mpr21 Redacción
Como ya hemos expuesto en el caso de Marruecos, para escapar del bloqueo económico, el gobierno chino alienta a sus empresas a invertir en países capaces de sortear los aranceles impuestos a sus productos por los países europeos.
Argelia es otro de esos países que ofrece importantes ventajas a las empresas chinas. En Argel los diplomáticos y las empresas chinas explican la nueva política de Pekín en materia de inversiones extranjeras. Para las empresas chinas ha llegado el momento de internacionalizarse. La estrategia de los gigantes industriales chinos es producir en Argelia en colaboración con empresas locales para exportar a Europa, África e incluso América.
El gobierno chino quiere que sus empresas inviertan en el extranjero para eludir el bloqueo, la política de cuotas y los aranceles. Así lo ha confirmado durante la cumbre China-África celebrada recientemente en Pekín, siempre con la promesa de una “prosperidad compartida”.
La asociación con Argelia se está materializando a través de inversiones en proyectos industriales y de infraestructura. Además de la proximidad a Europa con la que Argelia está unida por un acuerdo de asociación, producir en Argelia ofrece dos ventajas importantes a las empresas chinas.
El primero es la reducción de los costos de envío de las mercancías, el segundo es que los productos son enteramente argelinos, lo que significa que pueden escapar de los aranceles impuestos por Occidente a los productos chinos, como parte de la guerra comercial desatada por Bruselas.
Es la misma estrategia que las empresas chinas están aplicando en México para llegar al mercado americano.
China no vende tecnología
En los últimos años Argelia ha recurrido a China para la realización de varios de sus grandes proyectos de desarrollo, como la explotación de la mina de fosfato de Tebessa, en los ferrocarriles y en la industria del automóvil.
Los chinos también participan en la explotación de los yacimientos de hierro de Gara Djebilet, en Tinduf, con una inversión de mil millones de dólares en particular en una explotación de mineral de hierro en Bechar. La mina tiene reservas que se encuentran entre las mayores del mundo: alrededor de 3.000 millones de toneladas. Se trata de una inversión estratégica para China. Con el proyecto de explotación del yacimiento de Gara Djebilet, los chinos aspiran a reducir su dependencia del mineral de hierro y acero de Australia, el primer productor mundial.
La parte china está empezando a aportar capitales y, sobre todo, conocimientos técnicos que Argelia no tiene. Los chinos se niegan a vender la tecnología. Su estrategia consiste en producir localmente en colaboración con grupos argelinos.
Los chinos, por ejemplo, tienen una larga experiencia en la instalación de raíles en entornos desérticos y su tecnología está resultando útil para proyectos similares en marcha en Argelia. El gobierno norteafricano pretende entrelazar el Sáhara y llevar el tren a Adrar, cerca de la frontera con Mali, y Tamanrasset, cerca de la frontera con Níger.
En el sector de bienes de consumo, las empresas chinas también están iniciando gradualmente la producción en Argelia. Además de los italianos, que lanzaron la actividad de montaje de vehículos en la fábrica de Fiat en Orán, también se espera con impaciencia a los fabricantes chinos Geeely y Chery con sus unidades en producción. Argelia depende en gran medida de la tecnología china en la industria del automóvil, que cada vez se impone más en los mercados mundiales.
El gigante automovilístico chino BYD podría iniciar la producción de coches eléctricos en Argelia en el marco de una asociación con Condor. El gigante chino está negociando con el grupo privado argelino la posibilidad de instalar una planta de producción de vehículos en Argelia.
La tecnología de las empresas chinas también se afirma en el ámbito de los electrodomésticos y Condor prevé abrir una gran fábrica de compresores para frigoríficos, siempre en colaboración con un grupo chino, con el que el grupo argelino con sede en Bordj Bou Arreidj tiene muchos otros proyectos, en telefonía móvil y en la producción de baterías de litio para coches eléctricos y móviles. Condor pondrá en marcha una planta de producción de aparatos de aire acondicionado con la china Hisense, cuyo objetivo es exportar a Europa.
Las ventajas de tener un amigo
Argelia puede beneficiarse del capital y de la tecnología de las empresas chinas para poner en marcha una industria de tecnologías de vanguardia. La nueva estrategia del gobierno de Argel para la diversificación de la economía se centra en fomentar determinados sectores agrícolas e industriales, empresas emergentes, economía del conocimiento y turismo.
China ha sabido aprovechar la deslocalización de sus fábricas por parte de los monpolios occidentales, atraídos por los activos del país, como la disponibilidad de mano de obra.
Hoy es un gigante industrial, cabecero en varios campos. La experiencia se puede reproducir en Argelia, que tiene importantes ventajas comparativas.
No es sólo Argelia la que está ganando. La nueva estrategia china consiste en instalar unidades de producción en países con ventajas comparativas, para seguir produciendo a costes más bajos, y al mismo tiempo sortear los muros que los países occidentales ponen a las mercancías chinas, en particular mediante fuertes aranceles.
Para los chinos, es también una forma de reducir los costes de determinados productos cuyo transporte es caro, como en el caso de los frigoríficos. De ahí el interés por el proyecto previsto con el grupo Condor.
Argelia también ofrece una puerta de entrada directa a los mercados del norte de África, ciertos países árabes y el África subsahariana.