Gaza. Decenas de miles de gazatíes recién desplazados se apretujaron bajo lonas ayer en el centro de este enclave, tras huir de los tanques israelíes, mientras los aviones de guerra atacaban el sur, arrasando casas y enterrando a familias incluso en las noches, lo que ha desatando un nuevo éxodo de personas ya expulsadas de otras zonas.

La población ha huido de los abarrotados distritos centrales de Bureij, Maghazi y Nusseirat, por orden de las Fuerzas de Defensa Israelí, cuyos tanques avanzaban desde el norte y el este. La mayoría se ha dirigido hacia el sur o el oeste, pero muchos se han quedado en la ya desbordada ciudad de Deir al-Balah, montando tiendas improvisadas con lonas o láminas de plástico en cualquier zona descampada que han podido encontrar.

Hemos sufrido mucho. Pasamos toda la noche sin cobijo, bajo la lluvia y con frío, estábamos con nuestros hijos y mujeres mayores, comentó Um Hamdi, mientras cocinaba gachas en una olla sobre una hoguera de leña, rodeado de niños.

Cerca de allí, Abdel Nasser Awadallah, de barba gris, levantó un armazón de madera que recubriría con plástico para hacer una tienda de campaña, y habló que enterró a su familia: sus dos hijos de 16 y 18 años, a su sobrino de 2 y a su esposa.

Israel ha afirmado que trabaja para proteger a los civiles y culpa a los combatientes de Hamas de haberles causado daños, por operar entre ellos, algo que la milicia niega. Estados Unidos, su aliado más cercano, le exigió este mes que reduzca los ataques contra la población y pase a operaciones selectivas contra dirigentes de los islamitas.

Sin embargo, Te Aviv lanzó un nuevo asalto en la última semana del año, que comenzó en Navidad con intensos bombardeos contra los campamentos de refugiados en el centro.

Las autoridades sanitarias de Gaza confirmaron ayer la muerte de otros 187 palestinos en ataques israelíes en 24 horas, lo que elevó el número de fallecidos a 21 mil 507, aproximadamente uno por ciento de la población de Gaza, y se teme que queden miles de cadáveres por descubrir entre las ruinas, algunos sin ser contabilizados.

Los residentes afirman que las fuerzas se han abierto paso hasta el interior de Bureij en la batalla del centro de Gaza desder el miércoles, y que en la periferia oriental siguen produciéndose intensos combates. Los bombardeos han sido intensos allí, y en las zonas adyacentes de Nusseirat y Maghazi.

En el sur, las tropas de Benjamin Netanyahu redoblaron los ataques en Jan Yunis, con la finalidad de entrar a esta ciudad. Yoav Gallant, ministro de Defensa israelí, describió el avance como una tarea que nunca se ha hecho antes y que estaban alcanzando centros de mando y depósitos de armas de Hamas.

Ante los embates, decenas de miles de personas, muchas de ellas ya desplazadas, llegaron también a Rafá en camiones, autos y a pie. Aquellos que no han encontrado espacio en los refugios han armado tiendas de campaña a los lados de las carreteras.

Aprueba Biden vender armas a Netanyahu

Estados Unidos anunció ayer la aprobación de la venta a Israel de munición de artillería de alto poder explosivo de 155 milímetros y equipo relacionado por un valor de 147.5 millones de dólares, en virtud de una disposición de emergencia que renuncia a la revisión habitual del Congreso.

Por otro lado, Sudáfrica acusó a Israel ante la Corte Internacional de Justicia de participar en “actos de genocidio contra el pueblo palestino en Gaza», anunció el tribunal, pero Lior Haiat, vocero de la cancillería israelí, aserguró que es una difamación.

En tanto, Hamas negó que una delegación representante del movimiento palestino viajara a El Cairo para entregar a los funcionarios de ese país su respuesta a la iniciativa egipcia de un alto el fuego, informó el canal de TV, Al Mayadeen.