Kenia, cuna de la Humanidad

Fuente: Umoya, num 83 – 3er trimestre 2016                              Rosi Fernández de las Heras.

Kenia, cuna de la humanidad. | ONG AFRICANDO SOLIDARIDAD CON AFRICA

Esta “Cuna de la Humanidad”, según los paleontólogos, posee una gran variedad étnica con una vibrante cultura. Esta diversidad, a veces, ha sido manipulada políticamente en momentos puntuales como durante las elecciones presidenciales.

La historia del país lo demuestra, como también que es un pueblo generalmente muy pacífico y acogedor pero que lucha por sus derechos y aspira a la verdadera democracia y al progreso económico. Retazos de historia. Los paleontólogos creen que el ser humano ha podido haber habitado inicialmente en Kenia hace unos 2 millones de años. En el 700, los marinos árabes establecieron asentamientos a lo largo de la costa, y los portugueses tomaron el control de la zona a principios de 1500. La tierra se convirtió en un protectorado británico en 1890 y en una colonia de la Corona en 1920, llamada África Oriental Británica.

Las agitaciones nacionalistas comenzaron en la década de 1940, y en 1952 el movimiento MauMau, formado por militantes kikuyu, se rebeló contra el gobierno. El combate duró hasta 1956. Kenya obtuvo su independencia, después de una larga lucha, el 12 de diciembre de 1963. Jomo Kenyatta, líder nacionalista durante la lucha por la independencia, y que había sido encarcelado por los británicos, fue su primer presidente. De 1964 a 1992, el país fue gobernado por un único partido de estado, la Unión Nacional Africana de Kenia (KANU), primero bajo Kenyatta, y luego bajo Daniel Arap Moi. Las manifestaciones y disturbios ejercieron presión sobre Moi lo que posibilitó la celebración de elecciones multipartidistas en 1992. En la década de 1990 la infraestructura de Kenia comenzó a desintegrarse, con una corrupción oficial rampante, lo que contribuyó a la retirada de gran parte de la ayuda exterior. Efectivamente la corrupción ha sido siempre una asignatura pendiente, nunca resuelta por los diversos mandatarios y ha marcado la presencia o retirada de las ayudas exteriores. Momento especialmente importante fueron las elecciones de 2007 entre el Presidente Kibaki y el opositor Raila Odinga. Los observadores extranjeros certificaron la manipulación de las votaciones pero la Comisión Electoral de Kenya declaró ganador al Presidente Kibaki. Tras estos resultados estalló la violencia entre los miembros de las etnias luo y kikuyu. Odinga es luo y Kibaki es kikuyu. La lucha entre las etnias se intensificó en enero de 2008. El despliegue de las fuerzas armadas de Kenia hizo poco para detener los brutales  enfrentamientos. Para febrero de 2008, más de 1.300 personas habían muerto en la violencia post-electoral. Tras el arbitraje del ex secretario general de la ONU, Kofi Annan, que se reunió con representantes del gobierno y de la oposición en un intento de resolver la crisis, el gobierno y la oposición acordaron a finales de febrero compartir el poder: Kibaki sería presidente y Odinga primer ministro; los dos rivales se repartieron los puestos del gabinete. Pero, muy pronto, compartir el poder resultó difícil, y el proceso legislativo se vio obstaculizado por las luchas internas y las acusaciones entre ambos bandos. La votación mayoritaria y pacífica de una nueva Constitución, que entró en vigor el 27 de agosto de 2010, demostró al mundo las ansias de estabilidad de los kenianos.

Kenia, cuna de la humanidad. | ONG AFRICANDO SOLIDARIDAD CON AFRICA

Al acercarse las elecciones presidenciales de 2013, muchos temían una repetición de la violencia. Esos temores no se manifestaron en la reñida carrera entre los principales contendientes que tuvo como ganador a Uhuru Kenyatta con el 50,07 de los votos frente al 43,7% de Odinga. Dos páginas especialmente tristes han sido escritas recientemente de la mano del terrorismo del grupo yihadista Al Shabab: en septiembre de 2013 tomó el Centro Comercial Westgate en Nairobi durante 4 días, el asalto finalizó con 72 muertos y 175 heridos. El 2 de abril de 2015, el mismo grupo terrorista asesinó en la Universidad de Garissa a 148 estudiantes. Una gran riqueza sociocultural Más de cuarenta grupos étnicos residen en Kenya. Los principales son el kikuyu (22 %), luhya (14%), luo (13 %), kalenjin (12 %), kamba (11 %). No obstante algún punto negro en la historia reciente, estas diversas etnias conviven en Kenia pacíficamente y forman matrimonios mixtos entre personas de diferentes grupos. Como expresé al principio de este artículo, a lo largo de los años que he tenido la suerte de convivir con este pueblo he podido experimentar y disfrutar de algunos de sus valores más importantes. Contra lo que se podría pensar, analizando con ojos simplistas su historia, se trata de un pueblo sumamente pacífico; impresionantemente acogedor, que “te roba el corazón”, y que lucha valientemente por sus derechos. Siempre trabajó y se movió por lograr una verdadera democracia y por lograr un auténtico progreso económico. Para ese progreso económico reviste una especial importancia el que Kenia sea un país que ejerce un gran atractivo turístico debido, sobre todo, a sus parques nacionales y sus playas en la costa del este del país. Sus parques nacionales son los más famosos del mundo. Sólo por visitar estos lugares mágicos ya merece la pena viajar a Kenya una vez en la vida: las maravillas de su característica fauna africana, con sus leones, rinocerontes, búfalos…, lejos de la amenaza de los cazadores y sus safaris en el Parque de Aberdare, la belleza impresionante de las nieves eternas del Kilimanjaro en el Parque de Amboseli… y, en especial, el de Masai Mara, el territorio de la tribu de los masai. Ojalá que el turismo no vaya haciendo desaparecer tanta belleza y tanta cultura.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *