
ALAI – América Latina en Movimiento
Quizás el Papa se fue sin saberlo, pero al guiarnos a través del amor, simplemente reconoció la santidad de Marillac (Imagen: Thierry Ehrmann / Flickr)
Diagrama de flujo de Marillac: Cómo la economía de Francisco se hace eco de la filosofía de una monja brasileña
Tanto el Papa Francisco como la hermana Maria do Carmo —bautizada Marillac en la Iglesia Católica— abogaron por una Iglesia guiada por el amor, ofreciendo una luz en estos tiempos de crisis económica y sociopolítica global.

Ella quería ser una santa. Desde niña, la vocación a la vida religiosa clamaba en su alma. Sor María do Carmo Costa fue una referencia para muchas comunidades por su sabiduría y serenidad, especialmente en el momento de su muerte. Por convicción, creyó en la medicina alternativa, en las plantas medicinales y en las terapias heredadas de los pueblos indígenas y tradicionales y aprendió de ellas.