Moscú. A escasos días de ser postulado para su relección al frente del Krem­lin, que debe concretarse a más tardar el 17 de diciembre siguiente, justo a tres meses de los comicios presidenciales de 2024, Vladimir Putin efectuó este miércoles una gira relámpago por dos países claves de la península arábiga, Emiratos Árabes Unidos (EAU) como principal destino y Arabia Saudita como escala técnica, además de que este jueves en la capital rusa ejercerá de anfitrión de su homólogo de Irán.

Estos encuentros, que sirven para revisar las cuestiones propiamente bilaterales, se centraron en el conflicto de Medio Oriente, en el cual Rusia, basándose en las resoluciones de la Organización de Naciones Unidas (ONU), se presenta como mediador en favor de una solución de dos estados, Israel y Palestina, en un mismo territorio.

Para los operadores de la campaña electoral de Putin –en un momento en que Estados Unidos y sus aliados nada quieren tratar con él por la invasión de Ucrania– es relevante que el mandatario ruso, como se esforzaron por destacar los noticiarios de las televisión pública de este país, haya sido recibido con los máximos honores en la península arábiga.

Además, según trascendió, la idea es que, en todas sus conversaciones, Putin encuentre un interlocutor –este miércoles el presidente de EAU, Mohamed bin Zayed, en Abu Dabi, y el príncipe heredero de Arabia Saudita, Mohamed bin Salmán al Saud, en Riad, o el jueves en Moscú, el presidente de Irán, Ebrahim Raisi– que coincida con él.

En este caso, todos tienen claro que el gobierno del primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, al masacrar a la población civil palestina se está excediendo en su derecho a defender a Israel de la agresión del grupo armado Hamas que sufrió el pasado 7 de octubre.

De acuerdo con WAM, la agencia oficial de noticias emiratí, Bin Zayed y Putin, durante su encuentro, intercambiaron opiniones acerca de la situación en la franja de Gaza y destacaron la necesidad de que la comunidad internacional adopte medidas que permitan lograr un alto el fuego, así como faciliten proteger a los civiles y enviar ayuda humanitaria al enclave palestino.

Ambas partes subrayaron la importancia de seguir trabajando para encontrar un horizonte claro de paz permanente y comprensiva en la región basada en la solución de dos estados, señala WAM en su reporte.

Putin, según su servicio de prensa, enfatizó que EAU, aun sin ser miembro permanente del Consejo de Seguridad de la ONU, hace una enorme contribución a la estabilidad de la situación en el mundo, aparte de que es el principal socio comercial de Rusia en el mundo árabe.

Bin Zayed, tras agradecer que Putin expusiera su visión de la crisis de Ucrania, dijo que los Emiratos apoyan el arreglo de diversos conflictos en el mundo siempre mediante el diálogo y la diplomacia, de manera que se afiancen la paz y la estabilidad globales, conforme a la versión de WAM.

Antes de regresar a Moscú, el avión de Putin –escoltado por cuatro cazabombarderos Su-35C– hizo escala en Riad para entrevistarse con Mohamed bin Salmán, príncipe heredero de Arabia Saudita.

Al estar aquí en la región, en una visita programada a Emiratos Árabes Unidos, aproveché su invitación para venir a hablar con usted y con todos nuestros amigos con los que, efectivamente, hemos estado desarrollando de forma activa nuestra interacción en los últimos siete años, dijo Putin a Bin Salmán y agregó: Nada puede impedir el desarrollo de nuestras relaciones amistosas, reportó TASS, la agencia noticiosa oficial de Rusia.

Este jueves, el presidente ruso recibirá en Moscú a su colega iraní, Ebrahim Raisi, con quien tiene previsto examinar en detalle la agenda de la cooperación bilateral, con énfasis en la puesta en marcha de proyectos conjuntos en los ámbitos económico y comercial, incluidos el transporte y la energía, de acuerdo con información de la oficina de prensa del Kremlin.

Como prólogo a la visita de Raisi, los cancilleres ruso, Serguei Lavrov, e iraní, Hossein Amir-Abdollahian, firmaron el martes anterior en la capital rusa una declaración conjunta contra las sanciones de Estados Unidos y sus aliados, discriminación que sufren por igual y que, a raíz de la guerra en Ucrania, ha fortalecido su relación bilateral.