Fuente: La Jornada/Reuters, Afp, Sputnik y Europa Press Jueves 9 de enero de 2020, p. 22
Tercer ataque en la zona verde
El presidente Saleh rechazó que Irak se convierta en campo de batalla
Bagdad. Al menos dos cohetes impactaron anoche dentro de la fortificada Zona Verde de esta capital, que alberga edificios gubernamentales y misiones extranjeras, entre ellas la embajada de Estados Unidos, pero no causaron víctimas, señaló el ejército iraquí horas después de que la Guardia Revolucionaria de Irán atacó dos bases militares en el oeste y norte de Irak, lo que elevó las tensiones en la región.
Las autoridades militares indicaron que los misiles Katyusha cayeron en la zona sin causar víctimas, pero uno de los artefactos impactó a 100 metros de la legación estadunidense. Ningún ejército u organización yihadista se atribuyó el ataque de inmediato.
Se trata del tercer ataque en la Zona Verde desde que un dron estadunidense mató al general Qasem Soleimani, jefe de la fuerza Al Qods de los Guardianes de la Revolución Islámica; a Abu Mehdi Muhandis, número dos de las Fuerzas de Movilización Popular, y a otras ocho personas a las afueras del aeropuerto de Bagdad hace seis días.
Este nuevo ataque se da a menos de 24 horas de que la Guardia Revolucionaría Iraní disparó 22 misiles balísticos contra bases militares en la provincia de Al Anbar y en la ciudad de Erbil, al oeste y norte de Irak, respectivamente, que albergan a efectivos extranjeros, entre ellos a algunos de los 5 mil 200 soldados estadunidenses desplegados en Irak.
La televisión estatal iraní informó en su portal que al menos 80 estadunidenses murieron en este ataque y apuntó que las pérdidas materiales causadas por los impactos fueron abundantes, entre ellas helicópteros. La información aún no ha sido confirmada.
El general Abdul Karim Jalaf, vocero del gobierno iraquí, notificó en nombre del primer ministro saliente, Adel Abdel Mahdi, que recibió un mensaje oficial verbal
de las autoridades iraníes para informarle que era inminente un ataque a las fuerzas estadunidenses desplegadas en su territorio.
El presidente Barham Saleh condenó en un comunicado la agresión contra las bases militares y rechazó que Irak se convierta en un campo de batalla para los bandos en guerra
. Repudió la reiterada violación de la soberanía nacional
y recalcó que Irak ha declarado previamente su negativa a ser un punto desde el que se lancen ataques contra cualquier país
.
La cancillería anunció que convocará al embajador de Irán para denunciar una violación de su soberanía
tras el disparo de los 22 misiles.
En un mensaje televisado, el líder supremo iraní, el ayatola Ali Jamenei, indicó que el ataque contra bases militares fue una bofetada en la cara
de Estados Unidos, pidió que se vengue la muerte de Soleimani y señaló: Lo que importa (es) que la presencia corrupta de Estados Unidos en esta región tiene que terminar
.
Recalcó que Irán está preparado para responder a futuras agresiones y advirtió que sería un error
pensar que, dando un paso atrás
, Estados Unidos va a poner fin a la hostilidad
.
El presidente iraní, Hassan Rouhani, tuiteó que la república islámica ha demostrado que no retrocede
ante Estados Unidos, y reiteró que la respuesta final a la muerte de Soleimani será expulsar a todas las fuerzas de Estados Unidos
de Medio Oriente.
De su lado, el vicepresidente de Estados Unidos, Mike Pence, dijo en entrevista en que su país recibió información de inteligencia según la cual Irán pidió a las milicias que no ataquen a los estadunidenses.