Fuente: https://canarias-semanal.org//art/33271/en-sta-cruz-de-tenerife-hay-una-politica-de-persecucion-y-odio-hacia-los-pobres 26.09.22
La Acampada Reivindicativa por el Derecho a una Vivienda Digna denuncia las políticas aporofóbicas del ayuntamiento:
La Acampada Reivindicativa por el Derecho a una Vivienda Digna ha reiterado su denuncia sobre la «política de persecución» que – dicen – desarrolla el grupo de gobierno del Ayuntamiento de Sta. Cruz de Tenerife hacia las personas más necesitadas del municipio (…).
Por ERNESTO GUTIÉRREZ PARA CANARIAS-SEMANAL.ORG.-
Mediante un comunicado remitido a la redacción de Canarias-semanal, la Acampada Reivindicativa por el Derecho a una Vivienda Digna ha reiterado su denuncia sobre la «política de persecución» que – dicen – desarrolla el grupo de gobierno del Ayuntamiento de Sta. Cruz de Tenerife hacia las personas más necesitadas del municipio.
«Personas – apuntan – que no son pocas, ya que según datos que nos facilitan desde el propio Ayuntamiento hay en torno a 50.000 personas en exclusión social, con una población de poco más de 200.000 habitantes».
El colectivo social que luga por el derecho a la vivienda explica que «si hace unos meses denunciaron la decisión del ayuntamiento demultar y perseguir a las personas que viven en caravanas o en furgonetas en la ciudad porque no tienen otro recurso haciéndoles la vida imposible», ahora el el Partido Popular que gobierna en el Ayuntamiento les ha sorprendido:
«con una Moción para el Pleno del día 30 en la que propone que el Ayuntamiento capitalino se sume a la petición general que el Partido Popular está haciendo en Madrid, para que a nivel de todo el Estado se endurezcan considerablemente las normas que legislan el fenómeno de la ocupación de vivienda».
Desde la Acampada Reivindicativa por el Derecho a una Vivienda Digna manifiestan «su rechazo frontal» a la iniciativa que -dicen – «supondría la aprobación de leyes que promueven desde la derecha y la ultraderecha».
LA VIVIENDA: UN DERECHO CONVERTIDO EN MERCANCÍA PARA LA ESPECULACIÓN
«Los reaccionarios del Partido Popular en todo el Estado, o a nivel local con el señor Carlos Tarife (PP) y sus socios de Coalición Canaria, vuelven a tomar interesadamente una parte por el todo, y atacan la ocupación de vivienda – afirman – como si fueran todas una y la misma cosa, cuando en realidad la ocupación es solo un síntoma evidente y claro de una enfermedad grave que afecta a España, y de manera mucho más acusada a comunidades como Canarias, una enfermedad que no es otra más que la falta acuciante y generalizada de vivienda asequible para la mayor parte de la población».
«Hasta tal punto es así – continúan exponiendo – que en muchas zonas turísticas de Canarias y también en otras comunidades de España se están quedando sin cubrir muchos puestos de trabajo porque a los trabajadores no les trae cuenta por la falta o el encarecimiento desmesurado del precio de la vivienda, casi toda puesta para el alquiler vacacional, y tenemos el índice de natalidad más bajo de la historia desde que hay registros, un auténtico suicidio como sociedad, en buena medida por la imposibilidad de los jóvenes para acceder a una vivienda».
«Así las cosas ante una problemática tan grave y tan evidente, los ideólogos del Partido Popular y de otras tantas derechas, sabedores de que le han vendido la moto mayoritariamente a la población a fuerza de tanta propaganda criminalizando continuamente la ocupación de vivienda, en lugar de plantear soluciones conjuntas y un pacto estatal por el derecho a la vivienda, donde se pongan por ejemplo en uso social buena parte de los 3,5 millones de viviendas vacías que se estima hay en España, muchas de fondos buitre y otras tantas de la SAREB, o se ponga límite y freno al alquiler vacacional, se arrancan con más ataques al fenómeno de la ocupación con claras intenciones electoralistas, al margen de estar apuntalando su discurso clasista y aporofóbico del capitalismo salvaje del ¡Sálvese quien pueda!».
«Y así, olvidan interesadamente en el Partido Popular que el fenómeno de la ocupación en España mayoritariamente responde a familias con bajos recursos, que o bien no pudieron seguir pagando el alquiler y han permanecido en la vivienda (a esto también lo llaman ocupación cuando no lo es), o bien entraron en una vivienda vacía de un fondo buitre, muchas veces abandonadas y en muy mal estado, con el único interés de proteger y mantener unida a la familia, con más razón si cabe cuando hay menores. Siendo muy minoritaria la figura que presentan habitualmente en televisión del ocupa vividor, mafioso, delincuente o traficante (y esto no lo decimos solo nosotros, lo dicen los datos, y también los jueces)».
PROMOCIONANDO LOS «DESALOJOS EXPRESS» DE LOS MÁS NECESITADOS
La Acampada Reivindicativa por el Derecho a una Vivienda Digna denuncia, igualmente, que:
«Con este olvido interesado y aporofóbico del Partido Popular van de la mano de los de la ultraderecha de Vox pidiendo desalojos express en cualquier situación de ocupación, sin atender a cada caso concreto, arrasando con cualquier derecho y tomando a todos por delincuentes, llegando incluso a proponer la barbaridad de prohibir el empadronamiento, siendo este un derecho básico fundamental por el que se tiene acceso a las ayudas sociales tan necesarias para tantas familias, invadiendo de paso competencias de otras áreas y pisoteando leyes que llevan décadas funcionando en España».
«Lo peor -añaden- es que la mayoría de la población aplaude esta locura, y dentro de poco estarán gobernando, y aplicarán estas leyes, y muchos de los que ahora aplauden de seguro las van a sufrir, entonces ya será demasiado tarde».
«En cualquier – concluyen desde este colectivo social- venga lo que venga, en la Acampada Reivindicativa vamos a seguir haciéndole frente, seguiremos denunciando mientras podamos y nos dejen, y a través de este comunicado pedimos a colectivos, asociaciones, ciudadanos, sindicatos y partidos que se sumen a nuestra denuncia y la hagan suya, para frenar entre todos esta deriva fascista, degradante, empobrecedora y loca de las derechas y ultraderechas en Canarias y por extensión en todo el Estado español».