Sectores políticos y sociales reiteraron un llamado a la paz y la justicia tras conocerse este domingo del asesinato de nueve jóvenes en Samaniego, Nariño, al sur de Bogotá.

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El representante del Pacto Local de Paz de ese territorio, Harold Montuar Andrade señaló en una misiva dirigida al presidente Iván Duque y el gobernador John Rojas que desde el primero de enero hasta el 16 de agosto de este año han muerto por arma de fuego cerca de 30 personas en esa zona.

Destaca que el municipio es “el lugar con la tasa de homicidios más alta del mundo. (100 homicidios por cada 100.000 habitantes)”.

Además, hizo un llamado a que el Gobierno implemente un programa integral de protección municipal y de garantías, “que analice el origen estructural de la violencia local y regional y que también visibilice los esfuerzos de construcción territorial de paz”.

También instó a un proyecto integral de protección de la Cooperación Internacional y solicitó se convocara de manera inmediata a una asamblea (virtual) para reactivar el pacto local – regional de paz, las iniciativas locales de paz, la política publica departamental de paz y de derechos humanos.

Harold Montufar, líder y exalcalde de Samaniego, aseguró que la comunidad le pidió a las autoridades nacionales y locales que se convoque de manera amplia a la ciudadanía para hacer una propuesta conjunta de construcción territorial de paz, basada en los derechos humanos e iniciativas locales.

Además, solicitó la intervención de la comunidad internacional.

“En el municipio van 30 homicidios por arma de fuego este año. Las nos catapulta a ser el municipio con más homicidios en el mundo: 100 por cada 100.000 habitantes. Esto es un despropósito internacional. De igual manera, en este año, se ha agudizado el conflicto armado y la deshumanización de la guerra. Ya van dos masacres, se han matado policías, mujeres, jóvenes”, señaló Montafur.

Sobre los hechos, el partido FARC señaló como “triste cotidianidad” las masacres que suceden en la nación. “En Colombia hay una guerra contra la niñez y la juventud, ¿también van a inventar que los 9 jóvenes de Samaniego eran delincuentes?”, publicaron en la red social Twitter.

En los últimos dos meses, 20 personas han sido asesinadas en Samaniego, una ciudad de unos 50.000 habitantes, de acuerdo al gobernador.

Limítrofe con Ecuador, el departamento de Nariño es una de las mayores zonas de narcocultivos en Colombia, con 36.964 hectáreas de las 154.000 sembradas en 2019, según la ONU.

Por su parte, la Defensoría del Pueblo de Colombia indicó que «la ocurrencia de masacres en el país manifiestan el altísimo grado de crudeza con la que los actores armados ilegales se encuentran disputándose los territorios para someter a la población civil a regímenes arbitrarios de violencia».

«El mensaje que dejan a los jóvenes del país es de desesperanza y sin futuro. La barbarie es el peor camino para una sociedad», indicó la Defensoría con relación a la matanza.

«Las autoridades deben abandonar la apatía, redoblar esfuerzos para detener este accionar criminal y someter a la justicia a los responsables», sostuvo en un comunicado publicado en su cuenta de Twitter.

«Nuestros niños, niñas y adolescentes necesitan garantías de que exista un futuro lleno de oportunidades para ellos», puntualizó.

Otras voces reaccionaron a los hechos, destacando la falta de acción del Gobierno:

Según medios locales, esta semana en el país ha ocurrido el asesinato de casi una veintena de personas, en su mayoría jóvenes y niños.