Fuente: https://elsudamericano.wordpress.com/2023/03/31/acerca-del-debate-legislativo-en-torno-al-secuestro-y-desaparicion-de-personas-en-argentina/
– “POLITICIDIO” –
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Declaración Pública.
Durante el transcurso de los últimos meses, a la luz de un programa declaradamente “anticomunista”, antipopular, neoautoritario, de la primera linea del gobierno Biden y la ‘comunidad de inteligencia militar-financiera de la OTAN’, alimentado por cifras de financiamiento nunca antes vistas, se ha desarrollado una intensa campaña neofascista en los medios de guerra psicológica y de propaganda, de la burguesía criminal argentina y sus socios transnacionales.
La burguesía proimperialista y la oligarquía antinacional, enemigos históricos del pueblo trabajador y explotado conocen perfectamente las cifras, –los datos personales de sus víctimas y sus familiares– y los resultados socioeconómicos, socio-psicológicos, medioambientales, etc., etc… de la guerra contrainsurgente que el Estado genocida y las Fuerzas Armadas de la oligarquía argentina han librado incesantemente contra las mayorías obreras y la vanguardia organizada del pueblo durante, (al menos) los últimos cien años.
Miguel Bonasso escribía hace varias décadas, recordando al escritor Jorge Luis Borges, que los gorilas tenían pésima reputación en Argentina porque su imagen estaba indisolublemente asociada a “la venganza de los padres”.
La burguesía, sus Iglesias, sus torturadores y sus filósofos, al comando del aparato de Estado, reclamando para sí por los hechos, el uso irrestricto, paternal, (y siempre claro), por lo tanto “legítimo”, de la violencia…
Bonazzo se refería a la venganza de los padres antiperonistas contra los hijos, sus hijos y todos “los hijos” de las conquistas obreras de los años cuarentas y los cincuentas, –esos hijos, nuestros padres–, que quisieron ver en Juan Domingo Perón al padre político de una nueva generación de jóvenes, revolucionarios, antimperialistas, a los que les fue negada, sistemáticamente, su condición de sujetos políticos.
Pensamos que solo en la lucha se encuentra identidad, solo en el movimiento de lo real se hace posible observar las formas concretas de la lucha de clases; historizando las razones y los motivos, humanizando las formas concretas de la dominación y la guerra social. Procurando alcanzar su expresión real, ‘política’, en torno del devenir de la sociedad y su autoconciencia. De tal modo la lucha por la verdad de las mayorías, (y esto significa que la estricta mayoría de las personas del planeta son pobres y muy pobres) está estrictamente ligada, en relación dialéctica, con la falsificación mentirosa de la realidad y la in-conciencia histórica educacional-escolástica-funcionalista, a través de la escolarización burguesa de la infancia. Mediada y estructuralmente determinada, la guerra psicológica permanente de las industrias de propaganda burguesa, la expropiación de la sensualidad, de la naturaleza, el tiempo libre, y la politicidad, etc.
La perversión neo-nazifascista intenta sublimar la insatisfacción burguesa de la vida, –vida invivible, mortificación de la existencia sensible, vida-muerta, expropiada de sentido y carácter orgánico, vida-no vida, existencia apenas, en la total enajenación de lo humano, guerra de supervivencia, desilusión filosófica–. El carácter sádico, corresponde a su falta de horizonte civilizatorio, su irracionalismo tecnofeudal, y el masoquismo es la clave de su discurso, la autoafirmación del psicópata.
El ‘partido del Orden’ burgués presenta así sus múltiples rostros. Todos los símbolos y testimonios de la lucha obrera y popular deben ser suprimidos. Cooptados, adsorbidos, deshistorizados, desestructurados y negados. Cualquier momento de negación absoluta de la realidad-abstracta del valor que se valoriza, debe ser oficialmente suprimido, negado como tiempo histórico, según la propia lógica unilateral del intercambio mercantil-capitalista.
Sucede que la historicidad burguesa implica en sus funciones de orden operativo, un tiempo sin historia, un tiempo sin tiempo digamos. De tal modo el presente es un instante de peligro y de incertidumbre permanente que se intenta sin ninguna capacidad ni posibilidad, interpretar la lucha armada revolucionaria de los pueblos de Nuestra América según los términos de la legalidad burguesa y las modas intelectuales de la academia burguesa de nuestro tiempo. El ridículo es histórico, y es un producto de la estupidez y el irracionalismo político, no solo historiográfico…
Un tiempo en donde la lucha de clases está “fuera de la historia”, las huelgas salvajes, las insurrecciones y, las cacerías de comunistas, las bombas atómicas, los nazis ucranianos, no son según nos estimulan a creer, problemas, sino medidas y contramedidas del capital…
Así la historia tiene precio, la política desaparece de la mano del políticidio de los indeseables. Los pobres del mundo tienen precio desde antes de nacer, y según corresponda a la geografía, el color… en fin según corresponda con los intereses del ‘mercado’. Como precio tienen los mercenarios y los agentes de inteligencia que trabajan de periodistas.
Cada paso, cada ámbito en los que se producen y reproducen las formas humanas y tecnológicas de la vida son cohabitados por la negación sistemática de la existencia colectiva, la dinámica es correlativa. Existencia denegada con muerte, con los otros como ajenos, tan ajenos como enajenada la propia vida burguesa.
Desde hace siglos, son precisamente los contrarrevolucionarios y los demagogos fascistas los que hablan y escriben sobre democracia, pero solo la clase obrera la practica y la defiende. “El destino de la democracia, –como escribió Rosa Luxemburg–, está indisolublemente unido a la lucha del proletariado”. La cultura occidental de la muerte sacrificial es la envoltura, la cobertura que habilita la democratización del fascismo.
Nosotr@s que conocemos algo sobre algunas cosas, decimos que la derecha no organiza “escraches”, sino linchamientos.
La dictadura militar y su expresión estructural, el partido militar fue derrotado e inhabilitado políticamente por la lucha democrático-popular antifascista y antidictatorial, el objetivo inmediato de la guerra de propaganda en Argentina es rehabilitar a los históricos socios político-operativos de la inteligencia militar norteamericana-sionista.
No es Unipolaridad vs. multipolaridad. No es Un mundo Multipolar frente a Otro (¿u otros?) mundo Multipolar. El mundo sin embargo, es Un mundo. La guerra es una sola guerra y por ahora, en Argentina, es sobre todo es una guerra de símbolos y significados. Es una guerra por las conciencias y por el futuro.
Un mundo, y este que existe, nuestro mundo, el mundo de los hijos de los guerrilleros argentinos y latinoamericanos secuestrados y desaparecidos por las dictaduras burguesas, es el resultado de todas las guerras y genocidios de la historia de la humanidad. Y la guerra es un fenómeno global desde que la forma mercancía alcanzó su condición universal, desdoblándose, desplegándose, como producto y como reserva de valor.
¿Que mundo puede resultar de una guerra atómica? ¿Será nuestro o quién sabe de quién? Archipiélagos de feudos administrados por la Reserva Federal de USA y población obrera reducida a la servidumbre.
Un mundo sin mundo. Antihumano. Y en ese mundo ¿quién necesita debates sobre la violencia política en la historia? ¿Quién necesita tribunales electorales en el mundo que promete la propaganda neonazi?
Solo se trata de encontrar a los culpables necesarios. Las víctimas sacrificiales.
La maquinaria de guerra capitalista y el rito sacrificial de la compra y la venta, la muerte o la vida. La ritualidad capitalista, la magia del dinero que convierte al más imbécil y mediocre payaso aprendiz de mafioso, o a la más estirada muñeca cocainómana de universidad privada en “líder democrático”, custodio y cruzado de los ‘valores’ occidentales…
De este modo, decimos, de pie frente a la muerte, que Nosotr@s vamos a defender bajo cualquier circunstancia nuestra heroica historia de lucha contra la basura criminal fascista argentina.
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Contra el Imperialismo y la Oligarquía ¡Luchamos para Vencer!
El Fascismo ¡NO PASARÁ!
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Oficina Internacional – HIJOS. Red Mundial