El 31 de octubre Israel bombardeó el asediado Hospital Kamal Adwan de Beit Lahia, en el norte de Gaza, matando a varias personas y causando graves daños a departamentos esenciales dentro de la instalación médica. 

El corresponsal de Palestine Today informó que “hubo cuatro mártires, incluidos dos niños, en el bombardeo de la ocupación al tercer piso del Hospital Kamal Adwan”.

El ataque tuvo como objetivo la planta de desalinización del hospital en el departamento de diálisis renal, los departamentos de ingeniería y mantenimiento y los tanques de agua. 

Esto provocó la quema de un almacén de medicamentos y material médico en el hospital que había sido recibido por la Organización Mundial de la Salud (OMS) apenas cinco días antes.

El ataque a los hospitales se produjo apenas unos días después de que Israel bombardeara deliberadamente la estación de oxígeno del hospital, lo que provocó la muerte de varios pacientes, entre ellos niños. También se produjo una semana después de que las tropas israelíes irrumpieran en el hospital y secuestraran a decenas de pacientes y personal médico.

Las operaciones quirúrgicas se han suspendido por completo debido a la continua agresión contra el hospital. El director del hospital, el doctor Hussam Abu Safia, ha pedido a todos los que tengan experiencia quirúrgica que acudan al hospital, ya que hay docenas de pacientes heridos en estado crítico. 

El Hospital Kamal Adwan y el Hospital Indonesio, que también está asediado, son los dos últimos hospitales en funcionamiento en el norte de Gaza.

El reciente cese de las operaciones de Defensa Civil, que es resultado del asedio israelí al norte, que ya lleva un mes, ha hecho imposible el traslado de las víctimas de los incesantes ataques israelíes. 

Más de 100 palestinos murieron y decenas resultaron heridos en un solo ataque israelí en Beit Lahia el 29 de octubre.

El Dr. Khalil al-Daqran, portavoz del Ministerio de Salud en la Franja de Gaza, advirtió el 27 de octubre que Israel ha dejado “inoperativo” el sector sanitario en el norte de Gaza, con el objetivo de matar al mayor número posible de palestinos.

“La ocupación ha dejado inoperante el sistema sanitario en el norte con el fin de matar al mayor número posible de ciudadanos”, afirmó Daqran.

Más de 1.000 personas han sido asesinadas y miles más han sido desplazadas como parte del llamado Plan de los Generales de Israel, que pretende exterminar o expulsar a más de 100.000 palestinos que permanecen en el norte de Gaza y convertir el área en una zona militar aislada . 

Muchos se han negado a abandonar el norte por temor a que los militares no les permitan regresar nuevamente si cruzan el corredor de Netzarim para dirigirse al sur.

Hamás dijo en una declaración el 24 de octubre que había lanzado una campaña diplomática y política “intensiva” destinada a frustrar el Plan de los Generales.