Fuente: https://sjsp.org.br/massacre-no-complexo-medico-al-shifa/?fbclid=IwAR0ZT9OExnGa6n_xw0guv8bkhroAID9xkkqWI8KmNG1TassvH2z3rwuuxYw_aem_AccDjkvAF9KmEkeemj7pjmjxsibOxJ6VTxiWPrRPxSPPt5EkIA78JYkF7KC6yQGPaTWCIAcCmmFt9qEUcoeSiQGg                                                                                   Wisam Zoghbour*                                                                             08/04/24

Traducción automática de Google: La OMS ha declarado que el Hospital Al -Shifa ya no puede funcionar y su destrucción significa la eliminación  del corazón del sistema sanitario en Gaza.

El Estado de ocupación israelí no ha dejado de atacar hospitales palestinos en la Franja de Gaza desde el inicio de la guerra genocida el 7 de octubre, ignorando el derecho internacional humanitario y los principios de derechos humanos.

Con la retirada de las fuerzas de ocupación israelíes del Complejo Médico Al-Shifa, el 1 de abril, los efectos del genocidio comenzaron a emerger, con la revelación del completo desmantelamiento de los edificios hospitalarios y los asesinatos sistemáticos, indicativos de una no- Odio sionista, sólo contra los refugiados, el personal médico y los periodistas, pero también contra los edificios hospitalarios, especialmente los de recepción, urgencias, cirugía especializada, nefrología, maternidad, quemados y clínicas ambulatorias, e incluso los edificios de almacenamiento en frío, objetivos de incendio y destrucción. .

Así, el mayor complejo médico de la Franja de Gaza quedó completamente fuera de servicio. Un miembro del comité de emergencia del Ministerio de Salud en Gaza declaró que todas las instalaciones del Complejo Médico Al-Shifa ya no están en condiciones de funcionar debido al incendio y bombardeo de todos los edificios del complejo sin excepción.

Otros periodistas informaron que las fuerzas de ocupación israelíes rodearon e irrumpieron en el complejo médico el 18 de marzo pasado con tropas especiales respaldadas por blindados, y arrestaron a docenas de refugiados, personal médico y periodistas, llevando a un gran número de ciudadanos palestinos a destinos desconocidos.

El Comité Internacional de la Cruz Roja aclaró, tras la retirada de las fuerzas de ocupación del complejo médico, que el hospital quedó reducido a escombros y los trabajadores humanitarios murieron.

La organización añadió que menos atención médica significa menos esperanza en Gaza y que cada colapso del sistema sanitario es un desastre para los civiles, mientras que la Organización Mundial de la Salud (OMS) declaró que “el hospital Al-Shifa ya no puede funcionar, y sus La destrucción significa la eliminación del corazón del sistema de salud en Gaza”.

La radio del ejército israelí reveló que las fuerzas de ocupación mataron a 200 palestinos, arrestaron a otros 500 y detuvieron a alrededor de 900 para interrogarlos durante su operación en el complejo Al-Shifa y sus alrededores, y el corresponsal militar del periódico Yedioth Ahronoth ( Latest News ), Yoav Zitun, afirmó que Se dieron instrucciones a las fuerzas de ocupación para que prefirieran capturar prisioneros vivos en beneficio del servicio de inteligencia para negociar un intercambio de prisioneros, alegando que el hospital se utilizaba como centro para restaurar el gobierno civil en el norte de Gaza.

Las escenas de destrucción y asesinato sistemáticos que presenciamos superaron todas las expectativas, mostrando una horrible masacre en el Complejo Médico Al-Shifa en sólo dos semanas, con cuerpos de hombres, mujeres y niños esparcidos por los patios y edificios del hospital y las carreteras circundantes, lo que confirma que Israel, el Estado ocupante, continúa su política sedienta de sangre con el objetivo de socavar la voluntad de nuestro pueblo y obligar a los palestinos a rendirse y aceptar la derrota, utilizando la desesperación para empujarlos a un desplazamiento forzado fuera de la Franja de Gaza.

Según observadores, las fuerzas de ocupación israelíes ejecutaron a unos 400 palestinos en el Complejo Médico Al-Shifa, y sus cuerpos fueron encontrados esposados ​​y con los ojos vendados. Algunos de ellos fueron enterrados y en el patio del complejo médico se desenterraron tumbas de decenas de mártires. Las tropas israelíes también ejecutaron a familias enteras que vivían cerca del hospital, además de destruir e incendiar sus casas.

Según los observadores, las fuerzas de ocupación están utilizando el asesinato, el derramamiento de sangre, el hambre y la sed como pasos hacia el desplazamiento forzado desde el norte del sector hacia el sur, con el objetivo de vaciar el norte de Gaza de sus habitantes, al mismo tiempo que confiscan alrededor de 16% de la superficie del sector para establecer una zona de amortiguamiento a una profundidad de 1 km a lo largo de los límites norte y este del sector y la construcción de la carretera divisoria entre el norte y el sur del sector, a partir del asentamiento de Be’eri en el este hasta llegar al mar en el oeste, conectando con el dique flotante que se espera esté terminado a finales de este mes, dividiendo el sector en dos partes y controlando el movimiento de personas en esta zona, evitando que los desplazados regresen a sus viviendas en el norte del sector y utilizarlas como moneda de negociación.

Los observadores explicaron que Israel ha estado empleando las mismas tácticas utilizadas durante la catástrofe de 1948, aunque más crueles en términos de exterminio, hambre, sed y genocidio, atacando a los medios de comunicación locales y árabes que operan en la Franja de Gaza, atacando a periodistas y comunicadores, con más Más de 140 periodistas se vieron afectados, además de atacar a sus familias en un intento de silenciar y matar la voz de la verdad, e impedir que periodistas extranjeros accedan al sector para cubrir los crímenes de la ocupación.

El Estado ocupante quería que su maquinaria mediática funcionara en la Franja de Gaza e impidió y bloqueó que cualquier medio local o extranjero trabajara allí, prefiriendo en cambio difundir propaganda de acuerdo con los requisitos de la censura militar y sembrar el terror entre el pueblo palestino, repitiendo escenas de la Nakba. En la guerra, la primera víctima es la verdad, como dijo el fallecido Gerson Knispel.

Israel no se contentó con atacar todo lo palestino y sus propiedades, robar y saquear el dinero de los habitantes de Gaza, sino que también atacó todas las instituciones, incluidas las educativas y sanitarias, e incluso las tumbas de los muertos. Hace caso omiso de las resoluciones del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, de las instituciones internacionales e incluso de las decisiones de la Corte Internacional de Justicia que tienen como objetivo prevenir crímenes de genocidio.

El plan de la ocupación es obligar a los ciudadanos de la región a ser desplazados por la fuerza, posiblemente a la ciudad del Sinaí, en Egipto, y a las capitales árabes y occidentales, mientras Israel ocupa el norte de la Franja de Gaza. Todo esto se hace con el objetivo de eliminar la cuestión palestina ante la comunidad internacional.

*Wisam Zoghbour es director de la oficina en Gaza de la revista Al-Hurriyah y del Sindicato de Periodistas Palestinos. (Edición de texto: Alexandre Rocha y Pedro Pomar)