El diferendo limítrofe por la Guayana Esequiba entre Venezuela y Guyana, es de larga data y con varias negociaciones en el camino. No obstante, el espíritu del Acuerdo de Ginebra de 1966, sigue violándose por parte de la República Cooperativa de Guyana, y por su presidente Mohamed Irfaan Ali, quien es un político guyanés, perteneciente al Partido Progresista del Pueblo-Cívico (PPP/C), que se desempeña como presidente de Guyana desde 2020. Es miembro de la Asamblea Nacional desde las elecciones de 2006, siendo reelegido en 2011 y 2015.
Pero, ¿Qué es el Acuerdo de Ginebra de 1966?
Hace 56 años se firmó el Acuerdo de Ginebra, un tratado que reconoce la defensa de los legítimos e irrenunciables derechos de Venezuela, sobre el Territorio Esequibo. Recordemos que, en 1962, dada la independencia de Guyana, en el marco del proceso de descolonización británico en el Caribe, Venezuela reactiva su reclamación sobre el territorio despojado de la Guayana Esequiba.
Después de 4 años de negociaciones, el 17 de febrero de 1966, Venezuela, Gran Bretaña y Guayana Británica, que con la independencia adquirió el nombre de Guyana, firmaron el Acuerdo de Ginebra. A partir de esa fecha, la reclamación venezolana sobre el Territorio Esequibo tiene como marco jurídico y político fundamental ese tratado.
Con relación a la violación ya afirmada, por parte de Guyana, recordemos que igualmente, el 14 de agosto del año 2000, el presidente Hugo Chávez Frías denunció la pretensión de Guyana de realizar maniobras para el establecimiento de bases para lanzamiento de satélites espaciales en territorio no delimitado, al tiempo de dar licencias para exploración petrolera; todo en forma unilateral.
También es notorio resaltar, la reunión del presidente Hugo Chávez y su homólogo guyanés Bharrat Jagdeo del 19 de febrero de 2004, en Georgetown, donde el presidente Jagdeo afirmo, «Estoy completamente de acuerdo con lo tratado con el Presidente Chávez, nos hemos comprometido a que el tema del Esequibo se quede en el marco de los buenos oficios de las Naciones Unidas y también con el apoyo del Secretario General. Y ya con este problema en ese marco, paralelamente vamos a seguir generando el desarrollo y las negociaciones tanto en lo económico y cultural, de las inversiones y otros«.
Es significativo que Guyana nunca ha deseado cumplir los acuerdos en materia de delimitación del área Esequiba.
Por eso, hacemos referencia a la actual actuación del país guyanés, al recientemente informarse que EEUU desarrolla y consolida instalaciones militares del Comando Sur en Guyana. Y específicamente en dónde actualmente ambos países tienen una disputa territorial de más de 160 mil kilómetros cuadrados conocida como la Guayana Esequiba, con toneladas de riquezas, la cual está bajo la administración de Guyana, perteneciendo y siendo reclamada por Venezuela.
Con el pretexto de una supuesta lucha contra las organizaciones criminales transnacionales, y creando además otras supuestas áreas como: seguridad marítima, preparación para desastres y fortalecimiento asistencia humanitaria; que podríamos traducir en: espionaje y sabotaje, reconocimiento y patrullaje de la zona y creación de equipos de respuesta inmediata y rescate.
Lo que es más cierto aún, según el abogado, defensor de Derechos Humanos, militante revolucionario y analista político venezolano Juan Martorano, es que el gobierno guyanés del presidente Irfaan Al, ha otorgado una carta de intención de exploración y mapeo de los recursos auríferos y otros minerales no convencionales, en todo el territorio en disputa con Venezuela.
El contrato por 1.8 millones de dólares, le fue otorgado a la empresa estadounidense Global Ventures Consultancy Inc. y firmado en presencia de la directora (CEO) de la firma E. King, la embajadora estadounidense en Guyana Nicole Theriot, y por el gobierno guyanés el ministro de Recursos Naturales Vickram Bharrat, el secretario ministerial permanente Joslyn McKenzie y Japeti Savory en representación del departamento de Geología y minas guyanés.
El Proyecto tiene como objetivo, actualizar la data existente y desarrollar más en detalle el potencial aurífero y de otros minerales no convencionales, en las áreas de los distritos mineros del Noroeste, Cuyuni, Mazaruni y Potaro. Estos distritos mineros cubren las regiones que bordean el antiguo territorio venezolano, y hoy en día son en su mayoría parte de nuestro nuevo estado Guayana Esequiba.
El gobierno guyanés espera tener un mayor control de estos recursos y usarlos para atraer inversión extranjera a Guyana, este proyecto forma parte de lo que Guyana ha designado como su estrategia de bajo impacto ambiental para el 2030.
¿Qué es la Global Ventures Consultancy Inc.?
Esta es una empresa, de un tipo de consultorías, que son empresas pequeñas con muy pocos empleados y personal asociado que no están en nómina y son consultores. Este es el caso de Global Ventures Consultancy Inc. y entre sus consultores hay 7 personas, que cubren las áreas de geología (3), energía nuclear (2) ambiente (1) y también las áreas financiera y legal, todos como asociados/consultores.
Fundada por C.M. King quien es quien lleva las riendas, y viene de las fuerzas armadas estadounidenses y ha mantenido sus contactos y ha ejecutado proyectos para el gobierno gringo en las áreas de prospección mineral (Afganistán) y se mantiene activa en las áreas de seguridad, inversiones en áreas «difíciles», sus otros proyectos incluyen estudios de prospección aurífera en Alaska.
Su personal, con experiencia real en geología, incluye gente que ha trabajado para el Servicio de Geología gringo, Troy resources, que es una minera canadiense presente en Guyana, y la geóloga E. King, hija y fundadora junto con su padre de la empresa. Entre sus clientes se encuentran el USGS, USAID, ambas pertenecientes al gobierno estadounidense, DAI y la canadiense Cannacord Genuity cg/, son empresas de inversión que han trabajado en Guyana y también para la ExxonMobil.
Entonces, uno de los objetivos del gobierno guyanés es, dejar entrar más empresas mineras gringas y canadienses, con el objetivo geopolítico muy claro, y es asegurarse que sus gobiernos protejan a los inversores en contra de Venezuela, como lo han hecho con Cristallex, Mobil y otras empresas que hoy en día litigan contra el Gobierno Bolivariano.
Por supuesto, para el gobierno estadounidense, la presencia de empresas gringas en la frontera con Venezuela, también les da pie para la instalación de bases militares con las excusas de siempre, defender la soberanía guyanesa, el libre comercio, la democracia, los derechos humanos y el ambiente. Esto es un frente de playa para atacar directamente a nuestro país. No podemos olvidar la cantidad de acuerdos de seguridad firmados por Guyana con los gringos, los canadienses, la comunidad europea y Brasil, los cuales saldrán en su defensa.
Específicamente, y lo más peligroso es que Guyana está permitiendo la consolidación de instalaciones militares del Comando Sur de los EEUU en Guyana, incluyendo el uso militar del Aeródromo Brigadier Gary Beaton, ubicado en la Guayana Esequiba, estas son inaceptables y representan una nueva provocación por parte de la República Cooperativa de Guyana, en detrimento del espíritu de paz que rigió el Acuerdo de Argyle, suscrito con la República Bolivariana de Venezuela.
¿Qué es el acuerdo de Argyle?
El jueves 14 de diciembre de 2023, en San Vicente y las Granadinas, el presidente venezolano Nicolás Maduro y su homólogo guyanés, Irfaan Ali, se reunieron en Argyle, en San Vicente y las Granadinas, para tratar lo concerniente a la controversia histórica por el territorio Esequibo que involucra a ambos países.
Los puntos principales del documento final de la reunión fueron: Se acordó que, directa o indirectamente, ningún país amenazará ni utilizará la fuerza en ninguna circunstancia, incluidas las derivadas de cualquier controversia existente entre ambos Estados. Se estableció que cualquier controversia entre los dos Estados se resolverá de conformidad con el Derecho Internacional, incluido el Acuerdo de Ginebra del 17 de febrero de 1966. Ambos líderes se comprometieron con la búsqueda de la buena vecindad, la convivencia pacífica y la unidad de América Latina y el Caribe. Acordaron continuar el diálogo sobre cualquier otro asunto pendiente de importancia mutua para los dos países. Acordaron que ambos Estados se abstendrán de intensificar cualquier conflicto o desacuerdo derivado de cualquier controversia entre ellos. Los dos Estados cooperarán para evitar incidentes sobre el terreno que conduzcan a tensiones entre ellos. Acordaron establecer inmediatamente una comisión conjunta de los Ministros de Relaciones Exteriores y técnicos de los dos Estados para tratar los asuntos mutuamente acordados.
Es obvio que la intromisión de EEUU en la diatriba Guyana-Venezuela, viola los acuerdos anteriores al apoyar la ampliación de estaciones navales y aeroportuarias para uso militar, evidenciando su esfuerzo por entorpecer la resolución pacífica y negociada al diferendo territorial, atentando contra los legítimos derechos históricos de nuestro país Venezuela sobre la Guayana Esequiba.
Es más, la asociación de defensa y seguridad suscrita entre la Fuerza de Defensa de Guyana (GDF) con el Comando Sur de los Estados Unidos (SOUTHCOM), ha permitido que este último, haya concluido los trabajos de ampliación de una estación fluvial de la Guardia Costera de la GDF, lo que eleva a cuatro las instalaciones militares que han sido remozadas durante el 2024, para ser usados por los diferentes servicios castrenses y de seguridad guyaneses.
Esto permitirá la construcción de una rampa para el lanzamiento de embarcaciones de motores fuera de borda y el patio de almacenaje de botes interceptores en la mencionada instalación naval; realizar operaciones rápidas y efectivas con las lanchas patrulleras Metal Shark 29 Defiant de 29 pies y las Metal Shark 38 Defiant de 38 pies, embarcaciones que también fueron recibidas a través del programa de Ventas Militares Extranjeras (FMS) del Departamento de Defensa de los Estados Unidos, o por medio de donaciones de la Iniciativa de Seguridad de la Cuenca del Caribe (CBSI) de Estados Unidos, que autorizo su construcción al astillero estadounidense Metal Shark Boats; la construcción de un nuevo hangar y ampliando las instalaciones ya existentes del Ala Aérea de la Fuerza de Defensa ubicadas en el Aeropuerto Internacional Eugene F. Correia – Ogle, una red de estaciones de repetidoras de radio y la Escuela de Entrenamiento Anfibio de Selva, entre otras construcciones militares con fachada de infraestructura civil.
En fin, es toda una serie de violaciones y provocaciones de Guyana, aliado con EEUU, hacia Venezuela.
¿Qué ha hecho Venezuela al respecto?
Primero, ha celebrado y realizado un referendo consultivo sobre la protección de la Guayana Esequiba, el cual obtuvo más de 10 millones de votos.
Segundo, ha recordado al pueblo venezolano y a la comunidad internacional que el Artículo 10 de nuestra Carta Magna afirma, en lo específico sobre el territorio y los espacios geográficos de Venezuela, lo siguiente: «El territorio y demás espacios geográficos de la República son los que correspondían a la Capitanía General de Venezuela antes de la transformación política iniciada el 19 de abril de 1810, con las modificaciones resultantes de los tratados y laudos arbitrales no viciados de nulidad«.
Este artículo 10, con el añadido novedoso del no reconocimiento de laudos o acuerdos considerados nulos por vicio, sirvió de esencia para la ratificación del Gobierno del Comandante Hugo Chávez, de la posición histórica de defensa de los derechos incontrovertibles sobre el territorio de la Guayana Esequiba, fundamentado en el Acuerdo de Ginebra de 1966.
Tercero, la República Bolivariana de Venezuela, ha creado y aprobado una Ley Orgánica para la Defensa de la Guayana Esequiba. La legislación, impulsada por el presidente Nicolás Maduro, busca formalizar la anexión del Esequibo, un territorio de aproximadamente 160.000 kilómetros cuadrados.
Cuarto, bajo esta Ley se ha creado el Estado de Guayana Esequiba, donde se deben celebrar elecciones, mientras tanto, en ese entonces, el poder será ejercido por un jefe de gobierno designado por el mandatario venezolano, siendo el mayor general, Alexis Rodríguez Cabello, un militar venezolano. A su vez, mientras tanto, se designa como asiento de los poderes públicos del estado será la ciudad de Tumeremo, municipio Sifontes del estado Bolívar, en el sureste de Venezuela, cerca del territorio, creándose así la «zona de defensa integral de la Guayana Esequiba» ubicada en la localidad de Tumeremo, en el estado Bolívar (sur) y fronteriza con la zona en disputa.
A su vez, el presidente venezolano Nicolás Maduro Moros, instó a la empresa estatal petrolera PDVSA a «crear la división PDVSA-Esequibo» y a otorgar, también «de inmediato», licencias operativas para la explotación de crudo, gas y minas en el Esequibo.
Y Quinto, y para concluir, el 3 de diciembre de 2024, La vicepresidenta de la República, Delcy Rodríguez, anunció en el marco de la presentación ante la Asamblea Nacional (AN) del Proyecto de Ley de Presupuesto para el Ejercicio Económico Financiero 2025, recalcando que «este presupuesto para el ejercicio fiscal 2025, tiene unas connotaciones especiales, se reafirma la incorporación de la Guayana Esequiba y contará este 2025 con una partida presupuestaria, incluso ampliada«.
¡Atentos, pueblo y autoridades de Venezuela, veamos la perfidia y la traición actual contra el pueblo de Siria, para que no nos tomen desprevenidos!