El candidato de Unidas Podemos a la Comunidad de Madrid, Pablo Iglesias, ha denunciado las amenazas recibidas ayer ante la comisaría especial de la Policía Nacional del Congreso de los Diputados. El ex vicepresidente del Gobierno, que ayer recibió un sobre con cuatro balas y una amenaza escrita contra su familia, deja constancia de los hechos ante la Policía.

Iglesias, en la denuncia a la que ha tenido acceso lamarea.com, considera que dicha carta constituye “una grave amenaza” contra su vida y contra su familia, “dado que se trata de una amenaza que incluye material de guerra, que en apariencia es real y pertenece a un arma de fuego de gran calibre”.

“El arma al que parece pertenecer la bala dirigida contra mí, un fusil de asalto, es característico por su precisión y potencia, así como por su fiabilidad, deduciendo de la entrega de las “balas” su pertenencia a alguna persona con acceso a este tipo de armas, incluso que dispone de ellas y de su correspondiente munición”, se explica en la querella.

El ministro de Interior Fernando Grande Marlaska y la directora general de la Guardia Civil, María Gámez, que también recibieron ayer misivas con amenazas de muerte, han denunciado los hechos. Las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado han iniciado una investigación para tratar de dilucidar la procedencia de dichas amenazas.

La izquierda planta a la extrema derecha

Mientras se celebraba el debate electoral en la Cadena Ser, el candidato de UP ha abandonado el estudio en directo ante la negativa de la candidata ultraderechista Rocío Monasterio a retirar sus dudas sobre las amenazas de muerte. La representante de Vox ha asegurado no dar veracidad a esas amenazas.

Minutos después, el candidato socialista Ángel Gabilondo y la candidata de Más País Mónica García también han pedido poner fin al debate, por lo que la presentadora, Àngels Barceló, ha decidido acabarlo antes de los previsto.