Peter Kum – 3 de octubre de 2024
Con ocasión de la 19a Cumbre de la Francofonía, celebrada en París los días 4 y 5 de octubre, el Presidente Mahamat Idriss Deby Itno decidió visitar Francia. Este fue su primer encuentro con el jefe de Estado francés, Emmanuel Macron, desde el aplazamiento de dos visitas programadas.
El Presidente del Chad será recibido en una opinión individual en el Elíseo el 3 de octubre, según un artículo publicado el 2 de octubre por Jeune Afrique. Según el mismo diario Jeune Afrique, se abordarán varios temas cruciales:Acuerdos de defensa:
La parte chadiana desea reclasificar los acuerdos de defensa en acuerdos de cooperación, con contenido revisado y actualizado.
Una cuestión clave es el acceso a la capacidad de inteligencia, incluidos los satélites de reconocimiento, a fin de responder mejor a las amenazas de los grupos armados.
Comisión Mixta Franco-Chadiana:
La reactivación de esta comisión, que no se celebra en el pleno desde hace 21 años, también estará en el orden del día. Mahamat Idriss Deby Itno tiene la intención de interrogar a su anfitrión sobre esto.
Antecedentes de las relaciones franco-cahadianas
Las relaciones entre Chad y Francia se han tensado recientemente, en particular como resultado de una investigación en Francia para la malversación de fondos públicos contra el presidente Mahamat Deby. Esta situación provocó la cancelación de su visita a París el pasado mes de julio.La ausencia del presidente Deby en importantes eventos, como la apertura de los Juegos Olímpicos o el 80 aniversario del desembarco en Provenza, se ha interpretado como una señal de deterioro de las relaciones.
Estrategia Macron
En vista de la creciente inestabilidad en la región del Sahel, el presidente Emmanuel Macron convocó un Consejo de Defensa para discutir la presencia militar francesa en África. Aunque no está prevista una retirada completa del Chad a corto plazo, Francia está tratando de mantener una presencia significativa.
Conclusión
La visita del Presidente Mahamat Idriss Deby a París representa un primer paso hacia la normalización de las relaciones, pero quedan muchos obstáculos. La resolución de esta crisis dependerá de la capacidad de ambas partes para encontrar un terreno común, construyendo una relación sobre el respeto mutuo y los intereses comunes. El futuro de la presencia militar francesa en el Chad sigue siendo incierto y estará determinado por la evolución de estas conversaciones.
