Los ataques israelíes contra palestinos desplazados en la llamada «zona humanitaria» de al-Mawasi, en Khan Younis, al sur de Gaza , mataron a más de 15 personas , en su mayoría mujeres y niños. En escenas desgarradoras, familiares se reunieron alrededor de los restos carbonizados de sus seres queridos, incluidos niños de tan solo un año de edad, que quedaron quemados hasta quedar irreconocibles.
Yusuf Abu Roos, residente del campamento de desplazados, declaró a Middle East Eye que se escuchó el sonido del ataque y, poco después, grandes incendios se extendieron por las tiendas de campaña de desplazados en al-Mawasi. Los servicios de emergencia tardaron un tiempo en llegar a la zona y extinguir el incendio.
«Los cadáveres quedaron carbonizados… hasta el punto de que no quedó nada, incluso el metal de las tiendas fue quemado», dijo.
Yusuf describió los cadáveres «como si fueran esqueletos, esqueletos derretidos».
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«Esta es la primera vez que vemos este tipo de armas, armas letales… por mucho que hayamos visto, ha sido difícil presenciarlo… fue una noche llena de penurias», añadió.
Majedeh Abu Roos, quien perdió a su hija de 26 años, Tahrir, y a tres nietos en el ataque, dijo a MEE que toda la familia estaba durmiendo cuando ocurrió el ataque.
«El ataque quemó la tienda, todos quedaron quemados, todos carbonizados», dijo aterrorizada.
«Miren a todos los que murieron, eran solo niños y mujeres… Ten piedad de nosotros, estamos agotados.»
Ella cuestionó con enojo por qué Israel ataca las tiendas de campaña que albergan a los palestinos que los israelíes obligaron a trasladarse allí, y condenó la inacción del mundo árabe.
Señaló que uno de los niños asesinados, Ahmed, de 16 años, era discapacitado. Otras víctimas tenían entre uno y 16 años.
La llamada ‘zona segura’
Como muchos otros, la hija de Majedeh y sus suegros huyeron de Rafah para buscar refugio en al-Mawasi, donde Israel ha dicho a los palestinos que deben establecerse por ser una zona considerada «segura».
«Cada día esperamos nuestra muerte, cada minuto y cada momento esperamos nuestro final», sollozó.
La zona ha sido todo menos segura. A pesar de designarla como refugio, las fuerzas israelíes han atacado repetidamente al-Mawasi durante la guerra.
Las fuerzas israelíes, tanto terrestres como aéreas, han estado atacando implacablemente la Franja de Gaza desde que rompieron el alto el fuego el 18 de marzo. El número de muertos tan solo en Jan Yunis ha superado los 415 desde entonces.
Casi un tercio de las muertes en Gaza desde el mes pasado son niños (595), según muestran las estadísticas publicadas por el Ministerio de Salud local.
Yusuf dijo a MEE que hace un llamamiento a todos los países árabes para que se solidaricen con los de Gaza porque «somos un pueblo desconsolado, no podemos hacer nada».
«Todos deberían apoyarnos y tener compasión. Esta es una guerra genocida… todos estamos bajo amenaza de muerte», añadió.
Desde que Israel rompió el alto el fuego el mes pasado, ha matado a más de 1.691 palestinos y a más de 51.065 desde octubre de 2023. Al menos 116.505 personas han resultado heridas desde el inicio de la guerra hace 18 meses.
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