Fuente: https://elsudamericano.wordpress.com/2020/05/11/gershom-scholem-walter-benjamin-y-las-ss-que-patrullan-jerusalen/
GERSHOM SCHOLEM, WALTER BENJAMIN Y LAS SS QUE PATRULLAN JERUSALÉN
La viscosa infamia de Gershom Scholem
por Juan García Brun | El Porteño
Hace muchos años, se publicó la correspondencia entre Gershom Scholem y Walter Benjamin (1933-40). Al leer aquellas cartas me quedó un regusto a bilis en la boca. Con la discreción de quien está profundamente avergonzado de tener que suplicar, las alusiones de Benjamin a su situación insostenible son continuas y van en aumento desde enero del 33.
Ese hombre, sin dinero, sin forma de ganarse la vida, sin esperanza insinúa –al final pide- la mediación de Scholem para emigrar a Palestina. Las respuestas del «amigo» son continuamente evasivas: esto no te gustaría, la atmósfera de aquí no es la mejor para ti, no encontrarías personas como tú… Pero Benjamin no quiere ir a donde le gustaría estar, ni encontrar amigos, ni ver paisajes, ni asentarse en la universidad de Tel Aviv, sólo quiere salvar la vida.
Constelaciones es una «reflexión en imágenes» en torno a algunos conceptos centrales de la obra de Walter Benjamin. Se trata de un conjunto de citas audiovisuales –escenas de películas, fotografías, pinturas, grabaciones sonoras, animaciones, documentos históricos…– articuladas según una metodología que desarrolló el propio Benjamin. Forma parte de un proyecto del Círculo de Bellas Artes de Madrid:
Música 44 Duos para dos violines: IV. (37 – 44)», de André Gertler & Josef Suk
Seguramente, el ejemplo más hiriente de esta infamia, de esta repugnante infamia que, por otra parte, Benjamin nunca reprocha, se produce muy pronto. El 7 de mayo del 33 Benjamin escribe a Scholem desde Ibiza. Le informa que su hermano ha caído en manos de las SA y que le han torturado salvajemente a consecuencia de lo cual ha perdido un ojo.
El 23 de mayo Scholem contesta a Benjamin sobre la posibilidad de acoger al hermano de Walter en Palestina si éste fuera liberado: «La cuestión es, y me parece digno de tener en cuenta por lo que dices sobre Stefan, si tiene algún sentido enviarle a Palestina cuando él, por lo que entiendo, es de tendencias comunistas. Pues en tal caso no va a encontrar aquí, y sobre todo en el ámbito rigurosamente reaccionario (famoso como tal en Palestina) en el que vive el hermano de Dora, la sensación de sosiego que necesita. Las opiniones contrarias al comunismo son aquí, entre los judíos, de naturaleza muy hostil, por lo que hay que preguntarse si tiene sentido el enfrentar a un joven de 15 años a los conflictos que de ello se derivan».
A ver, desgraciado cobarde, ese muchacho de 15 años no pretendía encontrar «la sensación de sosiego» que necesitaba, tan solo salvar la vida.