Por A. RAMÍREZ PARA CANARIAS-SEMANAL.ORG.-

La Acampada Reivindicativa Lolo Dorta, colectivo ciudadano que desarrolla su activismo en la isla de Tenerife, advierte que la crisis habitacional que asola a Canarias ha alcanzado un punto crítico que requiere acciones inmediatas por parte de las autoridades locales.`

 «Con un incremento alarmante en el número de nómadas digitales, cuya cifra se estima en más de 80.000 a julio de 2023, las islas enfrentan -denuncian desde esta plataforma – a una paradoja devastadora: mientras se promueve a Canarias como un paraíso para extranjeros con alto poder adquisitivo, los canarios se ven obligados a lidiar con la escasez y el encarecimiento de la vivienda, un fenómeno que contribuye a la superpoblación y al consumo excesivo de recursos».

La Acampada Reivindicativa Lolo Dorta rechaza las campañas de ayuntamientos como el de La Laguna, en Tenerife, que bajo el lema «¡vive como un isleño!» invitan a los nómadas digitales a establecerse en la isla, sin considerar las repercusiones en la población local.

«En más de un 58% de los municipios canarios -advierten –  los autóctonos ya son minoría, una realidad que pone en jaque la identidad y la sostenibilidad de las islas».

En este contexto socioeconómico, la Acampada Reivindicativa considera que «la promoción de Canarias como destino para nómadas digitales por parte de diversas administraciones, incluyendo ayuntamientos y el propio Gobierno de Canarias, es una irresponsabilidad que agrava la ya delicada situación habitacional y social en el archipiélago».

La Acampada Reivindicativa no solo cuestiona esta orientación turística, sino que también exige la aplicación de la Sentencia del Tribunal de Justicia de la Unión Europea de 2020, que permite a los ayuntamientos regular la actividad del alquiler vacacional, una medida que podría aliviar la presión sobre el mercado inmobiliario local.

En un llamado a la acción, la Acampada Reivindicativa Lolo Dorta urge a las administraciones canarias a reconsiderar y eliminar cualquier iniciativa que fomente la llegada de más nómadas digitales a las islas. La petición se basa en la necesidad de proteger el bienestar de los canarios y garantizar un desarrollo sostenible que prevenga el colapso por sobreexplotación residencial y turística.

«La situación en Canarias – aseguran – es un claro reflejo de las complejidades que enfrentan muchos destinos turísticos populares: cómo equilibrar la prosperidad económica que trae el turismo con la preservación de la calidad de vida de sus habitantes y la sostenibilidad ambiental».