Fuente: https://www.wsws.org/es/articles/2023/11/14/0739-n14.html?pk_campaign=newsletter&pk_kwd=wsws                        Patrick Martin                                                                                   14.11.23

Un palestino lleva a un niño herido mientras se ve a palestinos muertos y heridos en el suelo tras otro crimen de guerra israelí, un ataque aéreo frente a la entrada del hospital al-Shifa en la ciudad de Gaza, viernes 3 de noviembre de 2023. [AP Photo/Abed Khaled]

En un incidente repugnante pero poco publicitado durante una sesión de la legislatura del estado de Florida, una diputada republicana se manifestó a favor de matar a toda la población de Gaza. La declaración tuvo lugar en el transcurso de una sesión especial de la legislatura estatal dedicada a Oriente Próximo, convocada por el gobernador republicano Ron DeSantis con el fin de proporcionar munición a su campaña presidencial en apuros.

La sesión se celebró el martes 7 de noviembre por la tarde, un día antes del tercer debate presidencial republicano. Se programó para que DeSantis pudiera afirmar que estaba liderando un esfuerzo para movilizar el apoyo público a Israel.

DeSantis presentó dos resoluciones concebidas para sortear el inconveniente de que la legislatura de Florida no tendría normalmente ninguna ocasión de debatir el tema, ya que la política exterior es competencia exclusiva del gobierno federal. La primera resolución endurecía las sanciones del gobierno del estado de Florida a Irán. La segunda proporcionaba fondos para aumentar la seguridad en las escuelas diurnas judías del estado.

Dos legisladores, uno demócrata y otro republicano, emitieron resoluciones rivales de apoyo al Estado de Israel, y la resolución republicana también pedía el fin de la ayuda financiera del gobierno estadounidense a las organizaciones de ayuda palestinas y denunciaba las protestas en los campus contra los bombardeos de Gaza. Pero la sesión se convulsionó cuando una única demócrata, Angie Nixon, de Jacksonville, presentó una resolución en la que deploraba el enorme número de muertos en Gaza e instaba a un alto el fuego.

Aunque su resolución comenzaba con una denuncia de Hamás por el ataque del 7 de octubre que rompió las líneas militares israelíes y mató a unos 1.200 israelíes, ninguno de los dos partidos controlados por las corporaciones aceptó que se reconociera la matanza masiva que se está produciendo en Gaza.

La resolución de Nixon fue secundada por Anna Eskamani, la primera iraní-estadounidense elegida para la legislatura estatal, que se negó a retirarla a pesar de las súplicas de la líder de la minoría demócrata, Fentrice Driskell. El presidente republicano de la Cámara, Paul Renner, ordenó que se sometiera a votación nominal, con la esperanza de ‘avergonzar’ a los demócratas, pero la resolución fue finalmente derrotada por 104 votos a favor y 2 en contra, con el único apoyo de Nixon y Eskamani.

El único legislador republicano judío, Larry Fine, de Miami, vilipendió la resolución, afirmando que su referencia a la ‘Palestina ocupada’ era antisemita. ‘Si votan a favor de esto’, dijo, ‘están poniendo en peligro a mi hijo y a todos los niños judíos del estado’. Calificando a Nixon y Eskamani de ‘malvados’ por oponerse a los asesinatos masivos en Gaza, cuestionó la cifra de muertos entre los palestinos que figura en la resolución. ‘Están repitiendo una cifra que dan los terroristas’, dijo, sugiriendo que muchos o la mayoría de los muertos eran ‘terroristas’.

La declaración abierta de apoyo al asesinato en masa vino de otra republicana, Michelle Salzman, de Pensacola. Cuando Nixon subió al estrado para hablar a favor de la resolución, prácticamente toda la legislatura estatal, demócratas y republicanos, se pusieron en pie y le dieron la espalda.

‘Estamos en 10.000 palestinos muertos. ¿Cuántos serán suficientes?’ preguntó Nixon. Una voz -posteriormente identificada como la de Salzman- gritó: ‘Todos’.

Nixon se quedó perplejo, pero llamó la atención de toda la legislatura sobre esta declaración de apoyo al exterminio de la población de Gaza. ‘Uno de mis colegas acaba de decir ‘todos ellos’. Vaya’, continuó. ‘¿En eso nos hemos convertido en este estado? ¿No nos importan los bebés inocentes que no tienen la oportunidad de soplar la vela de su primer cumpleaños?’.

El comentario de Salzman provocó una furibunda reacción pública. Los periodistas formularon preguntas y Nixon exigió su dimisión. La legisladora estatal negó inicialmente que lo hubiera dicho, y dijo a WEAR News: ‘Eso es falso. Deberías saberlo’.

Más tarde publicó un tuit en el que reconocía sus palabras, pero afirmaba que ‘todas ellas’ se referían a Hamás y no a la población de Gaza en su conjunto. Escribió: ‘El martes, me sentí orgullosa de estar junto a mis colegas en absoluta solidaridad con el derecho de Israel a defenderse. También comenté que todos y cada uno de los terroristas que atacaron Israel y desencadenaron esta guerra deberían ser eliminados: TODOS’.

Más tarde se retractó aún más, tuiteando: ‘Es la más horrible de las implicaciones. Lo siento muchísimo por la más mínima sugerencia de que yo quisiera eliminar a toda una comunidad. Mis comentarios se referían sin paliativos al régimen de Hamás; NUNCA dije Palestina. Como esposa y madre de un judío, apoyo firmemente a Israel. Pero la desgarradora pérdida de vidas palestinas nunca es un deseo mío’.

Nixon describió más tarde la atmósfera política fascista en la legislatura estatal. ‘Hay legisladores de FL que piden la aniquilación total de un grupo de personas en el hemiciclo. Algunos comparten fotos de bebés palestinos muertos entre los escombros con citas que dicen ‘Gracias’. Los hay que llaman ‘terroristas’ a sus colegas’.

El incidente del martes pasado ha sido acogido prácticamente con silencio por los medios de comunicación corporativos, en consonancia con su sistemático bloqueo de las protestas masivas contra el genocidio de Gaza. El New York Times, el Washington Post, el Wall Street Journal, la CNN y las cadenas de televisión no han dicho nada, aunque el comentario de Salzman fue ampliamente difundido por los medios de comunicación locales y estatales. Un único segmento de ocho minutos en MSNBC, que incluye una entrevista comprensiva con Angie Nixon, es la única cobertura nacional significativa hasta el momento.

Este acontecimiento permite vislumbrar el abismo político que se ha abierto entre, por un lado, los dos partidos de la élite empresarial gobernante, ambos profundamente implicados en algunos de los peores crímenes del siglo XXI, y, por otro, la gran mayoría de la población —trabajadores y jóvenes—, que cada vez más y públicamente manifiestan su oposición a estos crímenes.

(Artículo publicado originalmente en inglés el 12 de noviembre de 2023)