Amyra El Khalili: Historia de Vladimir Herzog se repite desde hace 76 años en Palestina ocupada

Amyra El Khalili: La historia de Vladimir Herzog se repite desde hace 76 años en la Palestina ocupada

La declaración de El Khalili fue hecha este jueves (20), en el relanzamiento del libro “El genocidio aísla a Israel: el desafío es crear el Estado de Palestina”, en SP

 

Traducción:

“Las atroces prácticas de crímenes contra la humanidad, como la tortura que asesinó al periodista Vladimir Herzog, han sido utilizadas por los sionistas durante 76 años para aterrorizar a los palestinos”, afirmó este jueves (20) la profesora de economía Amyra El Khalili.

La declaración fue hecha durante el relanzamiento del libro “El genocidio aísla a Israel: el desafío es crear el Estado de Palestina” , de Nathaniel Braia y Nilson Araújo de Souza. El encuentro, realizado en el Auditorio Vladimir Herzog, sede del Sindicato de Periodistas del Estado de São Paulo (SJSP), contó con la presencia de líderes políticos y comunicadores de la causa palestina.

Durante su intervención, la editora de la red del Movimiento de Mujeres por la Paz en Palestina recordó también que hoy hay más de 9.300 prisioneros de guerra en manos de las fuerzas sionistas, y denunció: “muchos de los cuales son mujeres y niños. Según organizaciones especializadas, esta cifra nunca se había alcanzado en la historia”.

Vea el discurso completo y, a continuación, la transmisión completa del relanzamiento del libro “El genocidio aísla a Israel: el desafío es crear el Estado de Palestina”:

Hace 40 años, yo, Amyra El Khalili, y el activista Carlos Seabra, entre otros compañeros, fundamos el cine club del Sindicato de Periodistas Profesionales del Estado de São Paulo, en este auditorio Vladimir Herzog.

Éramos jóvenes, éramos refugiados e hijos de refugiados árabes y judíos, palestinos e israelíes. Jóvenes brasileños y extranjeros naturalizados que creyeron en el poder de las palabras, las imágenes, el arte y el periodismo para combatir las desigualdades, el sufrimiento y la injusticia.

Aquí, en este auditorio Vladimir Herzog, que nos recibe una vez más y cuyo nombre rinde homenaje al periodista torturado y asesinado por el régimen militar brasileño durante la dictadura, hemos participado en importantes acciones que formaron parte de la historia progresista de este país en defensa de los derechos humanos, los derechos ambientales y los derechos políticos.

Hoy estamos aquí nuevamente, cuatro décadas después, en el auditorio Vladimir Herzog, en este evento de relanzamiento del libro “El genocidio aísla a Israel: el desafío es crear el Estado de Palestina” de Nathaniel Braia y Nilson Araújo de Souza, promovido conjuntamente por los Sindicatos de Periodistas y Escritores del Estado de São Paulo, con la participación de dirigentes sindicales, entidades representativas, líderes comunitarios, religiosos y políticos, periodistas y activistas.

Estamos aquí para dejar constancia en la historia de que no permanecimos en silencio y que no descuidamos los hechos en este acto por un alto el fuego permanente en Gaza y por el fin de la masacre del pueblo palestino.

Las atroces prácticas de crímenes contra la humanidad, como la tortura que asesinó al periodista Vladimir Herzog, han sido utilizadas por los sionistas durante 76 años para aterrorizar a los palestinos. Los grandes medios de comunicación han destacado repetida y vigorosamente que Hamás secuestró a civiles inocentes, pero no cuentan la otra versión de la historia. No dice por qué lo hizo Hamás y no aclara su objetivo de intercambiarlos sanos y salvos por los prisioneros de guerra palestinos secuestrados y torturados, y especialmente rescatar los cuerpos sin vida de aquellos que ya han sido martirizados, cuyas familias aún no han podido enterrarlos con dignidad.

Actualmente hay más de 9.300 prisioneros de guerra en las cárceles israelíes, sin contar los detenidos en Gaza, que se cuentan por miles y están sujetos a la política de desaparición forzada en los campos. Más de 3.400 prisioneros palestinos se encuentran en detención administrativa bajo el pretexto del llamado “archivo secreto”, muchos de los cuales son mujeres y niños. Según organizaciones especializadas, esta cifra nunca se había alcanzado en la historia.

Recordar al mundo que el caso de los prisioneros palestinos viene sucediendo desde hace muchas décadas, desde 1948. A pesar de ello, el mundo continúa ignorándolos y la tortura sistemática a la que son sometidos, que se ha intensificado de manera terrible desde el inicio de este genocidio en octubre del año pasado.

Las autoridades del Servicio Penitenciario israelí cometieron crímenes horrendos contra nuestros prisioneros, violando todos los estatutos internacionales, con el fin de matarlos y deshumanizarlos, según decenas de testimonios de equipos legales y prisioneros liberados después de cumplir sus condenas.

Las familias de los presos políticos palestinos, hombres y mujeres, en las cárceles de ocupación israelíes han pedido a las organizaciones jurídicas y humanitarias de la comunidad internacional y a la Cruz Roja Internacional que se comprometan a cumplir sus responsabilidades jurídicas y humanitarias y actúen urgentemente para proteger a sus seres queridos recluidos en las cárceles de ocupación israelíes.

La detención administrativa fue utilizada por primera vez en Palestina por el mandato colonial británico y luego adoptada por el régimen sionista. En la actualidad se utiliza rutinariamente para atacar a los palestinos, especialmente a líderes comunitarios, activistas y personas influyentes en sus ciudades, campamentos y aldeas. Aunque según el derecho internacional este tipo de detención sin cargos sólo puede ocurrir por “razones urgentes de seguridad”, Israel la utiliza como un método rutinario para reprimir la sociedad y la actividad palestinas.

Las órdenes de detención administrativa, que se emiten por un máximo de seis meses consecutivos, son renovables indefinidamente y permiten que los palestinos –incluidos niños menores de edad– pasen años encarcelados sin cargos ni juicio bajo detención administrativa. La detención administrativa –como todo el sistema penitenciario israelí– es un arma colonial diseñada para atacar la resistencia palestina y aislar a los líderes de la lucha del pueblo palestino.

La historia se repite cuando ignoramos y descuidamos el dolor de los demás. Así como la familia de Vladimir Herzog emprendió su saga para demostrar el destino de su mártir, cuya sangre derramada, como la de muchos otros que cayeron, fue el costo de lograr el Estado Democrático de Derecho, nosotros, palestinos, hacemos este llamado a la verdad revelada a través de los lentes y cámaras de nuestros periodistas mártires, y llamamos a la defensa de los periodistas desaparecidos y secuestrados por el terror sionista para que sean protegidos y liberados de inmediato.

Aquí, en el Auditorio Vladimir Herzog, con la gente adecuada, en el lugar adecuado y en el momento adecuado, escribimos una vez más la historia de este país en solidaridad con nuestra justa causa palestina, que es la causa de los derechos humanos y ambientales, en memoria de los que murieron en prisiones torturadas y de los que sufrieron y aún sufren los traumas y el dolor de las injusticias y crueldades a las que ningún ser humano debería ser sometido.

¡Tortura nunca más!
¡Tortura nunca más!
¡Palestina libre, “del río al mar”!

Amyra El Khalili
Movimiento de Mujeres por la Paz en Palestina

Edición: Alexandre Rocha

Transmisión del relanzamiento del libro “El genocidio aísla a Israel: el desafío es crear el Estado de Palestina”:

Las opiniones expresadas en este artículo no reflejan necesariamente las opiniones de Global South Dialogues.

Guillermo Ribeiro Periodista formado en la Unesp, estudiante de Base de Datos en Fatec y colaborador de la Revista Global Diálogos do Sul. Más contenido en guilhermeribeiroportfolio.com

 

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