Fuente: https://mpr21.info/el-misil-que-cayo-en-la-frontera-polaca-ridiculiza-a-los-sicarios-de-la-otan/ mpr21
La caída de un misil ucraniano en la localidad polaca de Przewodow, matando a dos campesinos, ha dado lugar a las reacciones que cabia esperar por parte de sus principales protagonistas.
Polonia y Ucrania atribuyeron la responsabilidad del misil a Rusia hasta que Estados Unidos cambió la versión oficial. Ese tipo de países, sumisos como perritos falderos, no tienen nada diferente que decir, ni siquiera en aquello que les concierne directamente
Naturalmente, los medios de comunicación de todo el mundo se lanzaron a la piscina con la falsedad oficial, hasta que Estados Unidos la cambió.
El lanzamiento del misil por parte de Ucrania no fue ningún error, sino una provocación deliberada para escalar la guerra e involucrar en ella a Polonia de una manera abierta.
Con el aluvión de falsedades que vamos leyendo en los últimos meses, la historia del misil que cayó en Polonia podía haber sido otra más, que hubiera colado exactamente igual que las anteriores: la matanza de Bucha, el ataque al Puente de Kerch, la voladura de los gasoductos Nord Stream, etc.
Esta vez Estados Unidos no ha dejado pasar la provocación ucraniana porque, a diferencia de Ucrania, no le interesa escalar la dimensión de la guerra.
Ucrania necesita ese tipo de provocaciones porque es absolutamente consciente de que tiene la guerra perdida desde el primer minuto o, en otras palabras, que de ninguna manera puede vencer a Rusia con sus propias fuerzas.
Con el montaje del misil Ucrania y, en especial, Zelensky, han quedado a la altura del barro, lo mismo que los medios de comunicación que se apresuraron a publicar titulares rocambolescos.
Por si la mentira no fuera suficiente, algunos medios llegaron a decir que la verdad, es decir, que el misil procedía de Ucrania, era una “teoría de la conspiración”.
El gobierno polaco tampoco se limitó a contar bulos sino que convocó al embajador ruso en Varsovia para que diera “explicaciones detalladas” sobre el misil. Pues ahora será Polonia quien tendrá que explicar los motivos por los cuales difundió una falsedad a los cuatro vientos.