más alta mortalidad por Covid 19 en relación al resto de Comunidades autónomas, el pasado año fallecieron 458 personas más de lo esperado, mientras que en los 8 meses de este año esta cifra se triplicó hasta alcanzar las 1.600 por encima de lo previsto. ¿Qué fenómeno o fenómenos están provocando estos incrementos?

Las defunciones por todas las causas se elevaron un 13,64%, según datos del Instituto Nacional de estadística. El exceso de mortalidad triplica al de 2021.

En el conjunto del Estado español, hasta el pasado mes de julio las muertes se situaron en 275.872 personas, 13.317 más que el mismo dato del año pasado (+5,15%).

La mayor parte de los decesos producidos en 2022 se acumulan en los meses de verano, según el sistema de monitorización de la mortalidad diaria (MoMo).

SIN QUE SE HAYA REALIZADO NINGUNA INVESTIGACIÓN AL RESPECTO

Pese a la enorme gravedad del fenómeno social reflejado por esta estadística, hasta el momento ninguna de las Administraciones canarias han anunciado la intención de realizar algún tipo de investigación al respecto. ¿Cuál es la razón?

Algo que requeriría, con toda seguridad, efectuar un estudio con la participación de especialistas de diferentes áreas sanitarias, económicas y sociales, para poder determinar el grado de influencia en este espectacular incremento de la mortalidad que pueden estar teniendo el aumento de los niveles de pobreza, el colapso de la atención primaria en el Servicio Canario de Salud, el retraso en los diagnósticos y pruebas, los tiempos de espera para una consulta con el especialista o decisiones políticas como comenzar a tratar el Covid19 como una «gripe» a pesar de que aún no se hayan dado las condiciones objetivas en la evolución del virus para ello.

Dado que asimismo, a nivel planetario se ha experimentado igualmente una sorprendente multiplicación de la mortalidad durante los dos últimos años, no debería quedar tampoco fuera de una exhaustiva y pública  investigación, las características de las vacunas anticovid que  en centenares de millones se han administrado en todo el mundo.

Parece que ha llegado la hora de que la sociedad  comience a exigir claridad y transparencia en relación con los procedimientos utilizados en la aplicación de estas polémicas vacunas, así como sobre la discutida seguridad  que estas ofrecen para la salud.