El portavoz de las Brigadas Qassam, Abu Obeida, pronunció un discurso desde la Franja de Gaza el 19 de enero, en el que reflexionó sobre los importantes cambios provocados por la operación de inundación de Al-Aqsa del 7 de octubre de 2023 y la guerra de 15 meses contra el ejército israelí.

“Han pasado cuatrocientos setenta y un días desde la histórica Batalla de la Inundación de Al-Aqsa, que sin duda puso el último clavo en el ataúd de la ocupación que ahora está camino de desaparecer”, dijo Obeida en un discurso en video transmitido horas después de que entrara en vigor un frágil alto el fuego en todo el enclave.

Obeida destacó que las facciones de la resistencia palestina en Gaza han enviado durante el último año y tres meses “un mensaje al mundo de que la ocupación es una gran mentira, a pesar de la desigual confrontación en términos de capacidades militares y ética de combate”. También destacó que el acuerdo de alto el fuego “podría haberse alcanzado hace un año si hubiera estado en línea con las ambiciones de Netanyahu”.

“La Batalla de la Inundación de Al-Aqsa comenzó en las afueras de Gaza, pero ha cambiado la faz de la región e introducido nuevas ecuaciones en el conflicto con la entidad ocupante… Luchamos junto a todas las facciones de la resistencia como un frente unido en toda Gaza, asestando golpes devastadores al enemigo”, destacó Obeida.

El funcionario de la resistencia también habló sobre los “sacrificios sin precedentes” realizados por el pueblo de Gaza, que ha sido objeto de lo que se ha descrito como el primer genocidio transmitido en vivo del mundo.

«Sentimos el gran dolor que sufre nuestro pueblo, que es el precio que hay que pagar por liberar la tierra, el pueblo y los lugares sagrados», dijo el portavoz del brazo armado de Hamás, añadiendo que «los inmensos sacrificios y la sangre derramada por nuestro pueblo no serán en vano».

Subrayó que Hamás, junto con todas las demás facciones de la resistencia palestina, “está plenamente comprometido con el acuerdo [de alto el fuego]”, pero señaló que cualquier violación israelí “podría poner en peligro” la frágil tregua.

En otra parte de su discurso, Obeida expresó su gratitud al Eje de Resistencia regional y a sus operaciones militares que han buscado poner fin a la campaña de limpieza étnica patrocinada por Estados Unidos.

«Extendemos nuestra gratitud a nuestros hermanos de Ansarallah, a nuestros camaradas de Hezbollah, que pagaron un alto precio en esta batalla, y a la resistencia islámica en Irak. También saludamos a nuestros hermanos de Jordania, que cruzaron las fronteras para enfrentarse a la ocupación», dijo Obeida.

“Agradecemos a nuestros hermanos en la República Islámica de Irán por su apoyo eterno y continuo, y les agradecemos por su participación sin precedentes en esta batalla histórica durante las operaciones ‘Promesa Verdadera’”, agregó.

El esperado alto el fuego en la Franja de Gaza entró en vigor el domingo por la mañana, pese a los continuos ataques israelíes que se prolongaron más allá de la hora prevista. Hamás liberó a tres cautivos israelíes de Gaza, mientras que está previsto que decenas de detenidos palestinos sean liberados de las cárceles israelíes como parte de la primera fase del acuerdo.