Hezbollah ha lanzado cientos de drones y cohetes contra varias instalaciones militares israelíes, incluida la Cúpula de Hierro, en respuesta al asesinato de Fuad Shokr, máximo comandante de la organización en Beirut el mes pasado.

El movimiento libanés dice que apuntó hacia un “objetivo militar especial” identificado, así como a las plataformas israelíes de la Cúpula de Hierro y otras instalaciones militares, agregando que la respuesta completa tomaría “algún tiempo”.

Hezbollah da por completada la “primera fase” de su respuesta con un ataque a 11 sitios militares israelíes en el que ha ha disparado más más de 320 cohetes y enviado drones al norte de Israel.

El ejército israelí, por su parte, indicó que había lanzado ataques preventivos contra Líbano tras evaluar que Hezbollah se preparaba para disparar cohetes y misiles hacia Israel, pero el movimiento libanés negó esas acusaciones.

El ejército también lanzó un ultimátum a los residentes del sur del Líbano, pidiéndoles que “se vayan inmediatamente”, en un mensaje en árabe.

El ministro de Defensa israelí, Yoav Gallant, anunció el establecimiento de un estado de emergencia nacional de 48 horas a partir del domingo.

Los enfrentamientos estallaron mientras en El Cairo se celebraba una ronda de negociaciones para un alto el fuego en Gaza y un acuerdo para intercambiar rehenes palestinos por prisionero israelíes.

En la capital egipcia los negociadores están trabajando una vez más para obtener una tregua en la guerra en Gaza, donde los incesantes bombardeos israelíes matan a decenas de palestinos cada día.

Desde el jueves en El Cairo en torno a una mesa no sientan los diplomáticos, sino los espías: los jefes de la inteligencia interior y exterior israelí, David Barnea y Ronen Bar, el director de la CIA, William Burns, el coordinador de la Casa Blanca para Oriente Medio, Brett McGurk, así como los jefes de la inteligencia egipcia y qatarí.

Mientras unos hablan, lo que otros ponen encima de la mesa son los muertos. La delegación de Hamas que viajó a El Cairo no está presente en las discusiones, pero por la noche se reúne con los dirigentes egipcios, dijo un miembro del movimiento de resistencia palestino.