Fuente: https://www.globalresearch.ca/canadian-government-literally-proposes-state-execution-living-babies/5800652 Ben Bartee Investigación global 28 de noviembre de 2022 The Daily Bell 22 de noviembre de 2022
“Asistencia médica para morir” (MAID): el gobierno canadiense propone literalmente la ejecución estatal de bebés vivos
Los medios corporativos tienen un historial establecido de promover el suicidio como una solución al cambio climático , entre otros problemas políticos de moda.
Los ingenieros sociales eufemísticamente rebautizan el suicidio facilitado por el estado como “asistencia médica para morir” (MAID). El gobierno canadiense incluso produce «libros de actividades» educativos para adoctrinar a los niños en el nuevo paradigma temprano, como este de Canadian Virtual Hospice :
Los defensores de la práctica enmarcan el suicidio facilitado por el estado como una forma peculiar de autoempoderamiento, recuperando el derecho a terminar con su vida en sus propios términos en lugar de «otra persona» :
“Desde la adopción temprana de Suiza hasta la última Australia, cada vez más países están legalizando la práctica. Ahora está disponible para más de 280 millones de personas en 11 países de todo el mundo. Se lo ofrecí a mi madre, quien recientemente (y agradecidamente) usó la legislación de Canadá para orquestar su propio fallecimiento… Si no reclamamos el diseño de nuestras propias muertes, es probable que alguien más lo haga… «
Todos los programas de ingeniería social son pendientes resbaladizas, que se mueven de manera predecible desde los argumentos más razonables y atractivos basados en la racionalidad hasta los más extremos e impulsados ideológicamente.
En este caso, el argumento gubernamental más razonable del suicidio parte de los adultos mayores que se acercan al final de su vida, en una angustia física insoportable por una u otra enfermedad. Así es como se vende inicialmente.
Luego, en 2021, el proyecto de ley C-7 enmendó el Código Penal canadiense para “ derogar la disposición de que la muerte natural de una persona sea razonablemente previsible para que pueda ser elegible para MAID ”. En consecuencia, los parámetros bajo los cuales un paciente puede solicitar legalmente que el estado lo mate se expandió para incluir la enfermedad mental.
La narrativa de “suicidarse porque está deprimido” es un reconocimiento tácito del fracaso de la profesión psiquiátrica.
Desde los años 80, la industria médica inyectó inhibidores selectivos de la recaptación de serotonina «antidepresivos» en el torrente sanguíneo de decenas de millones de estadounidenses. Toda la premisa farmacológica de estos medicamentos, que la depresión es causada por un desequilibrio neuroquímico, ha sido desacreditada recientemente . Ganaron miles de millones mientras la depresión empeoraba.
Luego tenemos las benzodiazepinas «anti-ansiedad» como Valium y Xanax que en realidad solo disparan una escopeta neuroquímica a tu cerebro y te convierten en un zombi emocional durante 10 horas. Esos tampoco funcionaron para mejorar los resultados de salud mental a largo plazo.
Así que ahora levantan las manos: «A la mierda, solo mátate».
Esto no es teórico. El gobierno belga ya mató este año a un joven de 23 años físicamente sano por motivos de salud mental:
“Una mujer de 23 años que había sobrevivido a un ataque terrorista cuando era adolescente murió después de que decidió ser sacrificada… Aunque Shanti escapó físicamente ilesa de la explosión, sufrió mentalmente todos los días desde entonces… Shanti buscó ayuda en un centro psiquiátrico en su ciudad natal de Amberes e incluso le recetaron medicamentos antidepresivos. Sin embargo, el trauma psicológico fue demasiado fuerte e intentó suicidarse dos veces; una vez en 2018 y una vez en 2020. Finalmente, en mayo de este año, optó por la eutanasia”.
Ahora, habiendo cruzado la frontera de la salud mental, como estaba destinado desde el principio, la agenda se mueve hacia el Santo Grial: matar niños. Así llegamos al tratado de la Sociedad Canadiense de Pediatría (acrónimo apropiado como CPS) sobre el tema, » Asistencia médica para morir: una perspectiva pediátrica «:
“ Garantizar que los recién nacidos, los niños y los jóvenes reciban el nivel de atención más alto posible mientras se están muriendo es un privilegio y una responsabilidad de los médicos y profesionales afines. Brindar un enfoque reflexivo, respetuoso y personal a cada situación del final de la vida es un deber de cuidado esencial y en evolución, y el proceso debe satisfacer las necesidades sociales, culturales y espirituales únicas de cada paciente (y familia).
Entonces, el sistema médico obtiene el permiso oficial de las autoridades de Salud Pública © (la CPS es la máxima autoridad en medicina infantil) para matar niños… siempre que su toma de decisiones sea «respetuosa» con las «necesidades sociales, culturales y espirituales».
La Sociedad Canadiense de Pediatría se refiere a los niños a los que pretende matar por piedad como «menores maduros», un término orwelliano aparentemente destinado a transmitir que están lo suficientemente desarrollados intelectualmente como para decidir suicidarse:
Pero ya, la CPS está abriendo la puerta para matar a niños de todas las edades, citando “la necesidad de examinar las solicitudes y las actitudes en torno a MAID para menores de todas las edades”.
Esto incluye, sorprendentemente, a los bebés:
“Los padres de bebés y niños ‘nunca competentes’, incluidos los que son demasiado pequeños para tomar una decisión razonada, y los propios jóvenes se acercan cada vez más a los profesionales de la salud canadienses para hablar sobre temas relacionados con MAID. Los resultados de una encuesta del Programa Canadiense de Vigilancia Pediátrica (CPSP), discutidos a continuación, indican que los padres plantean estas preguntas a los pediatras con más frecuencia que los menores …
En un futuro previsible, los padres pueden impugnar las decisiones de atención médica en los tribunales con el argumento de que la continuación de la vida , tal como la experimentó su hijo moribundo o profundamente discapacitado, no es lo mejor para ese niño ”.
(Para su crédito, al menos un funcionario canadiense de alto rango, el ministro de discapacidad, ha rechazado la propuesta de matar bebés , por ahora).
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El estado no tiene el poder funcional, y tal vez no debería hacerlo, para prevenir el suicidio, aunque técnicamente es ilegal. En lo que el Estado no debería involucrarse es en facilitar activamente el suicidio.
Como hemos visto, la inercia empujará al estado a reclamar más y más poder de matar para sí mismo.
A menos que el rechazo popular sea efectivo, esto es lo que sucederá a continuación: a medida que la implosión diseñada de la civilización occidental por una camarilla de tecnócratas multinacionales (encabezada por el Foro Económico Mundial) se acelere, los recursos disminuirán.
No habrá suficiente agua ni comida para todos, y estallará el conflicto por el acceso a estos preciosos materiales.
Postulándose como administradores públicos responsables, los gobiernos establecerán juntas asesoras para decidir qué personas deben evitar los traumas de la privación, por su propio bien, eso sí.
Habiendo determinado que la muerte es el resultado más humano, el estado los liberará de su carga celestial con la eutanasia, un asesinato misericordioso.
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Ben Bartee es un periodista estadounidense independiente residente en Bangkok con pulgares opuestos. Siga su material a través de Armageddon Prose y/o Substack , Patreon , Gab y Twitter .
La imagen destacada es de The Daily Bell
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