África: un epicentro de crisis humanitarias que no fue abandonado

Fadi Ali                                                                                                                                      8 de noviembre de 2025 Hora: 09:19

negras

El 57 por ciento de la población sursudanés enfrenta niveles de hambre clasificados como de crisis, emergencia o catastróficos. Foto: WFP.


Las crisis humanitarias en el continente africano enfrentan múltiples desafíos que se agravan día tras día, entre ellos los conflictos armados, el terrorismo y la sequía, que han provocado continuas oleadas de desplazamiento.

Según un informe publicado por el Consejo Noruego para los Refugiados sobre “Las crisis más olvidadas del mundo” para 2025, los países africanos encabezaron la lista de las naciones con las crisis más marginadas a nivel internacional.

El informe señaló que los países africanos “que soportan las cargas más pesadas a causa de la violencia y el desplazamiento son los mismos que sufren el mayor abandono y marginación por parte de los donantes y actores humanitarios”.

Añadió que “millones de personas desplazadas, que padecen inseguridad alimentaria o carecen de refugio, reciben muy poca ayuda debido al agotamiento de los donantes, la escasa cobertura mediática y la ausencia de soluciones políticas”.

También definió los “países en crisis” como aquellos que albergan a más de 200.000 desplazados y se encuentran en situaciones humanitarias graves.

Entre los 34 países analizados, el informe destacó que varios países africanos figuran entre los más olvidados y ausentes del radar mundial: Camerún, Etiopía, Mozambique, Burkina Faso, Malí, Uganda, Irán, la República Democrática del Congo, Honduras y Somalia.

Asimismo, subrayó que “la financiación de la ayuda humanitaria disminuyó en general durante 2024, con una brecha de unos 25.000 millones de dólares entre las necesidades y los recursos disponibles, lo que significa que más de la mitad de las solicitudes no fueron satisfechas.”

Mientras tanto, el periódico francés Le Monde informó que “130 millones de personas en el continente africano necesitan asistencia, pero la ayuda internacional el año pasado cubrió menos de un tercio de sus necesidades.

En 2024, después de tres años de sequía récord, los expertos expresan su preocupación por las consecuencias del regreso del fenómeno climático El Niño en el Cuerno de África, donde ya se han registrado grandes inundaciones.”

El informe de Le Monde publicado en 2024 también destacó “el caso de Burundi, donde el ingreso per cápita es el más bajo del mundo y que recibe muy poca atención mediática, a pesar de enfrentar repetidamente eventos climáticos extremos que generan necesidades humanitarias urgentes.

Las intensas lluvias e inundaciones de 2023, incluido el desbordamiento del lago Tanganica, desplazaron a decenas de miles de personas y redujeron los medios de subsistencia de más del 10% de la población, la gran mayoría en zonas rurales.”

El periódico añadió que “la guerra en Ucrania y la guerra de Israel contra Gaza han proyectado su sombra sobre las tragedias que vive el continente africano, donde 14 de los 26 países para los cuales las Naciones Unidas han solicitado 46.400 millones de dólares se encuentran en situación de emergencia humanitaria, que afecta a 130 millones de personas de los 300 millones en todo el mundo.”

El diario agregó que las raíces de estas crisis se deben, en la mayoría de los casos, a una combinación de factores, entre ellos la guerra que estalló en Sudán en abril de 2023 entre las Fuerzas Armadas y las Fuerzas de Apoyo Rápido, lo que obligó a millones de civiles a huir de los combates.

Los enfrentamientos en curso han provocado una destrucción generalizada de la infraestructura en la capital, Jartum, así como en las regiones de Darfur y Kordofán, convirtiendo zonas enteras en ruinas deshabitadas tras sucesivas oleadas de violencia y saqueos.

El periódico señaló que el control cambiante de las ciudades entre ambos bandos y el colapso casi total de las instituciones estatales han convertido a Sudán en uno de los mayores focos de desplazamiento del mundo, con más de 10 millones de desplazados internos y más de dos millones de refugiados que han huido a Chad, Sudán del Sur y Egipto.

También advirtió del riesgo de fragmentación del Estado y del surgimiento de poderes locales enfrentados que podrían transformar el país en un terreno abierto para grupos extremistas y redes de tráfico de armas y personas en el Sahel y el Cuerno de África.

Por otra parte, los resultados del informe de la ONU “El estado de la seguridad alimentaria y la nutrición en el mundo 2025”, publicado el 27 de julio de 2025, revelaron que la población del continente africano sigue siendo la más afectada por el hambre a nivel mundial, según los datos de 2024.

El informe, elaborado por cinco agencias especializadas de las Naciones Unidas, indicó que “la proporción de personas que enfrentan hambre en África superó el 20% en 2024, lo que equivale a 307 millones de personas.”

Añadió que “la proporción de personas que padecieron hambre a nivel mundial disminuyó al 8,2% en 2024, en comparación con el 8,5% en 2023 y el 8,7% en 2022, con una reducción promedio de unos 15 millones de personas respecto a 2023 y 22 millones respecto a 2022.”

El informe también señaló que “mientras la tasa global disminuyó, el hambre continuó aumentando en la mayoría de las regiones de África y Asia Occidental, alcanzando el 12,7% en esta última, lo que equivale a más de 39 millones de personas.”

Destacó que “aunque la reducción representa un avance positivo, las cifras registradas siguen estando por encima de los niveles previos a la pandemia de COVID-19”, y atribuyó la lenta recuperación de la seguridad alimentaria en parte a “la elevada inflación de los precios de los alimentos en los últimos años.”

El informe proyecta que “para 2030, unos 512 millones de personas sufrirán desnutrición crónica, de las cuales aproximadamente el 60% se encontrarán en África, lo que refleja el enorme desafío que enfrenta el continente para alcanzar el Objetivo de Desarrollo Sostenible número 2: Hambre Cero.”

Aunque la atención mundial se ha centrado principalmente en la guerra entre Rusia y Ucrania y en la crisis de Gaza, el continente africano ha sido objeto de atención por parte de algunos donantes, especialmente de los Emiratos Árabes Unidos.

El 29 de abril de 2025, la Fundación Mohammed bin Zayed para el Impacto Humanitario, en cooperación con varios socios, lanzó la iniciativa “Fondo de los Comienzos” en África, con el objetivo de mejorar la salud materna e infantil y reducir las tasas de mortalidad. El jeque Mohammed bin Zayed afirmó que la iniciativa forma parte del compromiso continuo de los Emiratos con la salud y el desarrollo del continente.

El fondo opera bajo un compromiso filantrópico conjunto de aproximadamente 600 millones de dólares, de los cuales 100 millones están destinados específicamente a la salud materna y neonatal.

Los Emiratos Árabes Unidos también han continuado enviando puentes aéreos humanitarios para ayudar a las víctimas de desastres en varios países africanos, como Seychelles, Libia, Marruecos, Somalia y Kenia.

En el mismo contexto, el ministro de Estado de Comercio Exterior, Thani bin Ahmed Al Zeyoudi, explicó que los Emiratos han invertido 110.000 millones de dólares en sectores africanos prometedores, como parte de su estrategia para fortalecer las alianzas de desarrollo a largo plazo y apoyar los esfuerzos del continente hacia su progreso económico y social.

teleSUR no se hace responsable de las opiniones emitidas en esta sección.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *