AMLO y la 4T

Adalberto Santana

Foto: EFE


De esa manera con las elecciones de julio de 2018, se inició la 4T, al triunfar con una rotunda victoria electoral, la candidatura presidencial de AMLO, apoyado en la coalición “Juntos Haremos Historia”,  integrada por el Partido del Trabajo (PT), el Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) y el  Partido Encuentro Social (PES).

El lunes 30 de septiembre de 2024, a las 23:59 horas, culminó el periodo presidencial en los Estados Unidos Mexicanos (EUM) que abarcó de 2018 a 2024, periodo en que ejerció el presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO). Es la culminación de la primera etapa de lo que su gobierno ha calificado como la Cuarta Transformación (4T). Las tres anteriores etapas en la historia mexicana se consideran en la caracterización política lópezobredorista.

La Primera Transformación (1T), arranca en el momento en que se logra  la Independencia de lo que era el Virreinato de la Nueva España, convirtiéndose en 1821 en una nación independiente y consolidándose como una República en 1824, incluyendo la anexión del territorio de Chiapas que forzadamente le fue arrebatado a la naciente República Federal de Centro América (1823).

La Segunda Transformación (2T) emerge con las Reyes de Reforma que impulsó el más grande presidente mexicano hasta la actualidad, Don Benito Juárez García. Mandatario quien a su vez derrotó encabezando a las fuerzas liberales mexicanas a la invasión francesa, la cual se prolongó de 1862 a 1867.  Culminado esa intervención con el fusilamiento de Maximiliano de Habsburgo el 16 de junio de 1867, personaje de triste memoria quien fue proclamado emperador de México por las fuerzas conservadoras y antijuaristas.

La Tercera Transformación (3T), se desarrolló en su primera fase  del 20 de noviembre de 1910 cuando se inició la lucha armada contra la dictadura de Porfirio Díaz. Insurrección popular donde participaron distintos bloques del poder revolucionario, como las fuerzas que encabezó el general Emiliano Zapata en el sur del país; las fuerzas que lideró el General Francisco Villa en el norte del territorio mexicano y el bloque de fuerzas llamadas constitucionalistas que lograron hegemonizar la llamada Revolución Mexicana hasta los primeros años de la década de 1920. La segunda fase de la 3T, se desarrolla cuando figura su máxima ola revolucionaria, que  puede  ubicarse en el periodo de 1934 a 1940,  coyuntura en la que gobernó el país el general Lázaro Cárdenas del Río. Etapa de la 3T, en que  se desarrolló una gran política de masas profundizando la Reforma Agraria, la nacionalización de la industria petrolera y la creación del Instituto Politécnico Nacional (IPN), entre otras de las grandes transformaciones que signaron el punto máximo de la Revolución Mexicana. Posteriormente la tercera fase de la 3T, figura cuando emerge el Partido Revolucionario Institucional (PRI), en 1946. Momento en que fue declinando y derechizando la vida política hasta que en el año de 2000, pierde las elecciones presidenciales el PRI, dando lugar a gobiernos ideológica y políticamente más conservadores. Situación en que toma mayor auge el llamado modelo neoliberal (capitalismo salvaje). Última fase que abarcó los gobiernos de corte abiertamente conservador, encabezados por Vicente  Fox (2000-2006); Felipe Calderón (2006-2012) y Enrique Peña Nieto (2012-2018).

De esa manera con las elecciones de julio de 2018, se inició la 4T, al triunfar con una rotunda victoria electoral, la candidatura presidencial de AMLO, apoyado en la coalición “Juntos Haremos Historia”,  integrada por el Partido del Trabajo (PT), el Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) y el  Partido Encuentro Social (PES). Partidos que sumaron 30,113,483 votos. Durante el gobierno obradorista, comenzaron una serie de transformaciones sociales  que tuvieron al centro de su programa a los más humildes, cuya consigna central fue “Primero los pobres”. Logrando  reducir los márgenes de pobreza  en la población mexicana. Según el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social  (Coneval): “México redujo en 8.9 millones de pobres a un total de 46.8 millones de personas, casi 16% menos que las 55.7 millones de 2020”. Otro elemento que económicamente se conquistó fue estabilizar el peso frente al dólar dando una gran estabilidad a las finanzas, así como hacer crecer el empleo e integrar y hacer mucho más dependiente al país a la economía estadounidense. De igual manera en su lucha contra la corrupción logró impulsar la Reforma Judicial, espacio donde el poder judicial ha sido de lo más corrupto en la sociedad mexicana. Tarea que la próxima mandataria (2024-2030), se ha comprometido a continuar. Otro gran problema interno ha sido el de la violencia del narcotráfico y el de los traficantes de migrantes indocumentados que no ha  podido contenerlos. Por el contrario son flagelos que heredera a su sucesora como una gran roca caliente.

Se puede constatar que el efecto de una gran política popular de AMLO, fue el resultado electoral donde Claudia Sheinbaum, triunfó con más votos que el propio mandatario saliente con la suma de 33,226,602. Es decir,  sumó un porcentaje superior al de AMLO con el 59.35% de la votación. Favorable para la coalición del PT, Morena y PVEM. De esa manera la oposición de la derecha mexicana ha tenido una aplastante derrota.

En la política internacional, AMLO, que siempre ha sido menos beligerante, ha tenido que enfrentar grandes retos como haber convivido determinado tiempo con Donald Trump (1917-2021) y con Joe Biden (2021-2025), donde el tema de la migración indocumentada ha tenido que frenarla en la frontera sur, con políticas represivas como las que se impulsan en el Instituto Nacional de Migración (INM), donde su director, Francisco Garduño, ha funcionado como un verdadero gánster. Asimismo la defensa mexicana de AMLO de Cuba frente al bloqueo económico estadounidense, ha sido una correcta y soberana continuidad de la tradicional política exterior de México, al otorgar el derecho se asilo en noviembre de 2019,  a ciudadanos bolivianos como Evo Morales y el actual presidente Luis Arce Cotacora. Así, como también, a diversos dirigentes de la Revolución Ciudadana de Ecuador. Situación que con el gobierno de Daniel Noboa se llegó a la ruptura de relaciones diplomáticas, en virtud del asalto policiaco y de militares a la embajada de México en Quito. Coyuntura en que se secuestro por esas fuerzas represivas al ex vicepresidente, Jorge Glas el 5 de abril de  2024, cuando se encontraba asilado en la sede diplomática mexicana. En resumen AMLO, con sus luces y sombras,  ha sido para el pueblo de México y de nuestra América, uno de los mandatarios con más prestigio nacional e internacional que ha dejado una profunda huella en la historia política de México en los inicios del siglo XXI.

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