Fuente: Umoya num.98 – 1er trimestre 2020 E. Torre, Comité de Logroño.
¿Por qué Rosa Parks se convirtió en el icono de la lucha por los derechos civiles y la historia de Claudette Colvin fue olvidada? Claudette Colvin fue la primera en plantarle cara a las leyes de segregación racial en los autobuses, pero fue olvidada porque no había llegado el momento adecuado para abanderar esa lucha. Era demasiado joven y demasiado vulnerable. Sin embargo, nosotros queremos recordar su nombre en un acto de memoria histórica.
El 1 de diciembre de 1955, en Montgomery (Alabama), Rosa Parks cogió el autobús para regresar a casa después de terminar su jornada laboral. Al subir, tomó asiento en la parte de atrás, en los lugares permitidos para los ciudadanos de color. Al darse cuenta de que había gente blanca de pie, el conductor paró el autobús para pedir a tres mujeres negras que se levantaran. Rosa Parks, cansada ya de ser considerada una ciudadana de segunda, se negó a hacerlo, y por ello fue arrestada y enjuiciada. Se convirtió en «la Primera Dama del Movimiento por los derechos civiles» en Estados Unidos.
El 2 de marzo de ese mismo año, y en la misma localidad, había ocurrido exactamente lo mismo. Claudette Colvin, una adolescente de 15 años, se había negado a ceder su asiento a una mujer blanca. Cuando el conductor la amenazó con denunciarla si no se levantaba, la niña le dijo: «he pagado mi billete y es mi derecho constitucional».
El conductor continuó su ruta hasta que se detuvo en una calle donde había una patrulla policial. Los oficiales se subieron al autobús, le tiraron los libros y la arrancaron del asiento. Claudette no hacía otra cosa que repetir una y otra vez «es mi derecho constitucional». La esposaron en el coche patrulla y, en lugar de llevarla a un centro de detención para menores, la llevaron a un centro de reclusión para adultos. Fue acusada de violar las leyes de segregación racial, resistencia a la autoridad y ¡¡¡agresión a un agente!!! Las protestas iniciales, sobre todo de compañeros de colegio, se fueron diluyendo con el tiempo… y nada cambió en Montgomery.
Cuando en 2009 se publicó su historia y le preguntaron por qué no se levantó…: «No podía moverme, porque la historia me tenía pegada al asiento. Las manos de Sojourner Truth y Harriet Tubman [dos esclavas que huyeron y se convirtieron en iconos abolicionistas] sujetaban mis hombros e impedían que me levantase. […] Me sentí inspirada por estas mujeres».
Meses después, se repetía la situación con Rosa Parks y, ahora sí. Se organizaron protestas y un boicot general a los autobuses. En aquel momento, los líderes de la comunidad negra comenzaron a discutir la presentación de una demanda federal contra las leyes de segregación. El 13 de noviembre de 1956 la Corte Suprema de los Estados Unidos confirmaba la inconstitucional de las leyes de segregación. Rosa Parks y Martin Luther King se convirtieron en los estandartes de la lucha y Claudette… A Claudette se le negó su lugar en la historia.
La razón de este olvido fue que aquel verano de 1955 Claudette quedó embarazada de, según se dijo, un hombre blanco casado. Esto era un escándalo para esos tiempos, aunque hubiera sido una violación. Ella tuvo que abandonar el colegio y la ciudad de Montgomery, una madre soltera adolescente que quedó sola y en el olvido.
Aun reconociendo el papel de Rosa Parks, a la que conocía desde la infancia y admiraba, y entendiendo que era la persona adecuada para abanderar la lucha, declara: «No creo que haya espacio para muchos iconos. Creo que la historia solo tiene espacio suficiente para ciertas personas». Le duele que su nombre haya permanecido en el anonimato y sobre todo que siendo una niña, después del arresto y el embarazo, los líderes de la comunidad negra la olvidaran y la dejaran caer.