Por ANCOR SANTANA RODRÍGUEZ PARA CANARIAS-SEMANAL.ORG.-

En el Archipiélago Canario se implementa un régimen económico y fiscal especial llamado Régimen Económico y Fiscal de Canarias (REF), que teóricamente se justifica como un instrumento para promover el desarrollo de las islas, debido a las peculiaridades de las islas y  los mayores índices de pobreza de la población en comparación con la media del Estado.

La realidad es, sin embargo, que este régimen fiscal permite a los más ricos seguir enriqueciéndose, mientras se empobrece a la mayoría de la población.

En la práctica, el REF convierte a las islas en un paraíso fiscal para las grandes empresas y fortunas.

Las compañías con sede fiscal en Canarias disfrutan de amplias exenciones fiscales que les permiten reducir sus facturas fiscales sobre sus beneficios a la cifra más baja de todo el Estado español, lo que ha permitido a empresas, grandes compañías y fortunas canarias ahorrarse más de 5.000 millones de euros en impuestos sobre sociedades desde 2008 hasta la actualidad gracias a estas reducciones fiscales

Además, según la Agencia Tributaria, las islas son uno de los territorios donde se pagan menos impuestos sobre las ganancias

Figuras tributarias contempladas en el REF como la Reserva de Inversiones de Canarias (RIC) permiten que las empresas solo tributen por el 4% de sus beneficios en lugar del 20%.

Esto ha propiciado la elusión fiscal de las castas económicas dominantes, en detrimento de la mayoría, provocando una mayor pobreza y dependencia en lugar del desarrollo social y sostenible de las islas.

A pesar de ello, el amplio abanico de fuerzas políticas del Parlamento de Canarias apoya el REF e incluso apoyaron que se anclara en la Constitución española y en el Estatuto de Autonomía de Canarias para afianzarlo aún más.