Al Jazeera
El ejército israelí ha interceptado y abordado varios barcos que navegaban hacia Gaza.
La Coalición de la Flotilla de la Libertad (FFC) dice que el ejército israelí atacó su convoy de barcos e interceptó varias embarcaciones mientras navegaban hacia Gaza.
La FFC dijo que los militares habían atacado The Conscience, un barco que transportaba a 93 periodistas, médicos y activistas, antes de atacar e interceptar tres barcos más pequeños el miércoles.
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Sus pasajeros estaban “retenidos en condiciones desconocidas”, añadió.
El Ministerio de Asuntos Exteriores de Israel confirmó al canal X que se había producido un asalto a la flotilla.
“Otro intento inútil de violar el bloqueo naval legal y entrar en una zona de combate terminó en nada”, afirmó el ministerio.
Los barcos y los pasajeros fueron trasladados a un puerto israelí. Todos los pasajeros se encuentran sanos y salvos. Se espera que sean deportados con prontitud, añadió.
El primer ministro de Malasia, Anwar Ibrahim, dijo que condenaba enérgicamente la acción israelí y exigió que los activistas malasios que participan en la misión de la flotilla sean liberados.
El Ministerio de Asuntos Exteriores de Turquía confirmó que la flotilla incluye a sus ciudadanos y legisladores. Calificó las acciones de Israel como una «grave violación del derecho internacional» y un «acto de piratería».
El partido político progresista alemán MERA25 dijo que una de sus miembros, la activista Amira Zayed, estaba entre los detenidos y que estaba “profundamente preocupado” por su bienestar.
Se dice que a bordo de la flotilla también hay activistas irlandeses, franceses y daneses, entre otros ciudadanos.
La FFC, una red internacional de grupos activistas pro palestinos que organiza misiones marítimas civiles, dijo que los barcos transportaban “ayuda vital” por un valor de más de 110.000 dólares en medicamentos, equipos respiratorios y suministros nutricionales destinados a los hospitales hambrientos de Gaza.
«El ejército israelí no tiene jurisdicción legal sobre aguas internacionales», declaró la organización en Instagram. «Nuestra flotilla no representa ningún peligro».
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Fue el segundo incidente de este tipo en los últimos días, después de que Israel interceptara unas 40 embarcaciones y secuestrara y detuviera a más de 450 activistas en otro convoy de ayuda, la Flotilla Global Sumud, que también intentaba entregar suministros a Gaza. Desde entonces, Israel ha deportado a la mayoría de estos activistas , incluida la activista climática sueca Greta Thunberg.
Varios activistas de esa flotilla han denunciado abusos físicos y psicológicos bajo custodia israelí. Rima Hassan, eurodiputada franco-palestina, afirmó haber sido golpeada por la policía israelí tras la interceptación de la flotilla. El activista estadounidense David Adler describió haber sido desnudado, atado con bridas y vendado con los ojos antes de su detención, además de haber sido obligado a fotografiarse con el ministro de Seguridad Nacional israelí, Itamar Ben-Gvir.