Cientos de periodistas de todo el mundo han firmado una petición en línea condenando al gobierno israelí por matar deliberadamente a periodistas palestinos en Gaza, Cisjordania y Líbano durante el año pasado.
Al momento de escribir este artículo, 790 personas – escritores, reporteros, editores, productores, fotógrafos y fotoperiodistas, artistas, videógrafos, educadores y estudiantes – han firmado la petición en línea con el titular: “Israel debe dejar de matar a periodistas”.
La petición dice, en parte:
A pesar de la reiterada condena de organizaciones de derechos humanos y medios de comunicación reconocidas internacionalmente, Israel ha seguido matando y mutilando a periodistas palestinos en Gaza. También ha intensificado los ataques contra periodistas en el Líbano.
Los ataques a periodistas son un ataque a la libertad de prensa y una violación del derecho internacional.
Esto debe terminar.
Entre los periodistas que respaldan la carta se encuentran Sakhr Al-Makhadhi, productor ejecutivo de AJ+, Al Jazeera; Anne Barnard, freelance y ex jefa de la oficina de Beirut del New York Times; Samaa Khullar, periodista de investigación en The Nation; y Khalil AlHajal, editor adjunto de opinión en Detroit Free Press .
Los periodistas palestinos en Gaza han servido como los ojos y oídos del mundo, documentando ataques israelíes como el asesinato deliberado de civiles que portaban banderas blancas y la tortura de palestinos detenidos. Estos periodistas han recibido amenazas de muerte, han sido mutilados o asesinados por las fuerzas israelíes, incluso cuando no estaban en misión. Sus familias también han sido asesinadas por las fuerzas israelíes.
Los que han circulado la petición señalan que el Comité para la Protección de los Periodistas (CPP) ha informado de que “los ataques israelíes han matado al menos a 123 periodistas y trabajadores de los medios de comunicación palestinos”, lo que lo convierte en el período más letal para los periodistas desde que la organización comenzó a recopilar datos en 1992. La Oficina de Medios del Gobierno en Gaza cifra en 182 el número de periodistas palestinos muertos desde octubre de 2023.
Más recientemente, un ataque aéreo en el Líbano el 25 de octubre mató a tres periodistas mientras dormían en una casa de huéspedes en una zona que ha sido utilizada por los medios de comunicación como base para cubrir la guerra. Un informe de Associated Press decía:
El ataque aéreo de las 3 de la mañana convirtió el lugar, una serie de chalés enclavados entre árboles que habían sido alquilados por varios medios de comunicación que cubrían la guerra, en escombros. Los coches marcados con “PRENSA” quedaron volcados y cubiertos de polvo y escombros, y al menos una antena parabólica para retransmisiones en directo quedó totalmente destruida.
El ejército israelí no emitió ninguna advertencia antes del ataque, que según dijo tenía como objetivo la infraestructura militante de Hezbolá. El ejército dijo más tarde que el ataque estaba siendo revisado.
Mohammad Farhat, un reportero de la televisión libanesa Al Jadeed TV en el sur, dijo que todos salieron corriendo en ropa de dormir. “La primera pregunta que nos hicimos fue: ‘¿Estáis vivo?’”.
Los tres periodistas muertos en el ataque aéreo fueron el camarógrafo Ghassan Najjar y el técnico de radiodifusión Mohammed Rida de la televisión panárabe Al-Mayadeen TV con sede en Beirut, y el camarógrafo Wissam Qassim, que trabajaba para Al-Manar TV del grupo libanés Hezbolá.
Si bien el ejército israelí sostuvo que los edificios fueron atacados porque eran una base de operaciones de Hezbolá, los grupos de derechos humanos informaron que los periodistas fueron atacados deliberadamente.
El director de organización del CPP, Carlos Martínez de la Serna, dijo que la organización estaba “profundamente indignada por otro ataque aéreo israelí mortal contra periodistas, esta vez contra un complejo que albergaba a 18 miembros de la prensa en el sur del Líbano”.
En otro caso, el periodista de 19 años Hassan Hamad fue asesinado por un proyectil de artillería israelí en su casa en Jabaliya el 6 de octubre después de recibir amenazas de muerte. Hamad recibió llamadas telefónicas amenazantes y mensajes de texto a través de WhatsApp de un oficial israelí que le ordenaba que dejara de filmar evidencia del genocidio. Hamad, de 19 años, había estado compartiendo informes en video sobre la incursión israelí en el campo de refugiados de Jabaliya cuando fue asesinado.
Un mensaje de texto amenazante recibido por Hassan, compartido en X por la activista de derechos humanos y periodista Maha Hussaini, decía: “Escucha, si continúas difundiendo mentiras sobre Israel, vendremos por ti y convertiremos a tu familia en […] Esta es tu última advertencia”.
Una de las demandas de la petición es que Israel permita que los periodistas heridos en Gaza sean evacuados inmediatamente para que puedan recibir la atención médica que necesitan con urgencia.
La petición dice:
Cuando el ejército israelí intensificó sus ataques en el centro y norte de Gaza en octubre de 2024, mataron a dos periodistas palestinos e hirieron gravemente a otros tres. El 7 de octubre, el camarógrafo de Al Jazeera Ali Al-Attar resultó gravemente herido debido a la metralla de un ataque aéreo mientras cubría las condiciones de los palestinos desplazados. Al-Attar se encuentra ahora en estado crítico, con intervenciones médicas que muestran una hemorragia grave y metralla alojada en su cerebro. Dos días después, las fuerzas israelíes dispararon al camarógrafo de Al Jazeera Fadi Al-Wahidi en el cuello mientras estaba informando. Los médicos dicen que su lesión lo ha dejado paralizado de por vida y ahora está en coma.
Un informe de Al Jazeera dijo que Al-Wahidi recibió un disparo de un francotirador israelí en la Franja de Gaza y que Israel no le ha permitido salir del enclave para recibir tratamiento médico urgente. El periodista palestino fue baleado mientras informaba sobre la invasión terrestre israelí del campo de refugiados de Jabalia, en el norte de Gaza, y llevaba un equipo que lo identificaba claramente como miembro de la prensa.
A pesar de los llamamientos de tres organizaciones de libertad de prensa, así como de funcionarios médicos, el gobierno israelí no ha permitido que Al-Wahidi y Ali al-Attar salgan de Gaza para ‘recibir un tratamiento médico que les salve la vida’.
Al Jazeera emitió un comunicado en el que instaba a la comunidad internacional a ‘tomar medidas inmediatas para garantizar la seguridad de los periodistas y los civiles en Gaza y exigir cuentas a las Fuerzas de Ocupación israelíes por sus repetidos crímenes contra los periodistas’.
El CPP emitió un llamamiento a los gobiernos de Estados Unidos, Francia y Alemania, así como a las Naciones Unidas, pidiendo ayuda para que Al-Wahidi y Al-Attar sean trasladados fuera de Gaza. Sin embargo, un comunicado del CPP dice: ‘A pesar de estos esfuerzos, la posibilidad de evacuar a estos periodistas está bloqueada actualmente debido a la falta de autorización israelí para su paso seguro’.
La campaña de petición afirma que los ataques a los periodistas ‘son un ataque a la libertad de prensa y una violación del derecho internacional’. Una resolución del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas adoptada en mayo de 2015 establece que el Consejo “condena todas las violaciones y abusos cometidos contra periodistas, profesionales de los medios de comunicación y personal asociado en situaciones de conflicto armado y exhorta a todas las partes en conflicto armado a que pongan fin a esas prácticas”.
(Artículo publicado originalmente en inglés el 1 de noviembre de 2024)
https://www.wsws.org/es/articles/2024/11/03/4af3-n03.html?pk_campaign=wsws-newsletter&pk_kwd=wsws-daily-newsletter